Veintidós

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Cuando abro los ojos me encuentro con gente de todo tipo, pero nadie me interesa más que Jungkook. El hermoso Ángel que está a mi lado y sostiene mis manos. En automático mis ojos se encuentran con los suyos y nos permitimos llorar. Él acaricia mi rostro y me sonríe amargamente. Los doctores intentan alejarlo de mi y yo solo pido que no lo saquen.

- Déjenlo a mi lado, por favor. No se lo lleven.

- Amor debes de tranquilizarte y entender que ellos tienen que revisarte -,de pronto me dice Jungkook con toda la calma del mundo y aquello en lugar de tranquilizarme, solo hace que me enfade más.

- ¿Tranquilizarme? Realmente a estas alturas, ¿pides que me calme, cariño? ¡Por si acaso aun no lo notas, estuve a pocos segundos de morir y la culpa no es de nadie más que del maldito enfermo que tiene que estar a cargo de mi salud y seguridad, así que por favor deja de insinuar que todo dentro de este hospital esta bien. 

- Está muy alterado, Jungkook, fuera de aquí, lo vamos a relajar y a hacerle algunos estudios para descartar que tenga algo grave. Nosotros te avisamos en cuanto este todo en orden para que puedas pasar a verlo.

Él sale de la habitación sin decir alguna palabra más y entonces no escucho nada más que términos médicos que no logro entender, por alguna razón mi cuerpo ha comenzado a temblar, quizá de nerviosismo o evidentemente el miedo que Min Yoongi plantó en mi, ya será algo difícil de desaparecer. Al paso de unos pocos minutos las enfermeras desaparecen y entonces el médico que encabeza aquel grupo se sienta a mi lado. Me dedica una media sonrisa y coloca una de sus manos sobre las mías.

- ¿Cómo fue que pasó?

¿Qué cosa?

- Cuando se llevaron de aquí al chico que estaba contigo antes de que Jungkook llegara, gritó que es tu esposo, que solo quería llevarte a casa porque sus hijos preguntan por ti. Si tú me dices lo que realmente está pasando yo puedo ayudarte. Una cosa puedo asegurarte Jimin, y es que ese tipo no está bien... una de las ramas en las que me especializo es en las enfermedades mentales y para diagnosticarlas se llevan meses de agotador trabajo y algunas veces las personas pueden salvarse o condenarse de por vida, más cuando los enfermos son ágiles. La mirada que ese chico transmite dice de todo, menos verdad. Y por tu rostro puedo deducir que la verdad está en ti, no en él.

- ¡Que puede saber usted! ¡Idéntico a Jungkook! ¡Cree que todo es tan fácil! ¡Que soy la única víctima con el dialogo de la verdad en su cerebro! 

- ¿Sabes que Jungkook mas que ser un amigo para mi es como mi hijo? Llevo atendiéndolo desde los tres años y cuando tú llegaste a su vida, lo cambiaste, no sé qué hiciste pero durante los años que fuiste su amigo y posterior a ello, su pareja; te convertiste en la mejor medicina que él pudo tener. Y comenzó a cambiar, mejoró su alimentación y se disciplinó en el ejercicio a pesar de que odiaba hacerlo, sus inseguridades por arte de magia desaparecieron y el buen sueño y la sonrisa llena de entusiasmo y alegría volvieron a él después de tantos años. Pero... ¿Sabes cual es mi mayor enojo contigo? Que fue más cruel y fuerte la forma en la que lo hundiste que en la que lo salvaste de ese abismo. Habían transcurrido años y honestamente jamás pensé ver esa faceta en Jeon, se desapareció. Fué un borrón del mapa desde el minuto uno en el que tú te fuiste, él dejó de sonreír, abandonó su trabajo, se alejó de su familia y de cualquier persona que intentara siquiera acercarse a él, nos odiaba porque pensó que sabíamos donde estabas. No tienes idea de las incontables veces que atendí a sus llamadas de madrugada  escuchandolo llorar ebrio por horas, no tienes idea de las veces en las que curé sus nudillos llenos de sangre por haber roto algún cristal en busca de la desaparición de tu recuerdo que se veía en el reflejo. Lo acabaste, así que te pido... Que si estas dispuesto a luchar y recibir una segunda oportunidad, tengas el valor de quedarte y luchar con él. En estos momentos nada lo fortalecerá más que tu presencia, y si te vas a ir. Ni siquiera hables con él, no lo veas a los ojos y vete sin hacer ruido. Lo vas a herir, pero será más fácil para él, dejarte ir... Si el último recuerdo que tendrá será tu imagen postrada a una cama de hospital. Débil, esperando por su ayuda...

- ¿Quien cree que es para venir a recriminar cosas y situaciones que no conoce?

- Te he dicho que Jungkook más que un paciente es como un hijo para mi.

- No pienso hacerlo cambiar de parecer porque debilitarme aún más de lo que ya estoy, no es mi especialidad, odio cuando me ponen en una situación así, porque solo confirmo que todos me odian por una perspectiva equivocada de lo que sucedió. ¿Usted cree que ha sido fácil para mi? Enfrentar todo esto, yo solo.

- ¿Solo?

- En todo caso a quien debo darle explicaciones sería a Jungkook, no a usted.

- Espero que cuando tengas que enfrentar todo, ya estés preparado.

- ¡¿Preparado?! ¡Se atreve a señalarme como culpable! ¡Me recuerda que tan hijo de puta soy con Jungkook, y solo se largara a decir cuanta mierda más se le venga a la mente! ¡Me iré de aquí! ¡Y no haré ruido!... Pero si el día de mañana Jungkook pregunta por mi, tenga el valor de decirle que su mejor consejo hacia nosotros fue que yo me alejara...

El corazón me palpita a mil por hora, podría jurar que por un momento lo sentí fuera de mi pecho. El pánico comenzo a crecer desde lo más profundo de mi cuerpo y de pronto tuve miedo. Un profundo y aterrador miedo, muy similar al que sentía cada vez que escuchaba los pasos de Yoongi acercarse a mi recámara, para azotar mi débil cuerpo a la cama y violarme hasta que el límite del éxtasis abrazaba su cuerpo.

Ahora, la sensación era idéntica, solo que me dolía mirar al frente y aceptar que la mayoría de los miedos que ahora tengo no son por culpa de nadie más que mia, en aquel momento no pude tener ni una gota de valor para afrontar todo y acercarme a Jungkook, lo único que deseaba era poder pedirle perdón y explicarle los motivos que estuvieron detrás de cada acción que lo lastimó.

Sin embargo, ¿Tengo derecho a tan sólo una oportunidad para poder explicarle todo lo que hay detrás de mis acciones? Tal parece que no, y es que pensándolo fríamente, yo fui quien lo acabó. Yo jale del gatillo liberando una bala que difícilmente saldrá de nuestros corazones.

Abrumado y con el corazón lleno de heridas, continúe sollozando en silencio, no sé con exactitud cuanto tiempo estuve llorando. Sólo fui conciente del momento en el que mis ojos se cerraron y yo sólo deseaba que ese negro infinito se hiciera eterno.

(💜)

Unos labios se posan sobre los míos, siento su mirada puesta en mi rostro y yo quiero levantarme y abrazarlo.

- ¿Jimin-ah? Cariño. Por favor, no me dejes...

Quiero hablarle pero las palabras no salen y sin embargo, mis ojos se abren de pronto. Revelandome su hermoso rostro, aquellos ojitos de bambi llenos de lágrimas, sus labios temblando el uno sobre otro y sus manos acunando mi rostro.
Me dedica una tierna sonrisa y entonces su expresión se relaja y me observa, con admiración, con ternura, con... Amor.

- ¿Esto es a lo que llamarían un buen sueño?

Le digo de pronto con las lágrimas a punto de escapar de mis ojos.

- ¿Porque sería un sueño?

- Jungkook...

- ¿Es que acaso, no puedo admirarte?

- Pero no de esa forma...

- ¿De qué forma?

- No como si fuese el de antes. No me mires con amor, no me mires como la mejor persona de tu vida. No lo hagas. Jungkook, mi amor por ti, no me permite verte sonriendome de la misma forma en la que lo hacías. Te he lastimado, me alejé de ti... Te rompí, no te merezco. No merezco nada de ti. Por favor no lo hagas.

- Jimin. Es que acaso aún no entiendes. Que lo eres todo para mi. Que si tu estas mal, yo la pasaré mal contigo, que no puedo alejarme de ti, porque eres el motivo por el cual el universo se acomodó para permitirme estar a tu lado. Eres lo que más amo en el mundo, es tu sonrisa, tu voz, tus labios, tu rostro, tu forma de ser, las letras de tu nombre, es todo de ti lo que yo amo y por quien voy a luchar hasta el último de mis días. ¿Porque no me dices ya la verdad? ¿Porque nos sigues matando? ¿Acaso no soy lo sufisciente para ti?

Y esas palabras son las que me aterrizan y me hacen ver, que como siempre. No estoy sólo.

(💜💜💜)
Buenooo, ya sé me odian. Tardé mucho para liberar este capítulo y es que escribir con el corazón hecho pedazos es difícil. Espero les guste. Todos los días me esfuerzo para escribirles lo mejor. Los amo💜

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