El fin de una era

Capitulo 3 "Amistad y la Dama Búho"

Amity Blight
Narra: Amity Blight

A: Mis nervios aumentan de forma exponencial a cada segundo que pasa mientras Luz se piensa una respuesta o está procesando lo que le dije, pronto siento una palmada en mi hombro por parte de la chica humana. Un gesto que me sorprende con creces y no sé que significa, ¿es un ataque o un cariño? No lo entiendo.

Luz: Pues...Amity, si no te considerase amiga y no quisiese que nos lleváramos bien créeme que no te habría pedido que me acompañases y tampoco te habría pedido que te unieras a nosotros en las clases de la tarde. Claro que he dejado atrás el pasado, todo eso que dices que hiciste "mal" pero que en realidad era tu...em...instinto de defensa cuando conoces a una nueva persona o algo por el estilo. Pero en el fondo sabía que no eras así en realidad, en el fondo sabía que eras alguien buena y que valía la pena; aunque cometiste tus errores, como dije, lo importante es darse cuenta y remediarlos y no esconderse de ellos. ¡Claro que somos amigas, Amity!

Me siento muy aliviada cuando escucho esas palabras salir de su boca, a decir verdad estaba muy tensa esperando su respuesta y...si, tenía miedo de que pudiese llegar a responder. Sabía que no me odiaba, no tendría sentido que me haya ofrecido acompañarla, que me haya invitado a pasar las clases con ella y, más importante aún, no tendría sentido que me haya invitado al Baile del Grom con ella.

Amity: Gracias Luz, y tu también eres una buena amiga, eres una muy buena persona y...de verdad lamento todo lo que dije sobre ti. Sobre todo aquello sobre que nunca serias una bruja de verdad, si, quizá tu forma de hacer magia difiera mucho de la nuestra y si, quizá no tengas saco biliar pero estoy 100% segura cuando digo que tu magia es la misma que la que hacemos las demás brujas y brujos y también te aseguro que puede que seas incluso mucho más competente que la mayoría de estudiantes de Hexside y también de Glandus y demás escuelas. Eres una autentica bruja, Luz.

Luz: Eso significa mucho viniendo de la bruja estrella de la clase de abominables y futura bruja estrella de la clase de las plantas.

Amity: Jajaja, ese lugar está reservado para ti, Luz, o para Willow. La verdad es que las dos son muy buenas.

Luz: Willow es superior en todos los aspectos a mi, yo lo único que soy capaz de hacer es usar glifos.

Amity: Y eso es mucho, Luz, recuerda que eres humana.

Luz: Lo sé, lo sé, no lo digo a modo despectivo hacia mi misma. Solamente...quisiera poder hacer magia como lo hacen todas ustedes.

Amity: Luz, tranquila, ¿si? Ya llegamos, andemos con cuidado y sin hablar, este sitio es peligroso. Cualquier cosa ponte detrás de mi, te protegeré.

Luz: Nos protegeremos, Amity, yo también puedo luchar. 

Asiento a lo dicho por Luz y ambas entramos al mercado nocturno, un sitio que siempre quise evitar. La primera en romper la regla de no hablar soy yo cuando le pregunto a Luz donde esta Eda por si tiene alguna idea de donde se puede encontrar la Dama Búho y ella me responde levantando sus dos hombros en señal de que no tiene ni remota idea de donde se encuentra. Caminamos por unos minutos hasta divisar a la lejanía a una figura muy parecida a la de Eda y pronto Luz confirma que se trata de ella al ver por un momento su bastón de bruja. He de admitir que nunca he visto a Eda, la Dama Búho de cerca, solamente aquellas veces que nos encontramos en la nieve y que formé un equipo con Luz para salvarla y también salvar a mis hermanos. De ahí en más...la única vez que la vi fue en carteles de "se busca".

Luz camina con cuidado siguiendo el paso de Eda quien no parece darse cuenta de que la están siguiendo. Pronto la bruja salvaje se detiene en un puesto aunque por la distancia no logro descifrar que se vende allí y tampoco que está comprando. Luz decide acercase un poco más a su Maestra con sus ojos clavados en ella y en cada movimiento que hace mientras yo la sigo por detrás. Luz estaba tan concentrada en Eda que no vio que había problemas en el camino y terminó chocando con una persona desconocida y cayendo de cola al suelo perdiendo así la capucha y quedando su identidad revelada.