Change (Cha Eun Woo)

Sorpresas.

El resto de la semana pasó rápido, durante el día íbamos a trabajar y durante la noche nos quedábamos horas hablando de su vida y de la mía mientras cenábamos, me ayudó en ratos libres a acomodar los muebles de mi departamento y al llegar la hora de dormir dormíamos juntos.

El fin de semana llegó, ese día salimos de la compañía más temprano que de costumbre, nos despedimos de los chicos y nos dirigimos al edificio, nadie sospechaba que entré el y yo hubiese algo, simplemente creían que el me llevaba amablemente a casa.

Me pidió que empacara algunas cosas en mi maleta.
-A donde iremos? Pregunté por tercera vez mientras Eun Woo subía mi pequeño equipaje a la cajuela de su auto.
-No te diré.
-No me gustan las sorpresas.
-Por que no? Se recargó en la cajuela aún abierta y me abrazo por la cintura acercándome a él.
-Que tal si mi reacción no te gusta?
-Se que me gustará.
-Ademas, lo que empaqué lo hice al azar, no me dijiste que tipo de ropa meter a la maleta.
-Si te falta algo lo compramos en ese lugar cariño. Me dio un beso en el que apenas rozaron nuestros labios y se incorporó llevándome a la puerta del copiloto.
Mientras esperaba que el subiera una pequeña y rápida luz salió desde alguna parte del estacionamiento, inmediatamente me tensé y comencé a buscar de donde provenía.
-Viste eso? Pregunté mientras seguía buscando por todos lados.
-Qué cosa?
-La luz, fue, como un flash...
-No, tal vez fue un auto que abrieron no?
Me relajé ante su lógica.
El auto se puso en marcha y salimos del estacionamiento.
Estos días realmente me había vuelto fan de su música, la escuchaba día y noche.
-Pondré musica. Conecté mi teléfono al Bluetooth y comenzó a sonar Go&stop.
-Me gusta mucho esta canción suena muy latina.
Eun woo se unió a mi mientras seguíamos coreando las canciones de Astro.
-Vamos, compremos algo para beber.

Se detuvo en una gasolinera justo a un lado de la carretera, ya habíamos salido de Seúl.
Rodeó el auto y me abrió la puerta. Cuando bajé intentó tomarme la mano pero yo me negué.
-Que pasa? Estabá algo molesto.
-Estamos en la calle...
-Y?
-No, quiero que nos vean tomados de la mano, todo mundo te conoce.
-Entonces nunca nos tomaremos de la mano?
-Por ahora no.
-Hasta cuándo?
-Sabes perfectamente lo que ocurre cuando los idols tienen nov... dude un poco en como decir lo que era para el. -A alguien verdad?
-No, qué ocurre? Se paró detrás de mi mientras me abrazaba por la espalda ahuecando su rostro en mi cuello e inhalando mi perfume.
-Muchas fans los dejan de seguir... y hacen comentarios muy hirientes.
-Nuestras fans no son así.
-Hay de todo en en el fandom.
-Vamos Meli, no tengas miedo por mi, seré cuidadoso.
-Entonces, espera...
Abrí la puerta del auto y busque una gorra entre mi mochila, tomé los lentes de sol de su guantera y se los extendí.
-Ponte esto.
El solo soltó una carcajada e hizo lo que le dije.

Caminamos tomados de la mano hasta la tienda, mientras buscábamos bebidas y algunos bocadillos nuestras manos se mantuvieron juntas.

-Buenas tardes, la cajera dijo algo desanimada mientras colocábamos las cosas sobre el mostrador.
Al ver a Eun Woo su postura cambió totalmente...
-Hola, buenas tardes. Respondió Eun woo.
-Algo más que desees?
A pesar de que llevaba gorra y lentes oscuros no podía dejar de llamar la atención, Eun Woo es muy guapo y sexy.

-Sería todo, respondí al notar que ella nunca me volteó a ver.
-Una caja de condones.
Me acaloré de inmediato al escuchar lo que le pidió, intente soltar su mano pero el no me lo permitió.
-Que sean dos por favor.
-Eu... me detuve antes de completar su nombre y le di un pequeño golpe en la pierna.
La chica solo se dio la vuelta y tomó los condones.
-Por qué pediste dos cajas? Dije mientras me ponía el cinturón de seguridad
-Por que las necesitamos.
-Tantos?
-Es un fin de semana, solo para nosotros... sonrió mientras se quitaba los lentes.
Después de tres horas más de camino y una larga y divertida conversación de cómo eran los chicos del grupo cuando debutaron llegamos a una ciudad bastante bonita.
-Esto es Busan.
-Oh, observe a través de la ventana del auto los edificios y las tiendas que había en los alrededores, todo era bastante bonito, a pesar de tener similitudes con Seúl se sentía totalmente diferente el ambiente.
Entramos al hotel y nos registramos bajo mi Nombre, claramente no podíamos usar el de el.
La habitación era bastante bonita, era enorme, mientras el acomodaba las maletas yo comencé a curiosear.

Al entrar al baño me sorprendí.
Había una tina grande frente a una ventana que iba desde el techo hasta el suelo, se lograba ver toda la ciudad en su máximo esplendor pero lo que más me gustó fue la vista al mar.

-Es muy bonito verdad? Eun woo estaba detrás de mi recargado sobre el marco de la pared.
-Ajá... hermoso, ya habías venido?
-Si, en una gira, estuvimos en este hotel.
-Es muy hermoso.
-Tu eres hermosa.
Me di la vuelta y camine hacia el, lo abrace y levante mi cara para darle un beso, el respondió de la misma manera.
-No traje ropa para la playa.
-Mañana iremos al centro comercial, compramos algo bonito ahí.
-Bien... quiero ducharme.
-Te duchas muchas veces en el día no?
-Odio sudar.
-Nos vas a dejar sin agua.
Me dio otro beso corto y salió del baño.
Un minuto después mi maleta estaba en la puerta.
-Ordenaré algo de comida, disfruta tu ducha.
-Quiero pizza.
-Muy bien, algo de vino?
-Cerveza?
-Lo que ordenes, me dio una sonrisa y cerró la puerta.

Al salir de la ducha busqué a Eun Woo por la habitación pero no lo encontré, vi su teléfono sobre la mesita de la pequeña sala así que no podía llamarle.

Aproveche para sacar las cosas de nuestras maletas y guardarlas en el guardarropa, cuando tomé sus pantalones algo cayó al suelo.
Mi pequeño vibrador. Me reí al verlo moverse en el suelo, la puerta sonó y lo tomé de inmediato para esconderlo.

Cuando salí al pasillo mi corazón comenzó a latir muy rápido, Eun Woo estaba de pie junto a la puerta con un ramo de tulipanes rojos muy bonitos.

-Llegó la comida. levantó su mano mostrándome la caja de pizza.
-Eso es para mi?
-Claro cariño.
Me acerqué a él y tomé las flores.
-Son muy bonitas.
Mi corazón casi explota de felicidad, el gesto de Eun Woo me hacía realmente feliz.

-Muchas gracias. Lo abracé y le di un beso en la mejilla -Las pondré en agua.
-Que bueno que te gustaron.

Puse las flores en un jarrón con un poco de agua.

Eun Woo estaba sentado en el suelo con las piernas cruzadas mientras acomodaba la cena en la mesita de la sala.

Saqué las cervezas de la nevera y me senté junto a el.
-Huele delicioso.
-Lo se, no me había dado cuenta de cuánta hambre tenía.
Me pasó una rebanada de pizza y abrió una cerveza para mi.

No podía sentirme más feliz, Eun Woo me llenaba el alma, estar con el era algo indescriptible, sentía que el tiempo se detenía cuando estábamos juntos, el siempre era gentil conmigo, me cuidaba y me mimaba, siempre se preocupaba por alimentarme o hacerme sentir bien, este sentimiento me abruma un poco en ocasiones ya que no sabía que podría pasar más adelante pero siempre intentaba aclarar mi mente y disfrutar el momento.

-Que quieres ver? Su voz interrumpió mis pensamientos.
-Veamos algo de terror.
-No, mejor algo de acción.
-Venga! hay una nueva película en Netflix que quiero ver dicen que es muy buena.
-No me gustan las películas de terror. Dijo casi como un susurro mientras buscaba entre todas las películas.
-Mm? Por que?
-Tengo pesadillas.
-Pero me tienes a mi.
Eun Woo giró su cabeza para verme, en su rostro se dibujaba una pequeña sonrisa.
-Te tengo...
-Sip, le quité el control de las manos y busque la película.

Al terminar de comer Eun Woo me envolvió en sus brazos y se recargó sobre el sofá, durante toda la película permanecimos abrazados.
-Nunu...
La película finalizó pero el aún así encontraba inmóvil.
-Te dormiste? Su cabeza estaba sobre la mía lo que me impidió voltear a verlo.
Por un largo rato el siguió en esa posición y yo estaba encantada de escuchar pequeños ronquidos salir de su boca.
-Que estás viendo?
Su voz se hizo presente mientras se alejaba un poco.
-Un drama.
Mientras frotaba su rostro logré estirar mis brazos, la posición me había entumecido el cuerpo.
-Qué? Por que pusiste eso!
Me reí ante su cara de vergüenza.
Había puesto uno de sus dramas (True Beauty)
-Porque me gusta, es un drama muy bonito.
-Meli que vergüenza.
-Ya... no pasa nada. Apagué el televisor y me puse de pie. -Vamos a dormir.
Caminamos juntos hasta la cama y nos tumbamos, puso su brazo bajo mi cabeza mientras yo lo abrazaba y caímos en un profundo sueño.