Por la mañana temprano, salí de la habitación para no tener que lidiar con Sam. Toda la situación del beso me ponía nerviosa y a la vez me provocaba vergüenza por ser tan promiscua.
Mientras caminaba para ir a la habitación de mis padres, mi celular sonó con la cara de Nash en la pantalla.
Llamada.
- Hola linda, ¿como están tu vacaciones?
- Hola... Pues bien.- dije incomoda.
- Te extraño tanto querida.
- Ow, yo también.- dije nerviosa.
- ¿Que estás haciendo?
- Voy camino a la habitación de mis padres.
- Ah. ¿Has visto a Hayes?
- No, no he tenido mucho tiempo.
- Si lo ves, enviale saludos de mi parte.
- Lo haré.
- Me tengo que ir, te llamo mas tarde, cuídate y te amo.
- Adiós, yo también.
Fin de la llamada.
Seguí caminando a la habitación ,pero aún con el sentimiento de que no debí haber besado a Sam.
(...)
Al momento de tener que Llegar a la habitacion, mi corazón latía peor que cuando bese a Sam, tenía miedo de ver que pasaría entre ambos y vergüenza.
Al abrir la puerta para esperar ver mi castigo pude ver y sentir los gemidos de una chica que saltaba encima de Sam. Encendí rápidamente la luz y la chica bajo de encima para mirarme.
- Es mi habitación, duermo aquí.- fue lo que pude decir.
-Es hora de irme.- dijo la chica.
La chica se levanto y se cubrió con las sabanas dejando a Sam sin nada con que cubrirse, él me miro y se cubrió con una almohada.
- Saldré un momento.- dije incomoda.
Salí de la habitación y sentí como la chica se apresuraba en el baño. Cuando salí deje la puerta junta para poder escuchar si pasaba algo más, solo por curiosidad.
- Listo.- dice Sam asomándose.
- Esta bien.- dije y entre, la chica ya estaba vestida y sus mejillas estaban mas rojas que una manzana.
- Me voy.- dice sonriendo.- Adiós cariño.- dice mirando a Sam y besándolo en la boca.- Me llamas cuando puedas.- dice besándolo en los labios.
Cerro la puerta y yo me saque el chaleco que traía, lo puse a la orilla de la cama y saque mi pijama de la maleta.
- Te debería una explicación pero...
- No lo hagas.- dije sonriendo.- Pero te pido que lo hagas en otra habitación, amigo.
Entre al baño y me puse el pijama, cepille mis dientes y salí. Sam estaba sentado en la cama mirándome fijo, sin ninguna expresión.
- ¿Qué?- pregunte deteniéndome.
- Amigo.- dijo como si nada.
- ¿Ah?
- Me dijiste amigos y pensé bien, que te parece amigos con derechos.
- Tengo novio.- dije acercándome a mi maleta.
- Eso no te impidió que me besarás anoche.
- Que imbécil.- dije ordenando mi cama.
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Muchas gracias por leer y.....voten y comenten eso me alegra un montón alslelskksld ❤ se lo agradecería un montón.
