Si no te hubiese conocido.

VII

POV Jace. Actualidad.

Buenos días amor de mi vida - susurró levemente Eva en mi oído-

Buenos días señorita Wilson - dije estirándome mientras le sonreía a esos preciosos ojos color café -

¿Cómo amaneció lo más bonito de este mundo? - dijo mientras besaba mi frente -

No lo sé, dime tú - dije pasando mi mano por su espalda -

Tengo las mejores vistas, así que perfecto - conocía esa mirada - ¿Nos dará tiempo a bañarnos sin interrupciones antes de ir a buscar a Marc? - su sobrino -

Depende de lo que a mi novia le apetezca - esta vez era yo la que tenía esa mirada -

Marc puede esperar diez minutos más- dijo mientras comenzaba a besar mi cuello -

Solo uno... señorita Wilson - eso le enloquecía-

Repítelo - sus pupilas estaban dilatadas -

¿El qué?, pervertida - no pude evitar reír -

Su mano hacía rato que rondaba mi zona sensible y Eva odiaba que me riese en momentos como estos cuando quería escuchar su apellido a todas horas. Parecía ninfómana a veces. Así que por pura venganza ante mi carcajada, introdujo dos dedos del tirón.

Mier...da, Eva... - eso había dolido -

Sabes que odio que hagas eso cuando estoy demasiado cachonda - volvió a empujar los dedos- así que... estás castigada, señorita Blair Edwards - sacó rápidamente los dedos para volver a introducirlos esta vez más lento - Dilo

Hhmmm... - un gemido ahogado salió de mi garganta -

Dilo - abrí los ojos y vi como las pupilas de Eva estaban tan dilatadas que apenas se veía el café de sus ojos -

Siga profesora Wilson... - adoraba esos ojos café -

Así me gusta, Señorita Blair - su voz empezaba a ponerse ronca - Ahora tendrás tu castigo por no obedecerme a la primera- volvió a sacar rápido los dedos que tenía en mi interior-

Ev-vaa... - abrí los ojos de golpe -

Eso te pasa por ser desobediente - dijo mirándome fijamente mientras introducía los dedos en su boca - Hay que ducharse - dijo mientras se disponía a levantarse -

Ni de coña - tiré de ella hasta que volviera a caer encima de mí - Es su turno,Wilson...

La besé, tiré de su labio inferior hasta escuchar su leve gemido. Su lengua pidió permiso para entrar y accedí. Su lengua estaba haciendo estragos en mí. Su lengua y la mía se conocían demasiado bien, y era mi turno de ganar.
En un movimiento rápido la dejé debajo de mí.

Me encanta cuando te pones dominante - su respiración la delataba demasiado -

Metí dos dedos en su boca, lambió cada uno hasta dejarlos suficientemente mojados, hice lo mismo cuando los saqué de su boca y mi mano divagó hasta su entrepierna.

Ni se te ocurra cerrar los ojos - mi voz ahora era la que estaba ronca-

Val...- no terminó de pronunciar la palabra y mis dedos ya estaban dentro de ella -

Mírame - con la mano que tenía libre hice que me mirase - No dejes de mirarme - la besé - Quiero verte hasta terminar - mis dedos no dejaban de torturar su interior-

Jaaace - empezaba a retorcerse- Termínalo, por favor - sus ojos no podían mantenerse abierto-

Sólo mírame - me encantaba verla así- Y terminaré- fui dejando besos hasta llegar a su entrada -

Mis dedos entraban y salían con fluidez, eso era la señal que me estaba dando Eva. Jugué con su interior, mi lengua conocía cada rincón de su ser y la hice terminar.

Joo-derrrr - gritó, había hecho bien mi trabajo -

Limpié todo rastro de su ser y subí hasta ella.

Eres la mejor en todo - me dijo con su voz agitada. Giró y volvió a quedar encima de mí -

Tuve a la mejor profesora - dije guiñándole un ojo y volviendo a entrelazar su lengua con la mía-