Capítulo 15

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Cuando estaba en el instituto yo era bastante popular, tanto chicos como chicas se fijaban en mí todos los días. Pero yo solo tenía ojos para Kim Bae, el chico de la clase de al lado.

Era nuevo en el centro y no podía quitarle los ojos de encima. Sinceramente no recuerdo cuando me enamoré, solo recuerdo que me encantaba todo de él.

Era alto, no tanto como lo era yo, pero si recuerdo que solo nos separaban unos pocos centímetros. Tenía el pelo largo y teñido de rubio, algo que no es muy común aquí en Corea si no eres un idol. Por lo que escuché, estaba entrenando en una empresa para convertirse en uno. Ese detalle solo hacía que me interese aún más en él.

Como era bueno en todo se metían mucho con él, y yo siempre que podía lo ayudaba. Una de esas veces, le invité a un batido. Así fue como empezamos a hablar.

Quedabamos para comer, para estudiar o simplemente para vernos. Cualquier excusa era válida. Con el tiempo decidí declararme, aunque estaba casi seguro de que él era hetero. Para mi sorpresa, empezamos a salir ese mismo día.

Obviamente lo nuestro era un secreto. Además era la primera persona que sabía que yo soy gay, ni siquiera se lo conté a mis amigos. Tenía miedo de que se enterasen.

Todo era perfecto, hasta mágico diría yo. Pero a medida que iban pasando los meses, Bae era cada vez más distante conmigo. Yo no entendía qué le pasaba, y empecé a pensar que tenía la culpa.

A los tres meses cortó conmigo. Me dijo que no estaba seguro de si realmente era gay, y no quería hacerme daño. ¿Le había estado obligando todo este tiempo? ¿Realmente sintió algo por mi? ¿Solo me estaba usando para comprobar si le gustaban los chicos? No volví a verle por el instituto desde ese día.

Estuve autocastigandome mucho tiempo. Dejé de comer, de dormir y las cosas que me gustaban dejaron de llamarme la atención.

No me sentía bien conmigo mismo, y era notable el gran cambio que hice. Mis amigos siempre me preguntaban, ya que con el paso de los años seguía igual. Les mentí diciendo que estaba entrenando para ser idol. Eso justificó mi gran bajada de peso y mi cansancio.

Con el tiempo empecé a plantearme la idea y decidí audicionar. Aún no sé cómo, pero logré entrar. Para celebrarlo decidimos irnos a comer todos juntos.

Cuando me aceptaron en la empresa, me cambió. Sentirme aceptado era justo lo que necesitaba en ese momento, y no pensaba desaprovechar esa oportunidad.

Me sentía muy feliz esa noche. Hacía bastante tiempo que no comía, o que no bromeaba con mis amigos como si volviéramos a estar en el instituto. Sentía que volvía a ser yo, al menos durante esa noche.

Pero de repente, lo vi. Entró como si nada y se sentó en una mesa cercana a la puerta. No venía solo, estaba con un chico. En ese momento deseé con todas mis fuerzas que fueran solo amigos, pero al ver cómo le trataba... Claramente estaban saliendo.

Me sentí como un completo estúpido. Bebí mucho esa noche, demasiado. Mis amigos no me frenaron, estaban felices por mi y se dejaron llevar.

No sé ni cómo llegué a mi casa esa noche. Solo recuerdo que le escribí a Bae. Me respondió a la mañana siguiente diciendo que teníamos que hablar.

Algo dentro de mi me decía que no era una buena idea, y que era mejor dejar las cosas como estaban. Pero al final fuí con él. Me explicó que desde que me dejó, estuvo intentándolo con muchos chicos, pero que nada funcionaba.

Soltó las típicas excusas, "era mi primera vez con un hombre", "tenía miedo por si mis padres se enteraban". Pero aún así le perdoné. En el fondo nunca lo superé, así que fue fácil hacerlo.

Angel or DevilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora