Capítulo 5

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Fue una sesión con todos los condimentos, es increíble que una persona tan hermosa venga en búsqueda de estos servicios...en estás situaciones me siento afortunada de poder hacerme un lío sobre él y que encima me pague.
En fin, me preguntaba que tipo de aftercare sería de su agrado.

-Y bien... ¿qué deseas que hagamos para que te sientas bien?

-¿A qué se refiere?

- De nuevo con el trato de "usted" ya te había dicho que cuando terminaramos la  sesión no era necesario, ahora solo tratame de "vos", el "Mistress o señora" es solo para el acto, ahora que estoy para darte contención emocional, post sesión podes tratarme como quieras.

-De hecho googleé que significaba "Aftercare" para poder marcar el contrato, pero no entendí bien para que sirve y tampoco sé cuáles son mis opciones

-Claro, puede ser...bien, el "aftercare" es un momento posterior de la sesión, de relajación en donde la persona dominante y la dominada hablamos de lo que acabamos de vivenciar y así sabemos que queremos qué se repita y qué no, cómo te sentiste con lo que hicimos...así también sirve para fortalecer el vínculo y que podamos salirnos de nuestros "roles" un rato, saber que somos personas sintientes más allá de lo que hacemos en la sesión; es para que sepas que no solo sos una bolsa de arena para mí, sino me que interesa como te sentís.
Sumado a que en la sesión podes haberte sentido súper vulnerable y eso a tu cerebro le da un montón de estímulos de los que sería difíciles de procesar si después de escupirte y patearte te dijera "andaré perro" y vos, aún en tu rol, creyeras que es todo de ese modo.

En este momento post sesión podes llorar, reír, pedir que te dé abrazos, que hablemos de tu vida, de la sesión, de algo que te guste, que te ponga crema en los lugares que te lastime, que comamos algo rico mientras escuchamos música, o vemos algo corto, ya que no tenemos mucho tiempo...pero bueno, hay muchas posibilidades y quiero que sepas que todas son válidas.

A medida que le iba explicando su rostro se iluminaba, y sus ojos se volvieron brillosos, obvio no tenía idea de lo que era el aftercare y teniendo en cuenta que había dicho que lo que más le gustaba era "la intimidad" entre sub y dom, debía ser su paraíso.

No dijo nada, y se acomodó la bata, se acercó a mí y agarró mí rostro con ambas manos, me miró con ternura, cerró sus ojos y sus pestañas rubias chocaron, cerré mis ojos y sentí como nuestros labios se chocaron, no fue mucho entre que su lengua se coló entre mí boca y sentí como nuestras asperezas se chocaban y masajeaban, mientras el ambiente se llenaba de ruidos húmedos, era nuestro primer beso y era tan dulce e íntimo.

Se alejo de mí y sonrió.

-¿Esto está permitido?

-Claro que sí, veo que sos del estilo romántico, además que decís "nosé que es lo que me gusta", tengo una idea...vamos a bañarte, y comemos algo rico.

-Veamos cómo me llevo con eso - dijo mostrando sus dientes blancos.

Llamé a recepción y pedí diferentes alimentos, salados y dulces, la verdad es que no sabía cuáles eran sus predilectos.

Le dije que esperara sentado en la cama, y luego me dirigí a la habitación que era como un baño, contaba con una tina súper amplia, y es que en realidad estábamos planeando tener un jacuzzi, pero aún no había tiempo para la remodelación. En fin, ahora en nuestra "luna de miel" se veía bien.

Preparé la tina con agua tibia y al cabo de unos minutos el aire estaba cálido, lleno de vapor, y olía a Jazmin por el jabón que había utilizado.
Consideré, a partir del beso aún más, que debía ser más del tipo que disfruta un aftercare de caricias y baños de espuma hablado de la sesión.

Y para finalizar con la estética "romántica" prendí unas velas, aunque la escena era graciosa porque en realidad las velas eran para wax play, es decir juego con cera, y no de las aromáticas blancas y rosadas con forma de flores, pero bueno, si esto le interesaba, para el próximo after conseguiría más elementos "cute".

Volví a la habitación en donde estaba sentado esperando y le pedí su mano, me tomó con suavidad y dejó que lo llevara dónde la tina.
Junto a ella, me paré frente a él, desaté el nudo de su cintura y estiré para que su bata se abriera. Su cuerpo aún me temía, asique acerqué mis manos a su pecho golpeado y lo masajeé, llevé mis dos manos hacia sus hombros y dejé que la tela se deslizara por su espalda.

-Si querés podés meterte al agua, así te limpias todo el lío que te hice, ahí tenés jabón también - dije apuntando un jabón al costado de la bañera.

Miro la tina y luego a mí, se sonrojo, tomo sus manos una con otra y susurró.

-No quisiera sacarme de la piel lo que acabo de experimentar.

La calidez invadió mí pecho, pero respondí rápidamente.

-Es una buena idea que tu cuerpo a la defensiva se relaje con el agua caliente, aflojará tus músculos, y se va a sentir más tranquilo, incluso, cuando toqué tu pecho su reacción fue de miedo, estamos buscando que eso no esté en este momento...

Asintió y entró a la bañera.

-... además - me arrodille en la cabecera de la bañera blanca, acaricie su cuello y hombros por detrás, posé mí mentón en su hombro, tomé algo de agua para acariciarlo y susurré en su oído - por más que limpies tu cuerpo, en tu mente va a quedar grabado como me miraste el culo desde abajo y disfrutaste tu castigo - percibí cómo sus orejas se tornaron rojas.

¿Querés que peine tu pelo? - volví a preguntarle.

SometiéndoloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora