"Amarte es el antídoto"

Capítulo 3 "Chris"

—¡¿Papá?!

—¡Sí!

—¡Voy a ser tío!

—Lo sé, lo sé una tragedia para mi cachorro, ni uno de sus tíos será normal.

—¿Quién dice que yo no soy normal?

—Liam—sonrió cuando escuchó una tos en el otro lado de la línea.

—Él... ¿él dijo eso de mí? Como que soy raro o algo así?

—Dijiste que no te interesaba...¿qué pasó con "de hecho tengo novia"?

—No jodas con eso, sabes por qué lo hice.

—Hay un lugar en el infierno reservado para todos los homofóbicos y los managers.

—Espero que sí.

El silencio que se produjo por unos instantes solo encubrió sus voces quebradas, ninguno admitiría en ese momento cuánto dolía esconder sus afectos por alguien de su mismo sexo, prefirieron juntar sus silencios que de por sí ya gritaban mucho.

—Te veré pronto.

—Tendré cigarrillos esperando —Louis se aclaró la voz antes de preguntar con un tono divertido—¿Algún mensaje para alguien, no lo sé...Payne por ejemplo?

—Dile que escribí una...—carraspeó antes de aclarar —unas canciones pensando en él.

Louis podía imaginar el sonrojo en sus mejillas y esconder su rostro detrás de su antebrazo, estaba seguro que ni la barba de días escondería ese rubor natural.

—¿Y qué dice la letra...algo como "Tómame contra la pared, no temas, sé que te gusta duro como a mí?

Una carcajada de Louis se escuchó por primera vez en meses y aunque se estaba mofando de su amigo, se sentía feliz por él.

—Vete a la mierda Louis.

—Ya, ya, le daré tu mensaje, pero intenta decírselo tú mismo, él ahora tiene su propio móvil, dudo que Salomon monitoree sus llamadas.

—No, tiene intervenido el mío—soltó— te estoy llamando de un número desechable.

Louis no respondió de inmediato, había tanta ira en su interior por toda la mierda que su ex manager les hacía pasar, tantos secretos que ni las fans más entregadas descubrirían. Aquellos cinco chicos ingenuos jamás leyeron lo que su emoción les hizo pasar por alto, un enorme fajo de hojas que escondía la avaricia de hombres malvados, dedicados a robar los sueños y volverlos pesadillas. Salomon era uno de esos hombres poderosos y terribles pero; nunca se puede cantar victoria, quien sabe si uno de aquellos chicos se convertiría en el jefe del propio jefe algún día.

(...)

—¡Harry basta de ignorarnos! —demandó la rubia, totalmente frustrada por no recibir la atención que exigía— tu bebé y yo te necesitamos, llévanos a cenar, vámonos de compras, cualquier cosa pero ¡estoy harta de seguir enclaustrada aquí mientras tú juegas a ser músico!

—Es mi trabajo Candice.

—¿Escribir cursilerías? ¡Vaya trabajo!

Durante el tiempo que compartían, ella nunca tomó en serio su trabajo, jamás se interesó en su música o se aprendió alguna de sus canciones, a ella le gustaba la imagen de él, le atraía la fama y el dinero, no el amor. Su único objetivo era ganar fama y ser reconocida, si la forma de obtenerlo era siendo 'la novia de' entonces lo haría...y lo hizo.