FUCK!NG WORLD - Robin Arellano ®

1. Entre más sangre, mejor.

Capítulo 1.

Finney

Era lunes, ¿saben lo que significa un lunes? Completo sufrimiento.
Gwen y yo caminábamos en dirección a la escuela, no queda muy lejos de casa y no nos cuesta nada caminar.
Mi hermana no deja de hablarme sobre sus -Problemas amorosos- no debería de preocuparse sobre eso ahora, es inútil.

A lo lejos se notaba una bola, como los montones que hace la gente cuando alguien va a pelear, supe que estába en lo correcto cuando vi a Robin, ¿que obsesión tiene con pelearse?. Mi hermana corrió y no me quedo de otra más que seguirla.
Algo paso y la pelea inició, la habilidad con la que Robin tiro a Muss fue impresionante, nunca habría podido hacerla ni con mil intentos, creo que es una de las cosas que Robin y yo no tenemos en común.
Mi hermana apoyaba a Robin y a mi me daba igual, sabía que la tenía ganada, Muss solo es un hablador.

Me fui de ahí junto con mi hermana, no queria ver eso, y no debía.

—Robin Arellano es increíble, es el chico más bravucón desde que el raptor se llevó a Vance el malandro.— el raptor, ese tipo da miedo. La gente dice que si pronuncias su nombre él vendrá por ti, es como el señor tenebroso.

—No digas eso.

—¿No creerás eso, cierto?, Hasta los periódicos lo dicen. No te llevará por decir su nombre.

—Lo sé, pero no lo digas.

—Dilo.— insisto y al ver mi cara se arrepintió— está bien, era broma.

Gwen se fue a clase y de igual manera yo.
En el pasillo antes de entrar al aula, la gente empezó a susurrar cosas. –¡Es la hermana de Vance el malandro!– ¿La hermana de Vance? Se supone que es de mi edad, pero no estudiaba en esta secundaría, nadie sabía mucho de ella.

Caminaba ignorando a los demás, sabía que todos la miraban, pero no parecía importarle. Ella es castaña y sus ojos son de un color miel, su nariz es parecida a la de su hermano, aunque un poco más fina. Llevaba una chaqueta de mezclilla negra con una playera blanca debajo, también vestía un pantalón de mezclilla negro y unos conversé de el mismo color. Sin duda se veía bien, ¿iba estudiar aquí?

A medio metro de mi, alguien la golpeo en los glúteos y supe perfectamente quien había sido; Buzz, ese pelirrojo, era un machista, no respetaba a las mujeres, hacia eso con la mayoría de chicas en esta secundaría, me parece completamente asqueroso e irrespetuoso. La chica se volteó enojada, tiro su mochila y se hacerco a el agarrándolo de la camisa.

Le soltó un puñetazo haciendo que el retrocediera.

Buzz trato de golpearla pero ella fue hábil. Le soltó otro puñetazo haciendolo tambalear y caer, me preguntó cómo todavía no hay rastro de ningún profesor.
Su enojó era evidente, se arrodilló a su altura y comenzó a golpearlo una y otra vez, tenía el mismo carácter que Vance, eso era completamente obvio.
Los amigos de el pelirrojo intentaron intervenir, supongo que la habilidad para pelear ya venía de familia. Uno de los amigos de Buzz agarro a la castaña del cabello y Hopper le soltó un codazo en el estómago, él la soltó y ella lo tiro de una patada. Nunca había visto movimientos así, más que en karate kid.
La pelea terminó, ella tenía sangre en las manos pero ninguna sola gota en su ropa.
Sabía que ellos iban a desquitar su furia con alguien y ese alguien era yo, camine con prisa hacia los baños encerrandome en el último cúbiculo.

Escuché la puerta, y evidentemente eran ellos.

—Sal de ahí Finney, sabemos que estás aquí.— salí, no me quedaba de otra, su nariz sangraba y tenía una pequeña herida en el labio.

—Este baño es nuestro, ¿No sabes leer? Dice hombres no nenitas.— el sonido de la puerta –nuevamente– hizo que todos voltearamos.

Era Robin, llevaba su famosa venda en la frente y traía una cinta en la mano.

—Que onda, Finn, ¿Que pasa?

No queria problemas, sabía que me iría peor, así que menti.

—Nada, solo... hablábamos de tonterías.

—Muss tiene unos dientes filosos, sangró en toda la clase. ¿Vieron a la nueva?.— El trio se dio la vuelta para retirarse, pero nuevamente la puerta se escucho dejando ver a la antes mencionada entrar, miro a los tres sin importancia, como si le diera igual.

Todos la vimos con confusión, es el baño de hombres, ¿que hacía ella aquí?

—Este es el baño para hombres, ¿o acaso vienes por más?.— creo que no fue muy inteligente de su parte.

—Hazte a un lado, pelirrojo de mierda.

Aquel se hizo a un lado de mala gana y ella camino en dirección a los lavamanos. Todos se quedaron en un completo silencio, incluso Robin.
Ella se retiró la sangre seca sin importancia y a los segundos Robin continúo haciendo lo mismo.
Nuevamente los tres pitufos se dieron la vuelta para retirarse.

—Quietos.— todos pararon— ustedes se meten con Finn y mis nudillos con ustedes.— no, por favor, no más problemas— ahora sí ya vayanse.

Ellos se fueron como si un perro los estuviera correteando.
Hubo un silencio incómodo, pero la chica lo rompió.

—¿Me regalas cinta?— dijo la castaña enredándose una servilleta en los nudillos. Robin asintió y le extendió la cinta después de que el terminó.

—¿Por qué entraste aquí?— pregunto Robin algo confundido, lo entiendo, igual lo estaba.

—No quiero entrar a clase, nadie me encontrará aquí.— se acomodó el cabello.

Robin no le tomo mucha importancia, a veces él hacia lo mismo, a diferencia de que el no entraba al baño de mujeres.

—¿Por qué te peleaste con Muss?— le pregunté a Robin mientras me acercaba a orinar, si, la castaña seguía aquí, pero en serio me estaba orinando.

—Muss es un hablador, pensé que no lo haría, y no.— ambos reímos.— Me sorprendió que el soltará el primer golpe, solo queria tirarlo y darle unas cachetadas. Pero con eso no sangró, y en esos casos; entre más sangre, mejor, se hace para el público.— se veia orgulloso, a veces daba miedo— ayer volví a ver la masacre de texas, ¿ya la viste?

Ni en broma mi padre me dejaría, las películas de terror las tengo que ver a escondidas. No bromeó.

—Es de adultos, mi papá no me dejará verla.

—Es increíble, nunca des por muerto a cara de cuero.— la chica hablo mientras se sentaba en un lava manos.
Los ojos de Robin brillaron, parecía que había visto a Dios.

Erine C.