𝙈𝙮 𝙁𝙖𝙫𝙤𝙪𝙧𝙞𝙩𝙚 𝙂𝙖𝙢𝙚 | Jenlisa/Lisrene

11. VKTM

Recostada en su cama puede sentir aun el tenue olor de Irene que queda en sus sabanas, lo que le genera una sonrisa feliz.

Entre más lo piensa la idea de acabar de una vez con todos sus juegos de seducción con mujeres casadas y concentrarse solo en luchar por Irene, para que ella le de una segunda oportunidad le parece la decisión correcta.

Justo cuando esta más segura de su decisión, una llamada en medio de la noche se interpone. Llamada que se transforma luego en una visita.

Lisa se levanta de la cama y se pone un par de pantalones cortos de pijama y una sudadera con capucha para encontrarse con Jennie en su puerta.

-Hola-

-Hola- Saluda haciéndose a un lado y dejándola entrar.

Cerrando la puerta ve como Jennie con cierta aprensión camina por la sala. La coreana es una mujer observadora, con sus agudos ojos felinos asimila cada centímetro del apartamento y Lisa no puedo evitar sentirse algo cohibida mientras lo hace.

Esta segura de que su pequeño apartamento no es nada comparado con la mansión en la que Jennie vive. Sin embargo, su timidez se ve superada por la creciente incredulidad de que la sofisticada Jennie Kim este realmente aquí, en su humilde hogar.

Era un nuevo límite cruzado en su indefinida relación. Una cosa eran las flores que le envió, que la recogiera o la dejara en la entrada de su edificio, pero otra muy distinta es que finalmente este aquí.

-Lo siento, no es una mansión- La broma de Lisa fue recibida sin reacción.

Jennie simplemente se sienta en el borde del sofá, con las manos entrelazadas en su regazo. Parece insegura, desconcertada, un poco agotada y nerviosa. El estomago de Lisa se contrae, ella esta acostumbrada a lidiar con una Jennie desbordada, solo que este era un tipo diferente de desborde.

Nunca antes la había visto así, tan nerviosa y fuera de su elemento.

-¿Puedo ofrecerte algo?- Pregunta.

Jennie la mira como si estuviera recién notando a Lisa en la habitación. -Un vaso de agua, por favor-

Coge un vaso de la alacena, lo llena y se lo entrega, Jennie lo toma pero no hace ningún movimiento como para beberlo, solo sostiene el vaso fuertemente entre sus manos, sus ojos perdidos sin enfocar en ningún punto en particular.

Lisa se hunde en el extremo opuesto del sofá desde donde la observaba. Jennie la estaba asustando con su comportamiento. Lisa realmente no sabe qué hacer.

-¿Está todo bien?- Pregunta después de unos minutos. El agua intacta en el vaso probablemente ya estaba tibia por la fuerza en que lo aprieta.

Jennie salió de su hermético silencio para mirarla. Parecía cansada y Lisa notó que su maquillaje no estaba perfecto como de costumbre, sino algo corrido por lagrimas contenidas.

-¿Puedo quedarme sentada aquí por un momento?- Pregunto.

Lisa se encogió de hombros. Jennie ya había estado sentada en su sala por más que un momento, pero de igual forma le contesto con un -Claro-

Jennie la miro con el ceño levemente fruncido.

-Sé que esto no es para lo que me buscas, se que lo nuestro solo se trata de sexo y nada más, pero realmente necesitaba escaparme a un lugar en donde Kai no pudiera encontrarme-

¿Se estaba escondiendo de su esposo? ¿Por qué tendría que esconderse de él? Fueron las preguntas que atormentaron de inmediato a Lisa.

-¿Qué pasó?- Finalmente pregunta.