Genuino Sentimiento (Aether x Shenhe)

Capitulo 2

Mientras una aprendiz de los Adeptus y un retirado e incognito Arconte de los Contratos se encontraban en una travesía hacia la Nación de la libertad, cierto viajero de otro mundo que apareció de la nada hace un tiempo y su comida de emergencia flotante disfrutaban de un pequeño descanso de sus labores en la taberna en la cual estaban laborando temporalmente para juntar un poco de Mora de la cual ambos no disponían mucho.Obsequio del Ángel, Mondstadt...-¡Ya era hora de un descanso! Paimon siente como si hubiera trabajado por siglos – La pequeña hada que siempre acompañaba al viajero de otro mundo se había estirado con ganas, como si todo lo que dijo fuese verdad – -Pero si tu no hiciste nada, soy yo quien tiene que preparar las bebidas, tu solo las entregas cuando los clientes van a una mesa – Aether trataba de descansar lo más que podía después de un día algo ajetreado y complicado como era de costumbre puesto que las órdenes de los clientes llegaban a ser un tanto complicadas y difíciles de descifrar –-¡Oye! Paimon se tomaba las bebidas que salían mal o que los clientes olvidaban recoger ¿no recuerdas? Además, entregar bebidas es un trabajo arduo ¿sabes? – La pequeña hada peliblanca actuó ofendida mientras se cruzaba de brazos y hacia mala cara –-Si claro, lo que digas – Aether decidió repasar las bebidas que podía preparar mientras fuera bar tender en la taberna de cierto justiciero nocturno cuya identidad aún es desconocida – Mientras Paimon seguía actuando de forma orgullosa y digna, el viajero miró el menú que había disponible hasta el momento y del cual él estaba a cargo, además de que en los últimos días había sido sorprendido por varios conocidos y buenos amigos, tanto de Mondstadt como lo es Rosaria, Kaeya y Eula hasta de Liyue siendo Ningguang y Beidou, lo cual fue bastante curioso para el viajero puesto que no esperaba verlas tan lejos de la Nación de los contratos. Cada uno de esos encuentros fue del agrado para Aether y para Paimon, y hasta el momento el encuentro que tuvo con Eula fue el que más ha impactado al viajero de otro mundo, puesto que pudo ver un poco más de esa personalidad oculta que tiene la Caballero de sangre Lawrence, puesto que por fuera podría parecer intimidante e inclusive una digna representante de una de las familias más longevas de todo Mondstadt, pero la realidad era que Eula tenía su lado blando y débil, al menos cuando estaba ebria. Aether mientras pensaba en la convivencia de cada uno de sus amigos y conocidos que ha visitado el Obsequio del Ángel, no pudo evitar pensar en cierta persona a la cual le había hecho una promesa muy importante, el haber pensado en el dúo de Liyue y la Caballero Cryo, no pudo evitar pensar en Shenhe y en su situación en la sociedad humana.-¿En qué piensas Aether? Has estado mirando el menú durante un rato – Paimon había notado desde hace un rato la mirada perdida y las caras que había hecho el viajero hace unos instantes –-Solo recordaba las visitas de varios conocidos, fue agradable la visita de la Señorita Ningguang y de la Capitana Beidou, jamás creí verlas fuera de Liyue, es un tanto curioso – Aether recordó la pequeña convivencia que tuvo con la mayor empresaria de Liyue y quizá de todo Teyvat y de la marinera más experimentada y ruda de todo Liyue y de las siete naciones quizá – -Jiji, fue un tanto sorpresivo, pero Paimon se alegró de ver a Ningguang y a Beidou – Paimon notó la expresión de su compañero, sabia que había algo más que tenía que contar –-También pensé en Shenhe, espero que esté bien y que no se abrume allá en Liyue – Aun con esa preocupación, el viajero también sentía algo de culpa por haberla dejado sola – -Paimon al ver la expresión tan decaída del viajero inmediatamente intentaría elevarle el ánimo – No estes triste, Paimon también la extraña, pronto volveremos a Liyue ¿no es así? Jeje.Aether permaneció en silencio un instante, si bien volver a ver a Shenhe estaba en sus planes, había algo que quizá resulte como una gran oportunidad para que la Damisela Cryo continúe desenvolviéndose en la sociedad humana y de paso, disfrutar de otro festival y celebración de los cuales estaba ansiosa por vivir otra vez.-Estaba pensando en invitar y llevar a Shenhe a Inazuma, ya sabes, al festival Irodori que será pronto – Aether dibujó una sonrisa al recordar el buen rato que pasó al lado de Shenhe en el Rito de la Linterna, él jamás olvidaría la dulce y bella sonrisa que le dio aquella noche –-¡Paimon piensa que es una gran idea! Paimon está segura de que a Shenhe le gustaría venir al festival del inodoro – La alegría en la pequeña hada era desbordante mientras más amigos, mejor – -Irodori Paimon, es Irodori... - Aether se llevó la mano al rostro ante lo que dijo su pequeña acompañante – Solo espero que ella quiera venir y que no esté molesta por haber pospuesto mi promesa - -Nada de eso, Shenhe vendrá con nosotros, Paimon está segura de ello – La pequeña hada flotante de pronto sintió mas ganas para juntar Mora y de poder ir a Liyue a invitar a la aprendiz de Preservadora de Nubes - -Solo un par de encargos mas y por fin recuperaremos lo que gastaste en el Rito de la Linterna y los días siguientes a ese – el viajero se cruzó de brazos y lanzó una mirada disgustada a su compañera quien solo río y se rascó la cabeza con algo de pena – Será mejor que regresemos a trabajar, no quiero que me descuenten el tiempo extra que tuvimos de descanso – Aether junto a Paimon bajarían al primer piso donde estaba la barra y donde estaban la mayoría de clientes - ...Mientras tanto, el viaje del Retirado e Incognito Rex Lapis junto a La Divina Damisela de la Devastación se veía a cada momento con contratiempos, ambos aun no terminaban por salir de las montañas al norte de Liyue ya que siempre se caracterizó por ser una zona llena de monstruos y bandidos los cuales se encargaban de entorpecer y demorar el viaje de Shenhe y de Zhongli hacia la nación de la libertad.-Creo que ese era el último – Zhongli guardó su lanza y se limpío su ropa del polvo de la lucha contra un campamento de Hilichurls –-Tch, que molestia, solo me hicieron perder el tiempo – Shenhe de igual forma guardó su lanza, se limpío el polvo de su ropa y comenzó a caminar deprisa otra vez – -No te desesperes, aun vamos en buen tiempo, te has encargado muy rápido de todos tus obstáculos – Zhongli alcanzó a Shenhe y siguió su ritmo de caminata – veo que Preservadora te enseñó bien a usar la lanza - -Mi maestra dijo que mi instinto asesino me ayudaría a usar y a mejorar mis habilidades con la lanza, hasta el momento no se ha equivocado – Shenhe respondió un tanto indiferente y sin desviar la mirada del camino – -Veo que es mejor tenerte como aliada que como enemiga – Zhongli recordaba las historias de la Grulla de la montaña Aozang cuando ella rescató a una pequeña niña de escasa edad a quien encontró sola en una cueva donde yacía un monstruo –-Mi lanza es ciega, no distingue aliados de enemigos, me defenderé no importando de quien se trate – Shenhe por un momento recordó su pasado de niña, como luchó violentamente y sin descanso contra el monstruo que quería arrebatarle la vida e incluso recordó cuando quiso atacar a su maestra en el momento que la conoció puesto que creía que se trataba de otro monstruo que intentaba liquidarla – -¿Eso incluye a Aether? – El viejo arconte preguntó un tanto curioso, lo que había dicho la aprendiz de la Grulla Aozang le hizo pensar en esa posibilidad – -Shenhe se sorprendió por la pregunta que le hizo su guía hacia Mondstadt, era obvio que la había tomado por sorpresa e inclusive se cuestionó lo que anteriormente había dicho – No... jamás podría hacerle algo a él y estoy bastante segura que Aether jamás haría algo para lastimarme. -Ya veo – Zhongli sonrió ligeramente ante la respuesta de la usaría de visión Cryo, era obvio que el viajero era la persona en que más confiaba Shenhe – Si, estoy seguro que el viajero no le haría daño a ninguno de sus amigos o seres cercanos – Zhongli divisó como su acompañante formó apenas una pequeña y casi imperceptible sonrisa a la vista de cualquier mortal - Todavía no me dices porque decidiste ir hacia Mondstadt.-Voy a ver a Aether y a llevarlo de vuelva a Liyue conmigo – la idea de Shenhe al llegar a su destino era encontrar al viajero de otro mundo y llevarlo hacia Liyue sin preguntarle, ya que en su mente esa parecía ser la forma más fácil de lograr su cometido – solo así volveré a sentirme bien en el mundo humano.-¿Estás segura de que es necesario que lleves de vuelta a Aether hacia Liyue? – Zhongli parecía algo extrañado –-Si... es necesario para que yo me adapte al mundo humano otra vez – Shenhe respondió sin haber meditado bien su respuesta, solo sabía que tener al lado al viajero hacia que ella se sintiera a gusto y feliz – -Pienso yo que no es tanto el lugar sino la compañía, tal vez buscas al viajero porque sientes la calidez del mundo humano a su lado – el Arconte esperaba una respuesta por parte de la aprendiz de los adeptus, pero solo hubo un silencio – Mientras Zhongli pensaba que había molestado a Shenhe con sus palabras, la realidad era que ella las meditaba lo mas detenidamente posible, puesto que lo que dijo el Hombre de la Funeraria el Camino, puede que tuviera razón, aunque no lograba comprenderlo y entenderlo del todo, aun tenia mucho que aprender y sobre todo sentir. Casi al finalizar el día, el dúo de Liyue apenas llegaría a la mitad del recorrido, la frustración en Shenhe era notoria, puesto que habían demorado mucho en su viaje, puesto que no había considerado tantos imprevistos en el camino, como Hilichurls, Ladrones de Tesoros, e inclusive algunos desastres en las rutas puesto que tuvieron que desviarse de su camino en varias ocasiones. Había sido un mal inicio de viaje, tanto así que Shenhe creía que debía ser obra de la maldición que cargaba consigo, pero aun con eso, ella no desistiría de su objetivo el cual era llegar a Mondstadt, pero como era de costumbre ese día, había una vez mas un contratiempo. -¿es necesario esto? – Shenhe seguía a Zhongli, la mujer Cryo se mantenía concentrada en su camino y no quería más contratiempos –-Casi cae la noche, lo mejor será pasar la noche aquí y continuar mañana temprano – el arconte incognito siguió su camino a la Posada Wangshu –-Entiendo, olvidé por completo que ya no es joven, escuché que los ancianos deben dormir mucho para mantener sus energías – Shenhe continuó caminando ignorando el hecho de que Zhongli se quedó parado pensativo por lo que ella dijo – -Hum, solo tengo seis mil años, estoy a mitad de mi juventud todavía... - Pensó para si mismo Rex Lapis retomando la marcha hacia la posada –Mientras que Zhongli comenzaba a sentirse como en casa, Shenhe decidió alejarse del resto de personas y no encontraría mejor refugio que la terraza de la posada donde había muy poca gente. Lo que tenía que admitir la Damisela de la Devastación, era que la vista era espectacular, se podía ver parte del Espinadragon, la blanca nieve realzaba con la luz de la luna y el cielo estrellado que adornaba el cielo transmitía paz a Shenhe quien decidió viajar un momento por sus recuerdos. No era la primera vez que Shenhe visitaba la Posada Wangshu, ya en el pasado había venido al lado de Aether luego de haberle ayudado y acompañado con un encargo sobre despejar la zona que estaba repleta de varios Slimes elementales, ella solo recordaba el agradable momento que pasó al compartir una pequeña comida con el viajero y su entrometida compañera flotante, ese y varios recuerdos gratos que la hacían querer ya estar en Mondstadt. ...La noche avanzaba lento y ella no iba a esperar, no sabiendo que su destino estaba del otro lado de aquella montaña gélida. Shenhe recordaba algo acerca de la ruta que habia que tomar a partir de la posada puesto que Zhongli no paraba de contar historias sobre los viejos caminos que conectaban Liyue y Mondstadt. Ya estaba todo decidido, pero cuando justo antes de poder continuar su viaje, pero antes de partir, Zhongli llegaría con ella. -Lo siento, pero voy a continuar con o sin usted, ya he perdido mucho tiempo – Shenhe miró al elegante hombre que tenia un inmenso conocimiento –-Sabes como llegar, lo que no sabes es donde buscar al viajero – Shenhe desvió la mirada y maldecía, otra cosa que no había considerado –-Descuida, no le daré mas vueltas a tu asunto, me encontré con él en un lugar llamado 'El Obsequio del Ángel', puede que ahí lo encuentres todavía – Zhongli solo observó como la aprendiz de la Adeptus agradeció con la cabeza y se fue en silencio –Shenhe continuo solitaria su camino, sabia que la siguiente parada era la entrada de piedra y de ahí seguir cierto sendero hasta llegar a un viñedo del cual Zhongli le había hablado durante su viaje desde la montaña Aozang. El camino seguía siendo igual de peligroso, encontrándose en el camino con mas Hilichurls y Ladrones de Tesoros, e inclusive uno que otro slime que marcaba territorio, pero no eso logró detener a Shenhe quien arrasó con quien se metiera en su camino....El día para Aether marchaba en orden como lo era últimamente, el viajero de otro mundo disfrutaba de una tarde tranquila en compañía de Diluc que venia a supervisarlo y a hacerle compañía. -Has hecho una labor impecable aquí, realmente estoy agradecido contigo por haber ayudado por aquí – Diluc simplemente bebía de un jugo preparado por Aether mientras escuchaba a un Bardo tocar sus melodías – -Quien debería darte las gracias soy yo, la paga que me diste fue buena y mas la propina de la gente, créeme, mi situación financiera se ha estabilizado – Aether observaba su bolsa de Mora y de inmediato la guardó antes de que cierta hada se la quitara de las manos –-Siempre puedes venir a conmigo si necesitas ayuda, es lo menos que puedo hacer por ti – Diluc daba un tragó a su bebida que le traía muchos recuerdos del pasado y de su padre – hoy es tu ultimo día de contrato, dime ¿Qué harás después?-Afortunadamente Bennett consiguió un encargo donde la paga es muy buena, mañana iremos a espinadragon a encargarnos de un Lawachurl que no deja explorar la montaña a los aventureros – Aether todavía recordaba como en la mañana un sonriente Bennett entró a la taberna con una emoción desbordante mientras le contaba a su amigo el gran encargo que tenían – luego de cobrar la recompensa, regresare a Liyue y buscare a una persona para invitarla a un festival en Inazuma.-Ya veo, al parecer encontraste a alguien que sea especial para ti – Las palabras del Héroe Oscuro enrojecieron a Aether, quien también había pensado que la invitación que le haría a Shenhe seria como una cita – Aunque Aether haya salido con otras mujeres en el pasado, él no las consideraba como 'citas' realmente, las más cercana fue precisamente con Shenhe en el Rito de la Linterna reciente, así como hace un buen tiempo cuando él y Ayaka regresaban del festival en la isla Amakane, y siendo la menos parecida a una cita pero que fue mal interpretada como una, fue con Lisa cuando ella y él buscaban unos cuantos libros que habían sido prestados a ciertas personas de Mondstadt....A las afueras de Mondstadt, una extraña forastera cruzaba el puente de piedra que conectaba la ciudad con el resto de la región, Shenhe por fin había llegado a su destino, y eso era lo único que le importaba, no le importaba haber ahuyentado a las palomas que le hacían compañía a un solitario niño al comienzo del puente. -Mondstadt... - Shenhe observaría la entrada de la ciudad, era muy diferente a Liyue puesto que esta estaba amurallada – Aether... - La aprendiz de los adeptus decidiría por fin cruzar la entrada, ahora en busca del lugar que le fue mencionado por Zhongli – -B-bienvenida a Mondstadt señorita – Los guardias de la entrada quedarían sumamente hipnotizados por la belleza de Shenhe quien pasó de largo ignorándolos – Los guardias no fueron los únicos en haber desviado su mirada hacia Shenhe, otras personas que caminaban por ahí también lo hicieron, unos por la belleza que era la mujer de cabello blanco, y otros simplemente por el como vestía teniendo como conclusión que no era de Mondstadt sino quizá de Liyue, e inclusive se especuló que quizá se trataba de una mítica Adeptus de esas tierras. -Tanta gente... espero que Aether esté por aquí – Shenhe comenzaba a odiar las miradas que recibía y comenzó a caminar por la ciudad – Comenzaría la nueva travesía de Shenhe que era encontrar algo llamado 'El Obsequio del Ángel', claramente decidiría buscar por su cuenta ya que no tenía la intención de relacionarse con la gente del lugar, aunque sea solamente preguntar por una simple dirección. Shenhe durante su recorrido por Mondstadt haría una pequeña parada en la gran estatua del Arconte Anemo, de quien Aether le había hablado antes, quizá si ella recordaba los lugares donde ha estado el viajero ella podría encontrarlo mas fácilmente, o así era su lógica, y así comenzó a hacer memoria de todo lo que Aether le había contado de Mondstadt, pero su concentración se vio interrumpida cuando alguien lo mencionó a él. -Vamos, vamos, no creo que sea para tanto, Aether solo trataba de ser amable – Una joven chica vestida de rojo y blanco, con un adorno en la cabeza parecido a unas orejas de conejo, caminaba en compañía de una mujer mas grande que ella, tanto en edad como en altura con ropas más elegantes – -No pasaré eso por alto, voy a vengarme de Aether por haberme visto en un momento de debilidad – Eula con su particular orgullo Lawrence recordaría con algo de vergüenza aquella tarde noche donde Aether la había consolado y mimado por el mal momento que había vivido ese día –-¿Ella se vengará... de Aether? – Shenhe escuchó fuerte y claro la conversación de ambas chicas que iban en dirección a la Sede de los Caballeros de Fanonius – No lo permitiré – La aprendiz de Adeptus hizo aparecer su lanza y con ello su instinto protector, nadie le haría daño a la persona mas importante para ella – -Vamos, apuesto que te sentiste feliz de que alguien mas no te menosprecie por tu apellido Eula jeje – Amber mantenía su alegría, puesto que al final ella sabia que Eula estaba agradecida con el viajero por esa muestra de aprecio hacia ella –-Hum, mas que sentirme feliz fue como... – Eula presintió el peligro y de inmediato actuó para defender a su amiga – ¡Cuidado! -¿Qué pasa? ¿Quién es ella? – Amber desde la seguridad del abrazo de la Lawrence observaba a la chica que había clavado su lanza en el suelo justo en el lugar donde ellas estaban caminado –-¡¿Quién demonios eres tú?! – Eula soltaría a Amber y haría aparecer su Mandoble para luego adoptar una posición defensiva – -Nadie le hará daño, yo lo protegeré de todo peligro – El tono de voz apagado y serio de Shenhe no le daría buena espina a Amber y a Eula, mucho menos cuando apuntó su lanza hacia ellas – -¿De quien hablas? ¡Estás loca! ¡Me vengaré por esto, lo juro! – Eula pasaría de tener una postura defensiva a una totalmente ofensiva, no sabia quien era la chica de cabello blanco y ropas extrañas, pero solo sabia que su presencia en Mondsradt no era nada bueno – ...Mientras tanto en Obsequio del Angel, todo marchaba con normalidad, comenzaba esa hora del dia donde todo mundo podía ir a tomar una cerveza o un bueno vino mientras disfrutaba de un buen ambiente en compañía de amigos y de historias de los bardos a través de sus canciones. Aether junto Paimon disfrutaban de unos jugos preparados por su patrón mientras que él atendía el negocio fuerte de la taberna el cual era la venta del alcohol ya que el viajero no sabía y no estaba preparado para servir esa clase de tragos, la ultima vez que se le dio la confianza a alguien inexperto, solo se agradece que dicha persona que tuvo la desgracia de probar un trago del que preparó aquel inexperto bar tender aun esté viva aun pese a su inmortalidad. -Sigo creyendo que exageran lo que sucedió – Aether escuchaba junto a Paimon la canción de un Bardo, la cual hablaba del gran Héroe que venció a Stormterror y que trajo paz y prosperidad a la nación de la libertad – -Son bardos, tienen que hacer que las historias normales suenen como una verdadera odisea para ganarse la atención de la gente – Diluc notaba el revuelo que había a las afueras de la taberna - ¿Qué sucede? Antes de que el ex-caballero de Favonius saliera para ver que era lo que estaba pasando, un aventurero había entrado a la taberna, se le notaba exaltado y con falta de aliento, parecía que avisaba a todo Mondstadt de lo que estaba pasando.-¡Hay una pelea en la estatua del Arconte Anemo! ¡Es una caballero de Favonius que al parecer está luchando con una Adeptus de Liyue! – El aventurero rápidamente captó la atención de todos los que estaban en la taberna –-¿Una Adeptus de Liyue?... – Aether al principio tomaba las cosas con calma, hasta que después de pensar analizar las cosas fue cuando se le notó exaltado y preocupado – Espera... ¿¡Acaso será?!,,, ¿¡Como luce esa adeptus!?-Oh, pues es muy hermosa, su vestimenta parece el de una grulla, tiene el cabello blanco y un adorno en el – el aventurero rápidamente recordó las características de la adeptus que en este momento estaba batiéndose en duelo con una Caballero de Favonius – -¡Si es ella! ¡Diluc, tengo que ir! ¡Rápido Paimon! – Aether salió de la taberna de forma apresurada empujando al aventurero que había venido a avisarle a todo mundo –Pronto todos los que estaban en la taberna de inmediato vencidos por la curiosidad y el morbo de ver una pelea entre una hermosa chica y una Caballero de la Capital quisieron ir a presenciar dicho enfrentamiento, pero antes de salir en estampida de la taberna, el dueño de esta se colocó frente a la puerta impidiendo el paso. -¿A dónde creen que van? Aún tienen que pagar esos tragos – Diluc mas que por el dinero, lo hacía por Aether, comprendía que la situación que se presentaba tenia que pasar lo más desapercibida posible –-¡Vamos! ¡Muévete! -¡Si! ¡Queremos ver la pelea! Cada una de las personas que protestaba no precisamente estaba en sus cincos sentidos, y solo Diluc sabia una forma de disuadir la situación. -¿Quieren que lo resolvamos como la ultima vez? Bien – En la espalda del excaballero pelirojo apareció un mandoble característico de los miembros de la orden de Favonius – por mi mejor, me ahorran la molestia de tener que informar de esto a los incompetentes de los Caballeros – Al decir eso, un hombre moreno y carismático le vino a la mente – No le daré el gusto de verme pedir ayuda a ellos – y con la forma tan razonable para solucionar las cosas, los borrachos asustados regresaron a sus mesas mientras desembolsaban el dinero para pagar su consumo – Aether corría lo más rápido que podía hacia la estatua de venti, el caballero honorario hacia todo lo posible para abrirse camino hacia el lugar donde se llevaba a cabo una feroz batalla ya que los mismos caballeros de Favnonius fueron avisados de la situación y comenzaron a hacer retenes para evitar que la gente se acercara hasta que trajeran a la Gran Maestra Intendente de los Caballeros de Favonius. La pelea entre las usuarias Cryo era un tanto igualada, apenas ambas lograron hacerse un poco de daño del cual no tan grave, si bien el lugar estaba lleno de lo que sobraba de los caballeros de Favonius, por ordenes de Eula quien luchaba contra Shenhe prohibió que alguien mas se metiera a la pelea, unos pensaron que era para proteger a las personas, pero en realidad era porque Eula quería vengarse de la mujer que quiso hacerle daño y porque sus compañeros serian un estorbo para ella. Eula estaba decidida en acabar con su atacante, se saltaría el proceso de capturarla y de saber cuales fueron sus intenciones, mientras que Shenhe estaba dispuesta a eliminar una amenaza para Aether. A los pies de aquella estatua al Dios de la Libertad solo se escuchaba el sonido de metal chocando con metal, así como una lucha impresionante, ambas no median sus golpes, era una suerte que los daños colaterales no fueran tantos. -¡Acabaré con esto! – Eula iría con toda su fuerza a atacar a la misteriosa mujer de cabello blanco –-Nadie le hará daño a él, no permitiré que lleves a cabo tu venganza – Shenhe también a gran velocidad se abalanzó con su lanza contra Eula –Ambas mujeres Cryo estaban por intercambiar letales golpes con sus respectivas armas, solo era cuestión de tiempo para saber quién sobreviviría a cada uno, pero antes de que eso pasara, Aether aterrizó interponiéndose en la carrera de ambas.-¡Eula! ¡Shenhe! ¡Deténganse! – No era la primera vez que Aether se metía en medio del peligro y de la muerte, pero esta vez parecía que si podría salir muerto –-¡¿Aether?! – Eula se sorprendió ante la importuna presencia del viajero y de inmediato intentó desviar el golpe mortífero de su mandoble –Shenhe reaccionó igual que Eula, se alegró de ver al chico que estaba buscando y por quien hizo un largo viaje, pero se sorprendió mas al ver que Aether estaba en el camino de su lanza. Ambas mujeres lograron desviar sus ataques lejos del cuerpo de Aether quien agradeció a los arcontes por haber salido ileso, tanto Shenhe como Eula acabaron en el suelo ya que no habían medido su fuerza. -¿¡Que demonios?! ¡Pude haberte matado! ¡Esta no es la clase venganza que tenia preparada para ti! – Eula rápidamente se levantó del suelo furiosa por la imprudencia del caballero honorario – -¡Espera! ¡no le hagas daño! – Aether seguía interponiéndose entre la Dama Cryo de Mondstadt y la Dama Cryo de Liyue – Shenhe, detente, no debes...-Yo te protegeré de ella – Sin dejarlo terminar sus palabras, Shenhe acercó a Aether hacia ella resguardándolo entre sus brazos – -¡Suéltalo! ¡Eres una amenaza para él! – Eula con cautela levantó su mandoble y pensaría su próximo movimiento – -Shenhe ¿Por qué estas peleando con Eula? ¿Qué sucedió? – el viajero se mantenía sereno, no quería actuar preocupado y exaltado que era como se sentía realmente –-Quería vengarse de ti, así que decidí eliminar la amenaza – Shenhe miró a Eula quien no comprendía lo que decía –-¿Eula se quería vengar de mí? ¿Por qué? – Aether aun entre los brazos de Shenhe miró a la Caballero de Favonius quien parecía algo avergonzada – -P-por lo de aquella vez en el Obsequio del Ángel... no puedo dejar pasar por alto la vergüenza que pase por mi debilidad – Eula bajó la guardia a lo que Shenhe quería aprovechar, pero fue detenido por Aether – -Espera, todo es un mal entendido – Aether ahora era quien detenía a Shenhe tomándola de la cintura – -¿Un mal entendido? no comprendo como una venganza puede ser un mal entendido – Shenhe miró confusa al viajero quien no tenia intenciones de soltarla – -Eula no tenia intenciones de llevar a cabo una venganza como tu la conoces, sino que intentaría hacerme algo parecido como a molestarme o hacerme sentir vergüenza – Aether miró fijamente a los ojos a Shenhe quien poco a poco dejaba de tensar su cuerpo –-No comprendo del todo... pero confiare en ti – Shenhe guardó su lanza y volvió a abrazar al viajero lo cual fue meramente instintivo, algo que ella no comprendía en ese momento –Antes de que las cosas terminaran por cesar, la presencia de la Gran Maestra Jean hizo que Aether tuviera un mal presentimiento. -¿Aether? ¿Eula? ¿Qué sucede aquí? ¿Quién es ella? – La rubia con visión Anemo observaría a una Eula un tanto apenada y a un viajero estando en brazos de una chica extraña –-Por favor Maestra Jean, déjeme explicarle en un lugar más tranquilo – Aether haría todo lo posible por defender a Shenhe y de que ella no sufra una especie de castigo en Mondstadt -