HISTORIAS O ONE-SHOTS COTE

Día 1-Suzune Horikita 2

Tras volver a posar sus pies en el suelo, Horikita me tomó de la mano suavemente y me dirigió hacia su cama. Realmente no deja de sorprenderme su estado actual.

Aún con su pecho al descubierto, no parecía mostrar signo de vergüenza alguna. La lujuria y el apetito sexual bloquean su capacidad para darse cuenta de su estado.

Me condujo lentamente hacia el lugar en el que ella siempre dormía, pero que esta vez iba a usarse para no dormir, precisamente.

Al llegar a la cama, Horikita me dio un empujón hacia la cama haciendo que cayera boca abajo sobre ella. A continuación, se sentó sobre mi espalda y me empezó a morder el cuello por los lados. Ni que fuera un vampiro. ¿Me está intentando chupar la sangre?

Aunque de hecho, se siente bastante bien. Internet-sensei ha hecho su trabajo.

Me di la vuelta haciendo que ahora ella estuviera sobre mí.

"Ven aquí" dije, de manera que ella se acercó hacia mi rostro.

Al principio, un simple beso; el siguiente, uno más largo y después, acabó por introducir su lengua en mi boca, haciendo que ambas bailarán como al son de un vals se tratara, intercalando se con besos y lamidas en nuestros cuellos.

Terminé por agarras los pechos de Horikita y masajeandolos y apretandolos según como me sentía. Por sus ligeros gemidos ahogados con nuestros besos, parecía que lo estaba disfrutando.

Comencé a pellizcar sus pezones uno a uno, haciendo que Horikita se retorciera de placer. Al parecer sus pechos son de sus mayores zonas herógenas.

Para que no se oyeran más sus gemidos, Horikita me pidió que dejara de hacerlo, solo para que yo los pellizcara aún más fuerte y después llevarme uno de ellos a la boca.

Como describirlo, no sabe a nada pero está delicioso. Es como tomar un vaso de agua fresco en un caleroso día de verano.

Mi acción solo hizo que Horikita se pusiera muy roja, seguramente avergonzandose de más y haciendo que sus ganas de tenerme en su interior aumentará aún más. De hecho, yo también quiero. Estoy muy excitado. De hecho creo que tengo un ligero sonrojo en mis mejillas. Esta sensación es algo que no sentía desde...que era un niño.

Entonces, Horikita se incorporó sobre sus pies y se quitó su parte inferior,obviamente muy mojada y llena de sudor de manera demasiado sensual, doblando su espalda y haciendo que desde mi vista se viera tanto su pequeño ano como su vagina mojada.

Se giró hacia mí y me dijo que me recostara y cerrará los ojos con una seguridad bastante increible. Obedecí entonces.

Siento que la cama se hundió por ambos lados. ¿Que estará haciendo?

En unos segundos ella dijo que abriera mis ojos para encontrarme de pie sobre mi cara a una Horikita.

"Ayanokouji, disfruta la comida." dijo con una sonrisa lujuriosa y guiñándome un ojo para que a continuación ella sin previo aviso se sentará por completo en mi cara sobre sus rodillas.

Comencé a chupar sin saber lo que tenía arriba y apenas sitio para respirar. Sabía que sus muslos tenían buena proporción pero no me imaginaba que apenas pudiera respirar.

Sus agitados gemidos y movimientos repentinos indicaban que lo que estaba haciendo, aún sin saber lo que es, lo estaba disfrutando mucho.

Luego, se levantó para ponerse en dirección opuesta y dijo todo su peso sobre mi cuerpo. Comenzó a desabrochar mi bragueta y saco mi gran miembro de mí pantalón.

"Guau, desde cerca es incluso más grande jeje. Que aproveche" dijo, metiéndose poco o poco mi miembro en su boca y comenzando a lamer y chupar mientras que con su otra mano masturbaba suavemente haciendo que me semen se desplazará por su boca.

Yo mientras tanto, al tener vista de lo que hacía, agarré de las dos nalgas a Horikita y comencé a comerle todo el coño de forma bruta. Luego, con una de mis manos introducí uno de mis dedos en su ano provocando que Horikita diera un gran grito de placer. Yo estaba prácticamente en mi límite y solté minoriemra carga en su boca mientras mi lengua estaba en su vagina e introducía otro dedo en su ano.

Mi semen comenzó a salir de su boca. Solté una gran cantidad.

"Ahh ahh ahhhh. No puedo aguantarlo más. La quiero dentro de una vez por todas" dijo poniéndose en posición e introduciendo mi largo pene en toda su vagina.

"Ohh si!!! Por fin!!!"

Recostó su espakda sobre mi pecho y su cabeza al lado de la mia mientras yo la penetraba de forma ruda.

Las embestidas se sucedían. Nuestros gemidos se escuchaban por toda la habitación. Agarré sus tetas y las comencé a apretar mientras que de lado, Horikita y yo nos dábamos besos muy lascivos. Esto es el mismo infierno sobre una cama. Nuestro sudor y nuestra lascivia no tenía fin. Solo éramos nosotros dos. Ella, yo y el sexo.

Tras unos minutos de gran intensidad, solté de nuevo otra carga,Bal igual que ella también llegó a su límite y nos corrimos de manera sincronizada. está vez me corrí en su interior haciendo que Horikita se retorciera de placer, curvando su espalda y apretando los dedos de los pies. No sabía que el orgasmo pudiera provocar eso.

Decidido a ir por una última ronda, coloque a Horikita sobre el colchón y me coloque encima suya, dejándonos cara a cara en el momento que la volví a penetrar con fuerza. Comencé a succionar y chupar de nuevo sus pechos.

Horikita simplemente disfrutaba de lo que estábamos haciendo mientras agarraba las sábanas de la cama y gemía de forma apasionada.

Luego, levante un poco el trasero de Horikita y eché sus piernas hacia delante haciendo que mi miembro llegará aún más profundo. Horikita soltó otro gran gemidos y simplemente estaba estadíada de placer, sacando la lengua y babeando, ocasión que utilice para presionar un poco su cuello y chupando su lengua de forma muy lasciva.

Llegando ya casi a nuestros límites de resistencia, hice una gran embestida para soltar toda en mi carga en lo más profundo de su interior.

Horikita parecía haberse vuelto loca. Reía, lloraba, gritaba y gemía, todo a la vez, mientras tuvo su último orgasmo. Saque mi miembro encharcado en semen, mientras una más que satisfecha Horikita temblaba de placer, a la vez que la mezcla de nuestros líquidos salian de su vagina.

Me tomé unos minutos para recuperarme. Con Horikita dormida profundamente y tapada por una sábana que encontré en una silla, me di una pequeña ducha y salí de esa habitación.

"Entonces...¿Quién es la siguiente?"

Hola. xD. Igual se me ha ido un poco con algunas palabras que he puesto. Pero no sé, lo estaba viviendo. Estaba escribiendo y literalmente tenía la escena en mi mente. De hecho, hasta estaba empalmado mientras escribía jajajaj. Bueno, espero que os haya gustado mucho y se vendrá la siguiente dentro de una o dos semanas, creo jaja.

Una cosa, ¿ A quien quieren? Díganmelo y haré votación.

Apoyen, compartan, voten y como no disfruten. Adiós mis panas. Por cierto, me cago en todo que el barsa a empatado. Bueno, la semana que viene se gana. No hay que desanimarse ahora. Nos vemos.