1.- Cambios en la ciudad

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NdA: Para entender está historia deben leer las primeras dos partes de mi historia Flash, el camino hacia ti, es decir, hasta el capítulo 44

Primera parte
"La llegada de la Cabal"

Oliver PoV

Poco a poco el sol se asoma, debería ser un hermoso amanecer en este departamento con una vista envidiable de la mejor zona de la ciudad, pero no es así, se siente como un vacío. Claro que llevo horas despierto esperando a que mi teléfono suene, ya sea por mi trabajo matutino por el nocturno, o lo que sea que me sirva de excusa para salir de la cama. Pero como en los últimos días, no ocurre, así que termino por salir de la cama sin saber que hacer en las próximas horas.

Al llegar al baño me miro al espejo, han pasado unos meses y aún no creo lo que pasó, abro la llave de agua usualmente usaría agua caliente, pero desde ese día solo puedo usar fría, es lo único que creo que me aclara la cabeza y me da el ánimo para pensar en el día en la alcaldía y las noches en bajo la capucha.

Me doy una ducha para la cuál si ocupo un poco de agua caliente y después termino con un chorro de agua fría, al salir quito el vapor del espejo recargo mi cabeza en él, no tengo ánimos de rasurarme, espero que todos comprendan, si no, espero que Rene o Quentin inventen algo creíble, y no como "se me terminaron las hojas", saco el traje que ayer eligieron mis asistentes, voy a la cocina y sin pensarlo comienzo a preparar un desayuno para dos, desearía que fuera para tres.

Escucho como se abre la puerta, William baja arreglado para la escuela, deja su mochila de Flash en la mesa, no me extraña, creció en Ciudad Central, no dudo que directa o indirectamente mi amigo lo salvara, pero supongo que no puedo decirle "oye Barry, ¿Crees poder venir, hablar con mi hijo y convencerlo que deje de culparme sobre la muerte de su madre? O mejor, que yo dejé de hacerlo" o "Sabes, conozco a Flash, le enseñé algunas cosas, incluso le disparé en la espalda" debería omitir esa última parte pero sé que no es posible aunque quisiera, William y Barry tienen cosas en común, sus madres fueron asesinadas por un archienemigo, en el caso de Barry Thawne, en el mío Chase.

William toma su desayuno y se marcha en silencio, le digo que Raiza pasará por él y que es posible que pueda volver a casa para comer juntos, pero no dice nada, al final, supongo que sabe la difícil que es poder cumplir mi promesa, cuando cierra la puerta golpeo la mesa, respiro profundo, vuelvo a golpearla hasta que creo que se romperá al siguiente golpe, tengo que comprar muebles más resistentes.

Miro mi mano, por suerte no me hice daño, lavo los trastes y bajo al auto, ahí René habla con alguien, parece que es importante, y personal ya que se gira para hablar, entro al auto y unos minutos mas entra él, pregunto si todo está bien, él asiente, al parecer era de servicios sociales, finalmente dentro de poco terminarán las audiencias para que tenga la custodia de su hija, claro si no pasa nada malo como el que sea secuestrado por el viejo fiscal de distrito.

Laurel, Quentin y yo abogamos por el y mostramos evidencia de que había faltado a la audiencia de custodia de Zoey no por voluntad propia, sino porque lo secuestraron.

Cuando estamos por llegar mi mirada se detiene en las dos personas frente a mi y de inmediato sé que va a ser de esos horribles días, René pregunta si quiero algo, abre el minibar, y me extiende una botella de agua helada, la abro y doy un enorme trago, en el mejor de los casos será una buena excusa para tomarme un respiro en el baño.

René me dedica una de esas miradas de "¿Listo jefe?" asiento, abre la puerta y tras bajar es mi turno, supongo que es una suerte que el vicealcalde y una de las asistentes del fiscal de distrito mas importantes sean padre e hija ya que Quentin y Laurel se turnan para decirme lo que ocurre, algunas cosa necesitan arreglo en las calles, algunos casos de la fiscalía que me involucran de una u otra forma.

Arrow, El camino del héroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora