༻Dimensiones entrelazadas༺

Encuentros Y.. ¿Tratos? 1#

Luego de secar sus lagrimas pasando su codo sobre el rostro, miro a los lados y camino directo a una salida, quería desaparecer de todo en su alrededor, algo que era inevitable para este puntos, solo... Quería dejar de existir.

Fue facil, muy pocas personas lo notaron y mentirles en eso no fue complicado.
Un "ya acabo mis clases" fue suficiente para que no vieran su cara.
Aunque para con los que no fue, simplemente los ignora como si fueran desconocidos, no desea generar más dudas existenciales y no importaba como lo intentara siempre harían lo mismo con la charla matutina.

Shuichi intento tocarlo, pero no se dejo, en ves, salió corriendo, ¿a donde? La primera opción factible era su casa, aunque ahora no se sentía comodo ahí.
No lo sabía, solo quería dejar sus pensamientos asesinos, aquellos que le estaban volviendo loco y quedar en blanco sobre todo.
No hubo un paro fijo hasta que comprobó que estuvo lo suficientemente lejos de los demás, perdiendolos a la vista así que solo se propuso por caer sobre sus rodillas en un viejo callejon, el olor putrefacto combinaba con la sucia basura que acompañaba el lugar mientras contenia las ganas de vomitar por tal habitad.
Quería ir a otro lugar, lo anhelaba.
¿Eso estaba mal?

[Kokichi/ingame]

Estaba en un modo raro, las palabras fueron enredadas y pronto los problemas volvieron.. Abrió los ojos encontrandose con un dolor en su cuello como si dejara de respirar y luego recordo lo que le pasaba, era una escena que había olvidado hace mucho.

La castaña Maki harukawa se encontraba con su mano enrollando su cuello apretando cada vez más dejando que el poder respirar fuera imposible, odiaba aquello y no tenía idea del que había hecho ahora. Era como si hubiera perdido la memoria.

Intentó soltar el agarre mientras luchaba por aire pero no había nadie cerca.. Detestaba eso, estaba a punto de morir a manos de una idiota, así que solo sonrió a medias mientras volvia a perder el conocimiento poco a poco.
De parte de la joven de ojos rojos, no podía controlar su furia remitente de ese chico morado.
¿Como era posible que alguien la sacara de quicio tan rápido?

O bueno, eso fue hasta que en un imprevisto, kokichi abrió los ojos siendo soltado de una vez, siendo paralizado e incluso mostrando una cara de incredulidad, era demasiado el asombro.

¿Que cojones? Bueno, él no era el único, la asesina tenía una mirada expresando lo mismo, incredulidad, enojo, fastidio y un tanto de desesperación volteandose..

El líquido recorría su cabello, y al reclamar solo quedo en un silencio sumamente incomodo al no saber que expresiones utilizar, solo se mantenía con una mirada incensata al ver la mirada de un molesto, desafiante y poco realista de Shuichi que poco a poco apretaba mas la lata de fanta.

. -S-Shu.-Intentó formular las palabras pero fue ignorada por el detective para agarrar la mano del lider supremo.

. -Vete al carajo Maki. Porqué tenemos que hablar después. -Contesto mientras salía del salón y entraban a la escena otros compañeros contemplando todo.

Kaito se acerco a la chica para tocar su hombro y verla empapada de jugo mientras en detalles se desplazaba un hilo transparentes por su rostro.
Era incrédulo, no podía creerlo pero una de las personas en las cuales más confiaba estaba sumamente enojado con ella, y no sabía que había hecho mal.
Siempre fue recta, enseñándole que nunca debía expresar lo que sentía, pero aquí no sabía que hacer verdaderamente.
¿Era una mala amiga acaso?

-

Ouma solo quedo en silencio aún intentando pensar en todas las cosas, como quedo inconsiente para luego despertar apunto de morir, el como Saihara lo defendio o incluso el asombro (cosa nunca antes vista) en el rostro de Harukawa.

Por un momento fue demasiada información para procesar.

Fue jaloneado mientras recuperaba el aire que momentos antes había perdido. Por un extrañamente. Molesto shuichi para entrar a un cuarto.

Shuichi cierra la puerta del cuarto de Ouma con fuerza y este mueve un poco su cabeza de lado, sabiendo que ya la había vuelto a cagar. Y de forma grande, lo irónico es que no tenía ni la jodida idea de como lo había hecho.
. -Ok, yo.-lo siento per-

Al verle a la cara sintio como el corazón se quebro. El detective estaba llorando mientras le veia.

. -J-juro... Que casi pienso que te perdía.-Respondió mientras se acercaba a el y lo abrazaba, esto solo generaba otra pregunta. ¿Que tanto habría sufrido el chico de ojos opacos para llegar a aquello?

. -Ok, esto es raro. Pero, esta bien Saihara-Chan... Yo.-

. -¡No, no esta bien kokichi! Estas arriesgando tu vida por juegos estúpidos, hoy maki te intento matar y casi lo logra, te metes en problemas y solo me generas inseguridades con todo esto.-El queda en silencio.-

Luego se separa, esperando una respuesta. Mirando a los ojos del peli-morado y tranquilizando su respiración, seca sus lágrimas y el ambiente se vuelve pesado, eran pocas veces que pasaba esto, puesto que siempre se mantenía tranquilo cuándo dormían o divertido por las bromas y risas del chico más bajo, sea como sea. Era diferente y horrible.

Esta vez, ouma se levanta mientras que con su mano, ligeramente agarra y tira de su cabellos en modo de un regaño personal, por ser tan idiota e intentando recordar lo que pasaba. Era frustrante el hecho de que no recoradaba nada, que su amado estaba inquieto y el ataque de pánico que podía tener si no se tranquilizaba.

«Piensa maldita sea, piensa» Se decía constantemente pero quería estar lejos, o estar solo, tal vez necesitaba era tiempo no lo sabía.

Shuichi se dio cuenta de esto, y aunque quisiera ayudar sabía que Ouma podía solo, solo hagacho su cabeza para luego abrazar a kokichi una última ves, no era su batalla, y sabía que tenía que irse pero aún quedaba ese mal sabor a boca de no tener la respuesta.

Se acerco un poco a su oído y le susurro en un tono sumamente bajo.-Confío en ti kokichi... Pero también tienes que confiar en mí.-

El sale de la habitación, haciendo que kokichi se lance a su cama y cierre los ojos con fuerza, intentando ayudarse a si mismo, buscando otra mentira convincente y respirando profundamente; a lo cual, para mala suerte en eso, se golpea con un objeto pequeño, gimiendo de fastidio y sacando de sus sábanas aquel instrumento. Lo detalla, parecía aquellos juguetes sexuales que hacía Iruma y que de ves en cuando le regalaba a el chico de color púrpura, pero, algo era diferente a cualquier juguete sexual o un estilo raro. Era detallado, con botones alrededor y de forma rectangular, tal vez era un nuevo invento de aquella chica y se le había olvidado llevarselo.

Esta vez, el chico sonrió con malicia mientras apretaba todos los botones, parecía un gato jugando con su próxima caza, pero se asusto cuando el objeto se prendió y comenzo a dar vueltas, pronto salió humo. Mientras este estornudaba, y mejoraba su vista quedó sorprendido, no sabía sacar las palabras porque literalmente se estaba viendo a... ¿El? Estaba en el piso, quitandose la suciedad y quitandose de su nariz un poco de mocos, no sabía como reaccionar hasta que el otro lo vio, dando un salto para atras y gritando del susto.

Esto solo le dio una oportunidad de reírse, también estaba aterrado y correría si pudiera, pero era el líder supremo y siempre. Pero siempre, hay que ser valientes.

. -¡Nishisi~! ¡No puedo creerlo! La perra de Miu hizo algo interesante por fin, es un gusto en conocerte. ¿Otro yo? Nishisi~... Oh, nos llevaremos muy bien.-