Me miro al espejo mientras paso una mano por mi falda amarilla con un poco de vuelo y acomodo el hermoso suéter que tengo puesto del mismo color, con algunas rayas en azul eléctrico y sonrío por lo linda que me veo.- Te ves tan Hermosa! Sea quien sea tu cita, quedará impresionado.- Dice Stella mientras pasa sus manos por mi cabello y lo coloca hacia un lado.
- Ya se acerca la hora, así que deberíamos de irnos.- Comenta Sarah mientras se pone de pié y les doy una mirada llena de nerviosismo.- Oye, tranquila. Vas a ver que será genial y si no es así, pues estaremos siempre para ti.- Me sonríe dulcemente.
- Si! Cualquier cosa nos llamas y vamos por ti.- Dice Stella apoyando a Sarah.
- Gracias chicas, se los agradezco.- Contesto con una leve sonrisa.
Salimos de casa de Sarah y subimos a su auto. Mis manos estaban sudando por los nervios que tengo, pero trato de repetir en mi mente que es sólo una cita.
Bueno, mi primera cita.
Es normal estar nerviosa pero lo estoy aún más por el simple hecho de que este misterioso chico escogió el lugar.
Serra by Birreria.
Se encuentra en el piso 15, por encima de la megatienda italiana Eataly y dicen que es un lugar espectacular.
Mentiría si no dijera que es una cita demasiada romántica y si, me encanta la idea. Pero qué tal si yo no soy lo que espera? Sería decepcionante y muy triste.
- Y si no llega? - Les pregunto a las chicas.
- Si lo hará, relájate.- Me dice Sarah sonriendo por el espejo retrovisor.
- Por qué suenas tan segura? - Le pregunto temerosa.
- Tu solo disfruta, Luna. Te lo mereces.- Comenta Stella sonriéndome y yo suelto un bufido.
Ellas fueron las que me organizaron esto mediante una loca aplicación de cita a ciegas, la cuál la creó, aunque no lo crean, la tia de Sarah. Sinceramente, le ha ido demasiado bien y la aplicación es realmente grandiosa. Jamás ha ocurrido alguna situación rara y es un sitio muy seguro. Sin embargo, eso no quita el hecho de que estoy que me desmayo.
Minutos mas tarde, el auto se detiene frente a un enorme edificio y mis nervios aumentan.
- Ve y pásala bien.- Dice Sarah volteando a verme.
- Estoy que vomito.- Hago una mueca de sufrimiento.
- Estarás bien, confía en nosotras.- Me anima Stella sonriendo.
- Bien, les aviso qué tal voy.- Suelto un suspiro y sonrío un poco.
Bajo del auto con cuidado de que no se vea nada con mi falda y me despido de ambas mientras muevo una de mis manos.
Entro al enorme edificio y tomo algunas fotos, ya que es absolutamente precioso. Estaba lleno de gente pero podía caminar con calma. Algunas miradas se posan en mi pero paso de ellas y me apresuro en tomar el ascensor.
Subo con un par de personas y me quedo apoyada en la pared del ascensor mientras pienso en que todo va a salir bien. Que no será tan malo.
Las puertas se abren y veo el lugar con completa impresión.
Vaya...
Camino hasta llegar a la azotea y siento un revoltijo en mi estómago cuando veo las mesas llena de gente. Observo mi teléfono para ver si tengo algún mensaje del chico y si, efectivamente hay uno.
Hola! Estoy en el restaurante en la mesa 10, llevo una camisa negra con botones y tengo el cabello castaño claro.
Ese simple mensaje me pone boba y automáticamente tengo unas ganas terribles de irme. No aguantaba tanta presión.
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La magia del amor
Teen FictionCuando Luna se arriesgó a ir a una cita a ciegas por petición de sus dos mejores amigas, cabe resaltar que no se imaginó que esta sería con su crush de secundaria. Pero...la vida le demuestra a Luna que no todo es lo que parece, que a veces las cosa...