Un Contrato de Dolor

Té.

Katsuki había dormido extrañamente bien, sonaba cruel pero no se arrepentia de haber echo eso a aquel chico, pues de alguna manera se sentía afortunado de haber sido el primero de su destinado, pero claro que no se arrepentia.

Se levantó y se arregló para dirigirse a la oficina estuvo revisando algunos papeles, pero no sé estaba concentrando en lo absoluto, el recuerdo del omega con el que pasó la noche no dejaba de atormentarlo, sentía la necesidad de ir nuevamente a con el Omega.

Gruño molesto y ignoro su instinto.

Katsuki pasó toda la tarde intentando concentrarse pero no lo logro, estaba más que molesto, quería ir con él omega, quería sentir su aroma, si boca se sentía seca cada que pensaba en él. Eso lo molestaba mucho, sabía que era su instinto, porque su lado racional era otra cosa distinta, no quería involucrarse con un sirviente, le parecía muy desagradable pues creía que sus súbditos lo iban a juzgar.

Decidió tomarse un respiro, de todas formas no podía trabajar sin pensar en el día anterior.

Izuku había despertado algo tarde, su cuerpo estaba muy adolorido, le dolía mucho en su zona íntima, había estado en celo durante el sexo, pero una vez paso el calor el dolor comenzó a sentirse.
Las sábanas tenían algunas manchas de sangre y fluidos tanto suyos como del Alfa, Izuku aguantó el dolor y se levantó para quitar las sábanas sucias, no pudo evitar lagrimear al recordar el suceso del día anterior.

Afortunadamente el Alfa no iba hacer nada contra él, podría seguir trabajando y no preocuparse de eso; "olvidalo" había dicho e Izuku no podía esperar mejor decisión.

Cuando estaba cambiando sus sábanas tocaron la puerta de su habitación, Izuku trago saliva, pues no era Denki, él no solía tocar simplemente entraba, Izuku guardo las sábanas en el cesto y abrió la puerta algo nervioso.

- Hola, el Alfa ha enviado esto para ti.- dijo una chica, con una bandeja está tenía una tetera y una taza.

-eh...-

-Debes tomarlo todo, no hace falta que sea seguido, pero si debes terminarlo para que funcione, ¿está bien?- dijo la chica pasándole la bandeja.

Izuku estaba confundido pero aún así asintió - Está bien, gracias- contestó.

Puso la bandeja en un mueble y abrió la tetera, era té, lo pensó un momento y recordó que cuando sus amigas se relacionaban con un Alfa solían tomar un té como anticonceptivo.

Se sintió un poco avergonzado de aquello, no imagino que el tendría que beber eso, o al menos no hasta que estuviera casado.

Como la chica había dicho tomó una taza de aquella bebida, no olía tan mal solo eran yerbas, Izuku respiro hondo y finalmente decidió tomar un poco, casi lo escupió al sentir el fuerte sabor a yerbas, amargo y desagradable, no le había gustado en lo absoluto y solo pensar que tendría que terminarlo, aunque sonaba mejor que quedar embarazado y lo que más lo asustaba; del Alfa.

Embarazado.

En otro contexto le habría hecho inmensamente feliz esa noticia, pero justo ahora solo pensarlo le ponía a sudar.

Izuku tomo aire profundamente para lograr tomar aquella bebida de casi un tragó.

Era desagradable, si, pero tenía que hacerlo.

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