Martí:
Cada día es más difícil expresarte lo que siento. No te odio, es verdad; tampoco estoy enojada. Solo, estoy perdida.
Tengo en claro que los dos estamos haciendo nuestras vidas, y eso está perfecto, pero no saca el hecho de que duele verte cada día más lejos.
Te tengo bloqueado hace exactamente 4 días, parece una exageración. Pero la única vez que te bloqueé tardaste dos horas en notarlo y quince minutos en encontrar una forma de comunicarte conmigo, dijiste que no querías que me lastime, me rogaste porque siguiera de pie. Hoy van cuatro días en completo silencio.
Es una estupidez pensar que eso es relevante, pero ya no somos lo mismo, y esa es una de las pruebas.
No sé en qué momento todo cambió. Creo que los dos tenemos claro que el otro cambió, pensamos que lo hicimos para mal, mientras que nosotros mismos nos vemos mejor.
Estoy buscando la forma de hacer esto lo menos doloroso posible. Para mí, al menos.
Te amo. Te amo tanto que duele el no escucharte y te amo tanto que sé que tus colores favoritos son el azul y el rojo, aunque no al mismo tiempo, si no según tu humor. Sé que casi nunca pensas en tu canción favorita y por eso no sabes cuál es; que arrugas la nariz o usas más el sarcasmo cuando mentís. Que cuando te gusta alguien lo ocultas, hasta no poder más y hablar. Que no sos gato, lo aparentas. Siempre fuiste chico de una chica ¿Qué estuviste con muchas? Si, pero jamás fuiste gato, porque todas te llegaron a gustar en serio. Pero no lo suficiente como para amarlas.
Sé que no querías lastimarme, pero el que hayamos cambiado me hizo darme cuenta que te quiero tanto, que te extraño tanto, que te convertiste en mi prioridad, cuando nunca debiste serlo.
No digo que no lo valgas, porque si lo haces, más que nadie en este mundo según yo. Pero no puedo tener de prioridad a alguien que no me prioriza a mi. No te estoy pidiendo que lo hagas, tampoco.
Necesito que vuelvas, porque mi mejor amigo jamás me hubiera dejado fumarme un porro a delante de él. Mi mejor amigo me hubiera preguntado porqué me preocupa tanto el haber chapado con tres en una noche. Mi mejor amigo me hubiera abrazado sin vergüenza cuando me vió en la entrada de esa joda, me hubiera presentado con esa mina que sabe que me genera una inseguridad constante sobre mi relación con él y me hubiera dejado en claro que nadie es menos que nadie, que las dos valemos por igual, a pesar de que ella le guste.
Mi mejor amigo me hubiera llamado a penas se enteró que hablé en persona con mi progenitor, porque mi mejor amigo sabe que él es mi lugar seguro y la única persona a la cual me hubiera permitido contarle todo lo que me pasó en ese momento, mientras lloraba como nena.
Mi mejor amigo me mandaba mensajes en mi cumpleaños, dónde decía que nadie nunca me va a querer como el me quiere, porque es quien más lo hace en el mundo.
“y aunque te lo digo mucho te amo y quiero que sepas que te lo digo para ni por un segundo en toda tu vida, quiero que te olvides de que tu mejor amigo te ama como nadie mas lo hace”
Mi mejor amigo sabe que lo amo más que a mi vida, que si me lo pide salto del puente, porque confío plenamente en él.
Martí, sos el amor de mi vida versión la mejor amistad del mundo. Pero me está asustando mucho como dejaste de quererme de la misma manera en que yo te quiero a vos. Me está asustando el saber que ya no soy tan relevante y que, quizá, no vale la pena seguir esforzándome para que esto dure.
Quiero que dure.
Pero no sé si vale la pena que lo haga.
Te amo, te amo muchísimo.
A.S
