A partir de esa noche las cosas entre Izuku y Katsuki comenzaron a ser más amenas. El pecoso había estado nervioso por nada esa noche, puesto que en lugar de las lujuriosas posibilidades que esperaba, en realidad, al término de la comida el rubio lo dejó en el complejo de departamentos en el que vivía, sin ningún toque inapropiados o actos indecentes, lo cual lo hizo sentirse bobo, pero también más a la expectativa de lo que podría surgir entre ellos, aunque tal vez estaba errando al meterse con su jefe, quien podría despedirlo en cuanto quisiera. Sin embargo, se dedicó a gozar de la rutina que se comenzaba a crear entre ellos en donde cuando estaban descansando sin hacer nada, Izuku entraba en la oficina de Katsuki, sentándose en el sillón uno enfrente del otro para tener conversaciones triviales mientras comían su almuerzo.
-Es cierto, ¿Qué es esa mierda de apodo con el que me llamaste? Cuando regresé al trabajo.- Dijo el rubio, antes de morder el panini de pollo que había pedido de la cafetería, sonriendo burlesco al ver al menor atragantarse con la comida cuando esté escuchó su pregunta.
-Una vez discutimos, estaba enojado porque tú me llamabas "Deku" y yo te dije que te llamaría "Kacchan", entonces. - Izuku hizo un mohín con sus labios. Recordaba ese día porque también se sentía avergonzado de esa discusión en la que pensó que lo echarían del trabajo por ser tan irrespetuoso, en su defensa, estaba cansado de ese apodo tan infantil.
- ¿"Tu puedes"?... - Katsuki levantó una de sus cejas. "Deku" ¿Qué clase de apodo cursi era ese? Rodó los ojos sin imaginar qué era lo que estaba pensando en ese momento, ¿No podía ser más jodidamente obvio?. Entonces observó cómo el rostro de Izuku se transformaba en una expresión llena de confusión. - "Deku"... Suena a algo que te queda.
-¿E-Eh?. - Los ojos de Izuku se iluminaron, su labio inferior hizo un movimiento trémulo antes de abrir y cerrar su boca en repetidas ocasiones sin saber qué decir. Su pecho se agitó con un sentimiento vigoroso que no había experimentado en mucho tiempo, entonces, sus bonitas mejillas se encendieron en un lindo tono rojizo, haciendo que las pecas se distinguieran en su piel. Katsuki Bakugo, que cruel era ese hombre que lo traía vuelto un desastre. - Tonto Kacchan...
-¿A quién carajo llamas "tonto", Deku?. - El rubio gruñó sin estar molesto realmente, observando al menor reír, aún con las mejillas teñidas de ese color rosado. Rueda los ojos entonces, mientras dobla el papel en el que estuvo envuelto su sandwich y lo tira a la basura, la hora del almuerzo ha terminado, así que ambos deben de continuar con su trabajo de mala gana.
Katsuki se pregunta hasta cuándo recuperará su memoria, ha ido al médico por chequeos, pero tampoco han habido grandes avances, aún se exaspera por no poder recordar nada, sin embargo, de nada servirá que se fuerce a hacerlo si el resultado será el mismo. Se encuentra revisando algunos documentos entonces, cuando comienza a disociar, de la nada su cuerpo y su mente se sienten tan externos, tan alejados de sí mismo, la sensación es abrumante y le asusta, sin embargo, hay claridad, el cielo está despejado, el viento golpea contra su rostro con suavidad mientras se encuentra en un tejado, hay un chico parado en la baranda del mismo, el chico está llorando, su rostro es borroso, su silueta también lo es.
-¿Bro? ¿Estás bien?. - Eijiro mueve con cuidado el hombro de Katsuki, este parpadea varias veces y se levanta con un brinco de su asiento. Su respiración es un poco agitada, mientras que su rostro está pálido. - Siéntate, ¿Quieres agua? ¿Quieres hablar de lo que acaba de pasar?.
Katsuki no responde, hay algo angustiante en su recuerdo, algo que le hace sentir asfixiado y le hace difícil poder respirar. Se inclina apoyándose sobre la mesa, sentándose cuando sus rodillas comienzan a seder, entonces algo más se ilumina en su mente, es una explosión, una explosión que suena cercana e ilumina parte de un almacén abandonado, hay un hombre parado en la oscuridad, detrás de él hay cadáveres. Siente que está a punto de vomitar.
-¡Midoriya!. - Escucha el grito de Eijiro, sin embargo, es incapaz de moverse. Está sudando mucho, su traje comienza a sentirse incómodo, está muy apretado, siente que va a morir en cualquier momento, el último recuerdo se repite en su mente ¿Por qué hay cadáveres? No sabe cómo terminó en el suelo, apenas es consciente de lo que sucede en su entorno y para cuando se encuentra un poco más lucido tiene la camisa abierta hasta la mitad, sin su saco, mientras que a su lado Izuku se encuentra colocando un paño húmedo y frío en la parte trasera de su cuello, mientras da pequeños masajes, susurrándole despacio que respire en cierto ritmo, entonces lo obedece: 1,2,3,4, inhala y exhala en ese ritmo lento.
Eijiro está del otro lado, dando un poco de más espacio, pero se encuentra inclinado, en sus manos sostiene una botella de agua.
-¿Cómo te sientes...? ¿Quieres que nos quedemos?. - Izuku pregunta con suavidad, sigue dando pequeños masajes en los músculos tensos de los hombros del rubio. Este niega con la cabeza, necesita estar solo un momento, pensar en lo que pasó, pero también quiere un abrazo, es un extraño sentimientos en el que siente que necesita a alguien y al mismo tiempo necesita su espacio.
- Bien, vamos, no te vamos a dejar tirado en el piso. - Eijiro ayuda al rubio a ponerse de pie, junto a Izuku entonces lo dejan sentado en el sillón con la botella de agua aún lado por si la necesita.
Katsuki no dice nada, no tiene la fuerza para hacerlo. En su mente la escena se repite una y otra vez. Un pequeño beso es depositado en su mejilla, entonces cuando siente el contacto alejarse toma la mano ajena mientras tiembla.
-¿Puedo quedarme contigo, Izuku...?. - Su cuerpo está temblando, aún siente escalofríos, su cuerpo está muy caliente a pesar de sentir que se está congelando y el sudor baja por su mentón. El chico pecoso asiente, sentándose a su lado con cuidado en movimientos lentos.
- Llamaré a la señora Bakugo. - Anuncia Eijiro antes de salir por la puerta y dejarlos solos.
Izuku abre sus brazos, dándole la opción a Katsuki de aceptar el abrazo, sintiéndose sorprendido cuando esté lo aceptó, hundiendo su nariz en su cuello. Da pequeñas caricias en la espalda, enrede también de vez en cuando sus dedos en la cabellera rubia sin decir una palabra en lo absoluto, si Katsuki quiere hablar entonces debe de hacerlo por sí mismo, no quiere presionarlo, así que le da su espacio.
Katsuki comienza a respirar con más calma, los latidos de su corazón ya no se sienten como si estuviera corriendo un maratón, entonces cierra sus ojos intentando que la presión sobre su cabeza se alive, aún abrazado del menor no se mueve hasta que la puerta suena una hora después, por ella entra su madre e Izuku no siquiera tiene tiempo para avergonzarse porque sigue preocupado por el rubio.
La mujer se lleva a su hijo, tensa por el estado tan manso en el que lo encontró, pues ni siquiera opone resistencia cuando le dice que lo llevarán al hospital, lo cual también es preocupante porque Katsuki odia los hospitales, es un pésimo paciente. El resto de la tarde se la pasan en el hospital, el médico no encuentra nada nuevo en las tomografías realizadas, ni en los demás estudios, por otra parte el psiquiatra tiene mucho qué decir al respecto de su salud mental, así que termina con una dosis leve de Xanax.
-¡Basta, suéltame!. - El chico se retuerce en sus brazos, inclinando su cuerpo hacia enfrente, sus ojos ven las calles en donde pasan los autos y a las personas caminando por ellas con tranquilidad. De verdad quiere saltar y acabar con todo.
-¡Mierda, hasta crees que te voy a soltar! Tu puta vida vale más de lo que crees, ¡Idiota!. - Dynamight sujeta al muchacho por la cintura, es mucho más fuerte que él menor, pero tampoco quiere lastimarlo, así que solo se aferra a él hasta que el chico termina por rendirse, dejándose caer en sus brazos.
-¿De verdad lo crees...?.
-No estaría aquí si no lo creyera.
𖡼.𖤣𖥧𖡼.𖤣𖥧
1283 palabras.
Estamos de vuelta. Espero que les gustara el capítulo ¿Qué tal les pareció a ustedes? Como dije no planeo extender esto a las de cinco capítulos.
¿Cómo están? ¿Están bien? ¿Ya cenaron?.
Les deseo suerte para esta semana, cuidense mucho, les mando besos y abrazos virtuales. Este autor se despide.
-Dxmian.
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My Hero [KatsuDeku]
FanfictionAU sin Quirk. Katsuki Bakugo es un "vigilante" que pierde la memoria tras un accidente con un delincuente.