Ser hijo del narcotraficante más peligroso no es nada facil, siempre estar huyendo y no estar estable en un lugar. Massimo, es el hijo del narcotraficante y en uno de sus cambios en la universidad conoce a una chica de la cual se enamora profundamen...
-Oh por Dios, que bello estaba el paisaje-dijo Abigail con una hermosa sonrisa.
-Parate ahí, te tomaré una foto-dije y Abigail se detiene y le tomo una foto.
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-A quedado horrible, se me metió todo el cabello en la cara-dijo Abigail y antes de que la borre la puse de fondo de pantalla.
-A quedado hermosa-dije mostrandole la foto.
-Ahora dejame tomarte una-dijo Abigail sacando su telefondo y tomandome una foto.
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-Uy que serio-dijo Abby con una hermosa sonrisa.
-Te amo-dije con una sonrisa y ella besa mis labios.
-Volteate-dije y ella levanta una ceja. Hace lo que le digo. Me bajo y saco la cajita con el anillo.
-Me estas poniendo nerviosa-dijo Abigail.
-Ya puedes darte la vuelta-dije y Abigail se queda petrificada y veo que sus ojos se llenan de lagrímas. Ella lleva ambas manos a su boca.
-Abigail, ¿quieres comprometerte conmigo?. Comprometernos a amarnos, a siempre estar juntos pase lo que pase-dije y una sonrisa llena de lagrímas es lo que me regala Abigail.
-Me comprometo a amarte por el resto de mi vida Massimo, le doy gracias a Dios por haberte elegido como mi compañero de vida, y más que eso el amor de mi vida-dijo Abigail, lo cual causó que mis lagrímas comenzaran a salir. Ella estira su mano y coloco el anillo en su mano izquierda.
-Te amo-dije y nos besamos junto mi frente con la suya.
-Gracias por hacerme tan feliz-dijo Abby y ella me mira.
-Yo le hablé a Dios y fuiste su respuesta, en verdad que aveces no puedo creer que tenga a mi lado a la mujer más hermosa y perfecta de este puto mundo-dije y ella sonrie. Se separa de mi y me agarra de la mano.
-Tu madre, me había dicho que me ibas a dar una gran sopresa que cambiaría nuestras vidas, así, que, Dios es tan maravilloso, que... me dio la oportunidad de hoy devolverte la sorpresa. No sé como reacciones, pero yo estoy muy feliz-dijo Abby con una hermosisima sonrisa. Ella comienza a buscar en su bolso, hasta que saca una caja bastante grande y me la entrega.
