Las cosas en Mondstadt por fin se calmarían luego de que la Gran Maestra Intendente de los Caballeros de Favonius arribara al lugar donde ocurría un gran alboroto. Jean como era de costumbre, estaba tranquila en su oficina mientras atendía un montón de asuntos, esa misma tarde se había negado en tomar un descanso y que bueno que no lo hizo, ya que cuando uno de sus subordinados le informó de lo que estaba pasando, inmediatamente temía lo peor lo cual era un ataque a su ciudad, pero al momento de llegar donde era necesitada y de ver al Caballero Honorario que ya hace un buen rato estaba en Mondstadt, la verdad que se alivió un poco sabiendo que él defendía la ciudad mientras ella llegara, pero al momento de ver más detenidamente la escena que encontró se sorprendió mucho, sobre todo cuando veía que él estaba defendiendo a la extraña forastera de la cual había sido informada estaba tacando a otra Caballero de Favonius que era Eula.
-Ya veo... - Jean se encontraba nuevamente en su oficina junto a los involucrados en el escándalo de hace unos momentos –
-Si, así que por favor Maestra Jean, deja que yo me encargue de Shenhe – Aether había contado toda la historia sobre la aprendiz de los Adeptus quien estaba al lado del viajero en su lado izquierdo –
– La Gran maestra de Favonius observó la condición en la que se encontraban ambas mujeres de la misma Visión Gélida. A ambas se les podía divisar unos cuantos rasguños a través de sus ropas rasgadas – Esto es un tanto difícil Aether, sabes bien que no puedo dejar pasar las cosas, así como así, ella provocó un gran revuelo en el corazón de Mondstadt, sin mencionar que atacó a una de los nuestros – Jean vio la expresión aun furiosa que tenia Eula, en ninguno momento la mujer de pelo celeste dejó de poner esa mirada de desconfianza sobre la mujer de cabello albino -
-Por favor, yo respondo por ella mientras está aquí – el viajero dio un paso al frente, y con su mirada intentaba persuadir a la usaría de Anemo –
-Ahora que ella está contigo y como nadie más resultó herido... o muerto – eso ultimo lo dijo en forma de alivio – supongo que podría manejar esto como una simple riña – La mujer rubia observó la desaprobación de Eula quien simplemente mostró su orgullo dándole la espalda a ella - ¿tienes alguna objeción Eula? – Jean miró a la Lawrence que no dejaba de mirar de reojo y desconfianza a Shenhe quien únicamente prestaba atención al viajero con esa mirada vacía –
-Es obvio que no estoy de acuerdo con que se le deje ir así como así – Eula miró de reojo al viajero quien lanzaba la misma mirada que le lanzó a Jean. Solo suspiró pesadamente y juró que tarde o que temprano se vengara de esto - Solo quiero que se aparte de Amber y de mi... y si es posible de ti... Aether – al decir eso, Shenhe puso mala cara, por un instante parecía que intentaría sacar su lanza –
-Aether no se separará de mí, conmigo estará a salvo – Shenhe dio un paso al frente haciendo que el viajero quedara atrás de ella bajo su resguardo mientras ella encaraba a la mujer de sangre Lawrence –
-¿A salvo? Pareces mas bien una amenaza para él, no puedo confiar en ti... - Eula miró de reojo a Aether quien parecía un tanto molesto – Pero si en ti viajero. Está bien, confiaré en que puedas mantener controlada a... ella – La caballero de Favonius dio media vuelta y salió de la oficina, no sin perder la oportunidad de decir que obtendría venganza una vez más y de cerrar la puerta con rencor –
-La amenaza se fue, estás a salvo – Shenhe actuaría como de costumbre, sin embargo, aunque le costaba aceptarlo, le molestaba que dijeran que ella era una amenaza para Aether –
-Tal parece que las cosas tuvieron solución – Jean dio una ligera sonrisa la cual causó el alivio en el viajero – Caballero Honorario, mientras ella esté aquí en Mondstadt tu estarás a cargo de... ummm... ¿Shenhe? – La mencionada asintió ligeramente la cabeza – te lo encargo viajero.
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Genuino Sentimiento (Aether x Shenhe)
Fiksi PenggemarSolo con él volvió a mostrar una sonrisa sincera y legitima e inclusive su maldición parece ser mas dócil en su presencia y solo estando a su lado encontraría respuestas a aquel extraño pero cálido sentimiento que brota desde lo más profundo de su c...