Apretó los puños con fuerza, para luego golpear su reflejo. Sintió un dolor punzante en su mano y pedazos de vidrio cayeron con un ruido sordo. En sus ojos desbordaban furia y un aura negra cubría su cuerpo. Cuan tonto había sido, creerle otra vez...
El viento golpeaba con fuerza su cuerpo, pero siguió su camino sin inmutarse. La ira que sentía dentro de él quemaba intensamente. Uno de los solados le señalo en silencio hacia un edificio dentro de la base militar, suponía que ahí era donde debía quedarse. No le importó realmente en ese momento, solo tenia que aclarar las cosas con URSS. Escuchaba sus pasos cerca, por lo que estaba detrás de él. Cuando finalmente abrió la puerta de aquel lugar que más parecía una mansión, el calor le golpeo el rostro haciéndolo templar.
- Bien - dijo mientras se volteaba para encarnarlo - Te escucho - no vacilo, quería respuestas y las obtendría.
Su mirada fría lo atravesó - Deberíamos dejarlo para otro momento - expresó con voz fría - Acabas de legar y veo que aún no te acostumbras al clima.
Apretó los puños, aun con más furia dentro de él - Parezco alguien débil - menciono con son de ironía - No me digas lo que tengo que hacer - prácticamente escupió las palabras de su boca - Así que, te escucho.
- Tú eres quien me debe dar explicación - expreso sin apartar la mirada de él - Yo no rompí nuestras relaciones diplomáticas, México.
Todo aquello le parecía gracioso, todo lo que había sucedido le parecía una broma. Restregó su rostro con una de sus manos. Hace poco había estado en el territorio de Estados Unidos por el asunto de la guerra. Ya tenia con el hecho que había atacado sus barcos y el secuestro de Filipinas, no tenia planeado que nada más lo sorprendiera - Tuve mis razones - formulo con seriedad mientras le sonreía de medio lado - Un complot contra mí no es algo que tome a la ligera.
El soviético cruzó los brazos - No apuñalo a quien me ha brindado ayuda - su voz grave era firme, al igual que sus palabras - Toma - expresó mientras sacaba unos papeles de su chaqueta y se lo extendía.
Lo tomo con vacilación para luego empezar a leerlos con rapidez. Sus ojos se abrían con cada línea que terminaba, era un informe detallado sobre información falsa que había estado llegando a las embajadas de diferentes países, uno de ellos era el suyo. Arrugó el papel con fuerza, fue tan idiota, pensó.
Mordió su labio inferior para contener las emociones que lo inundaban. Su relación con URSS había sido amical durante muchos años. Desde que tomo el poder tras la muerte de Imperio Ruso, cuando sorprendentemente Estado Unidos y demás countrys le habían propuesto unirse a ellos para aislarlo. No había aceptado. El reconocimiento como un country y su ayuda por la hambruna en su territorio, tenían buenas relaciones. Por eso, cuando llego aquel informe donde decía que intentaba desestabilizarlo, no lo quiso creer. Pero su indagación resulto en indicios de actividades sospechosas de los humanos que eran un riesgo eminente. Aun así no quiso considerarlo, por eso le había preguntado a USA. Aunque en un principio supuso que era una mala idea, aun sabia que este tenia información de todo lo que pasaba en el mundo. Él le había corroborado la veracidad del complot en simples palabras, le había creído - USA me mintió - logro formular poco después de un silencio incómodo. Había caído otra vez en sus engaños.
- No deberías confiar en el americano - aconsejo mientras cruzaba los brazos. Lo miro por un momento, ¿tendría que disculparse? Se preguntó. Los countrys eran demasiado orgullosos como para reconocer errores que pudieran cometer, muchos incluso nunca se disculpaban. Eso era cuestión de orgullos, algo que él tenía muy arraigado desde hace mucho. Pero esta ocasión era diferente, ¿Se tragaría su orgullo? Aun con la indecisión en sus ojos, el soviético volvió hablar - Tienes que descansar, el viaje ha sido largo - Pronunció con su grave voz - Dejaremos este asunto - Agradeció internamente esas palabras, aunque aún sentía que debía compensárselo de alguna manera - Espero que retomemos nuestra relación - Continuo, pues no había respondido.
Se sobresaltó un instante - Por supuesto - Logro pronunciar a duras penas - Haré el papeleo lo ante posible - prometí.
- Me retiró - finalizó para luego llamar a uno de los soldados - Te mostraban tu habitación, que descanses - expreso mientras desaparecía por una de las puertas de aquel recinto.
El solado me indico que lo siguiera poco después, caminamos por un largo pasillo donde me dejo en un cuarto de la segunda planta. Cuando por fin pude estar solo, me recosté sobre la cama. USA tenia que darle muchas explicaciones, pensó con amargura.
La vida es como un océano
A veces en calma
A veces en tormenta
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Nota 1: Concluida la guerra imperialista, se reúne en Versalles en 1919 la Gran Cumbre de las Potencias Victoriosas para diseñar el nuevo reparto del mundo colonial y semicolonial. En este foro se escuchó el veredicto de George Clemenceau: "La Rusia revolucionaria es un grave peligro para la seguridad de todas las potencias". Acto seguido, el Consejo Supremo de las Potencias Aliadas y Asociadas dirigieron a todos los gobiernos, al de México entre ellos, un listado de burdas acciones represivas a las que todos debían ceñirse para lograr un bloqueo y aislamiento total de la Rusia soviética, de tal suerte que se dejaran manos libres y cómodas a la contrarrevolución y a los ejércitos intervencionistas de las potencias. Sabemos hoy que México no se ciñó al dictado y chantaje de las potencias. El "cordón sanitario", la contrarrevolución y la intervención extranjera fueron derrotadas. La revolución socialista produjo el primer Estado socialista de la historia, la Unión sovietica.
Nota 2:El 23 de enero de 1930, el presidente de México, Emilio Portes Gil, tomó la decisión de romper las relaciones diplomáticas con la URSS, al considerar a la embajada rusa como centro de intriga y propaganda del comunismo. De esta forma, Portes Gil declaró que tanto el embajador soviético en México, Alexander Makar, como los comunistas mexicanos, dirigidos desde Moscú, querían socavar la tranquilidad y la estabilidad del país, de acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Además, indicó que la principal razón de romper relación con la URSS fueron los ataques de los comunistas a las embajadas y los consulados mexicanos en el extranjero, y las manifestaciones callejeras organizadas por el Partido Comunista Mexicano en las que se vilipendiaba al gobierno. No obstante, el presidente omitió que sabía de un complot soviético a México capaz de causar mucho mal al país a través de propaganda, sabotaje y la interrupción de la exportación de petróleo para desestabilizar a Estados Unidos.
Nota 3: El gobierno mexicano obtuvo la misma información sobre el complot en el país de la embajada de Estados Unidos después de haber roto la relación con la URSS.
Nota 4: En 1942, México se involucró en la Segunda Guerra Mundial del lado de los Aliados, de los que la Unión Soviética era parte. En noviembre de 1942 se restablecieron los lazos diplomáticos entre México y la URSS.
Nota 5: URSS no sabía en principio porque México rompió su relación política, por lo que se encargó de investigarlo y hallo con la verdad. No se contactó antes, porque no tenia un razón que justifique su acercamiento, además de los problemas internos que tenía.
