Entre tanto esfuerzo, Taehyung y Hoseok lograron ingresar.
Ingresaron y se encontraron con un Jungkook inmóvil viendo a la nada y Yoongi estaba tirado en el piso agonizando mientras que el profesor pudo escapar por la parte trasera que fue por donde ingresó.
—¡JUNGKOOK! ¡¿Qué sucedió?!—Taehyung fue rápidamente a abrazar a Jungkook, estaba muy asustado.
—Él, él — balbuceó— entró a la biblioteca e intentó matarnos— dijo Jungkook llorando—, pero asesinó a Yoongi hyung. ¡Lo mató!— y se soltó a llorar.
A Hoseok se le detuvo el mundo, dejó de sentir. Para el... en ese momento no quedaba nada más que auxiliar a su novio.
Corrió hacia donde estaba Yoongi— Mi amor, tranquilo, no hagas esfuerzo po~ por fa~vor— decía Hoseok entre lágrimas sosteniendo a Yoongi entre sus piernas y acunando su mejilla izquierda entre su mano.
Las manos de Hoseok rapidamente se mancharon de sangre debido a que Yoongi botaba mucha sangre por su boca— Mi hobihobi, que irónica es la vida, pero tranquilo yo voy a estar bien—hizo una sonrisa que más bien fue una mueca de dolor.
—¡Por favor, no me dejes solo, te necesito!— decía Hoseok entre llanto— Todo va a estar bien, ¿sí?— besó la frente del azabache, desesperado— ¡Una ambulancia, por favor!
—Prométeme que vas a estar bi~bien— hizo una mueca debido al dolor de la herida—. Mira, cr~creo que ya se acabó la pesadilla, te agradezco por cada momento, por haberme salvado cuando estaba en ese vacío del cual no pude salir— Yoongi empezó a tocer sangre—, si no fue hasta que llegaste a salvarme de la pesadilla que estaba vivi~endo— decía Yoongi, las lágrimas rodaban por sus mejillas.
—No, no, no digas eso, por favor, yo no puedo seguir sin ti, ¡lucha! ¡Llamen a la jodida ambulancia!—gritaba de la desesperación.
—Ya viene en camino y la policía ya atrapó a Seonwoo— habló Taehyung quien estaba abrazando a Jungkook quien aún no volvía en sí.
A lo lejos se escucharon las sirenas de la ambulancia.
—Mi amor, ya viene la ambulancia, por favor, resiste un poco más—Hoseok besó la frente de Yoongi.
—So~solo quiero que sepas que fui feliz a tu lado, te amo, y si en otra vida nos volvemos a encontrar, por favor, vuelve a fijarte en mí — decía Yoongi, las lágrimas no cesaban y seguían rodando por su ahora pálido rostro.
Yoongi iba cerrando sus ojos lentamente y Hoseok solo lloró, gritó, y decía cosas inentendibles, era un llanto desgarrador.
—¡Minino, por favor, resiste! ¡No te duermas! ¡POR FAVOR!— gritaba intentando mantenerlo despierto pero ya era tarde— ¡No te duermas!
Ese día fue el peor día para Hoseok.
Ese día... ese día dejó de sentir tantas cosas, ya no podía más, y en ese momento, solo pudo morir por dentro.
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