Jugando a dos cartas

Capítulo 4: La playa

Ya estábamos en el coche,preparados para ir a casa.

—Griffin
—¿Sí?
—Hay una fiest..

Me llegó un mensaje de Aaron.

—Perdona -dije y cogí mi móvil para ver el mensaje- es un mensaje de Aaron

Aaron:
Elisa te espero el lunes por la tarde en mi casa. A las cuatro,no tardes,iremos a una fiesta.

Le clave un visto,no me apetecía mucho que digamos ir a ninguna fiesta,tampoco sabía por qué estos días no me apetecía saber nada de él,pero al mismo tiempo sí,era raro.

—¿Qué dice? -me preguntó Eider mirándome por el retrovisor
—Que que me espera el lunes en su casa -dije sin mucho interés- a las cuatro
—Ah -tardó unos segundos en decir algo más- y.. ¿vas a ir?

Se me ocurrió algo.
Y no era con Aaron.
Si no,con Eider.

Esboce una sonrisa pícara.

—¿Te apetece venir conmigo a la playa? -dije- hoy,por la tarde
—¿Y que harás con Aaron?
—No me apetece ir a ninguna fiesta,y al parecer ese es su plan -susurre- ¿Te apetece? Si no no pasa nada,podem..

No acabe la frase por que Eider me puso un dedo en mi boca para que me callara.
Se sentía.. ¿bien?
Ejem..

—Claro que me apetece Griffin

Sonreí
Era tan... sencillo convencerle.

Ya habíamos llegado a casa y estaba a punto de bajarme de su coche.
—Griffin -me llamo- te recogeré a las cuatro y media ¿vale?
—Te esperaré

***

Al llegar a casa lo primero que hice es pegarme una ducha,estaba acalorada,después comí algo y me puse a estudiar.
Ya estaba terminando de hacer mi trabajo de biología cuando alguien tocó al timbre.
Eran apenas las tres.
Baje rápido por las escaleras y me tropecé,típico de mi,ignore la caída y llegué hasta la puerta susurrando una maldición.

Al abrir la puerta pude notar como me recorrió un escalofrío.
Era Aaron.
Iba...¿guapo? Llevaba puesto una camiseta negra y unos pantalones.
Llevaba el pelo como siempre,casi sin peinar.

En un movimiento rápido dio un paso hacia mí.
Yo lo retrocedí.

—¿Qué haces aquí Aaron?
—Me has dejado en visto
—¿Ahora eres un niño de seis años? -dije sarcástica- ahora en serio ¿A qué has venido?
—Tú te vienes conmigo -susurro,un segundo después ya me había agarrado de la muñeca-.
—De eso nada,dijiste el lunes.

Me volví a casa y cerré la puerta en su cara.
Bien hecho Elissabeth.
Volví a subir las escaleras (esta vez no me tropecé) y llegué a mi habitación.
Llame a mi madre ya que,hace más de tres semanas que no sabía nada de ella.

—Cariño ¿Como estas? ¿Has hecho amigos? ¿Te encuentras bien? ¿La casa se ha incendiado? ¿Por qué has tardado tanto en llamarme?

Procesando...

—Estoy bien mamá,por aquí hace un buen clima y sí,hice algunos amigos,Astrid coincidió conmigo en algunas clases y es muy guapa,Eider es el primero que me ayudo a memorizar el colegio y no perderme ah,y el otro día estuve en enfermería con él -pude ver como hizo una mueca- pero estoy bien. Y luego está Aaron que,es un poco pesado pero.. no esta mal. No,la casa aún sigue viva, y he tardado tanto porque he estado bastante ocupada.

Mi madre siguió hablando y hablando sobre cómo le iba allí y sobre los chicos que había conocido,como no.
Ya eran las tres y cuarto cuando le dije que tenia que colgar,si no,llegaría tarde.

Al colgar me vestí,me puse mi biquini negro un poco soso pero,en fin,no tenia otro y encima un vestido de playa.
Luego cogí una bolsa también de playa y metí una ropa de recambio,la crema solar,una gorra,agua y algo de comer.
Antes de salir cogí unas gafas de sol también negras.

Alguien tocó al timbre,fui directa a la puerta ya con la bolsa playera y abrí la puerta.

—Hey ¿estas lista?
Era ėl.
Le dediqué una sonrisa.
—Sí,vamos

Me senté en el asiento del copiloto y estuve mirándole mientras conducía.
Eider llevaba el bañador ya puesto y una camisa blanca,su pelo rubio estaba desordenado.
Estaba guapísimo.

Llegamos enseguida a la playa y cogimos un sitio.
La playa estaba bastante llena.
Ninguno de los dos llevábamos sillas así que nos limitamos a estirar dos toallas.

—Griffin -le miré- ¿vamos?

Me tendió su mano.

Se estaba quitando la camiseta para ya meterse al agua y intente no mirar su abdomen marcado por practicar fútbol.
No podía evitar mirarle de vez en cuando y él,después de eso me dedicaba una sonrisa pícara.

—Vamos -dije,me quite la ropa y agarre su mano—.

El agua estaba bastante fría pero Eider me arrastró con él y no pude resistirme.
Había algunas olas pero nada de lo que se pueda preocupar uno,estaba puesta la bandera amarilla.

—Griffin
—Dime
—Está tarde.. -tomó aire- vi a Aaron en la puerta de tu casa

Mierda.
¿por qué tenia que ser así de oportuno?

—Ah solo quería verme -mentí—.
—Ya
La expresión de su cara había cambiado.
Esbozó otra sonrisa pícara.

—Olvidémoslo -dijo

Me hizo un gesto y me subí a él.

***

Ya eran las siete y por fin le había convencido a Eider para salir del agua,nos habíamos tirado toda la tarde ahí y las demás personas nos empezaban a mirar raro.
Me seque un poco con la toalla limpia y enseguida me tumbé.
Dos minutos después salió él del agua.

Le caía agua por el abdomen,no pude evitar desviar la vista a él.
Tenía el pelo revuelto y mojado.
Estaba demasiado guapo.

—¿qué te pasa Griffin?
—Nada -me apresure a decir- es que... nada.

Casi la cague.

Se secó un poco y se tumbó a mi lado.
Me giré para mirarle.
Pero él ya me estaba mirando.

—Eider..
—¿si?
—Pronto saldrá el atardecer
—Y será hora de irnos -añadió
—Sí.. es verdad

Nos quedamos un rato así,simplemente contemplándonos el uno al otro.
A las ocho empezó a sonar una canción del spotify de Eider.
Y el atardecer salió.

***

Ding dong
Ya había tocado el timbre tres veces y nadie me había contestado.

Estaba en la casa de Aaron porque ya era lunes y eran ya tres y media,llegaba justo a tiempo.

Llevaba puesto un vestido negro (qué raro jeje) ajustado y el pelo suelto. Iba poco maquillada y solamente llevaba un mini bolso (también negro) en la muñeca.

—¡Ya voy! -gritó una vez que sabía perfectamente a quien pertenecía- hola Eli.
—Hola -le salude- aun no me has dicho a qué fiesta íbamos.

Era verdad,solo me había dicho que íbamos a una fiesta, ¿de quien era? Ni idea.

—Es.. de una amiga,anda vamos al coche.
—Ah vale,claro vamos.