ONE SHOT -- Tokyo Revengers 🔞🖤🔥

Kokonoi Hajime

Trabajabas en uno de los bares más famosos en medio de la ciudad, en la cual solo iba gente importante o de un estatus muy alto.

Te encontrabas trabajando el turno nocturno, por lo general servías en las áreas VIP y allí aprovechabas para sacarte una que otra cartera; hasta ahora nadie había descubierto que tú robabas las billeteras de los clientes con más dinero. Para ti era lo más fácil del mundo hacerlo y como estaban tan borrachos no se daban ni cuenta.

Mientras limpiabas una de las salas VIP llegaron nuevos clientes a la sala, se trataba de un hombre de cabello entre negro y blanco, por el tatuaje en su cabeza se notaba que era miembro de Bonten, para ti era el blanco perfecto para sacar unos cuentos billetes extras.

--Buenas noches señor, dígame ¿en qué le puedo ayudar? – dijiste amablemente con una sonrisa, el joven alzó la mirada y te divisó de pies a cabeza.

-- Un Martini seco y una botella de wisky. – Dijo mientras sacaba su celular y se disponía a revisarlo.

-- Con gusto señor, enseguida se lo traigo. – hiciste una pequeña reverencia en señal de respeto y saliste de la sala.

Te dirigiste a la barra donde servían todos los tragos, allí estaba tu amigo del trabajo Kaito, quien era el único que sabía el cómo robabas y pues a veces le dabas una parte de lo ganado para que no dijera nada.

-¡Hey Kaito!, me ayudas con un Martini seco y una botella de wisky, aparte me das hielo, limón y sal, por favor.

-- Con gusto querida, y ya sabes quién va ser la victima de hoy. – Dijo con una sonrisa en los labios mientras preparaba el martini.

-- ¡Cállate! te pueden escuchar, pero solo te diré que sí, es alguien de la mafia por lo que pude ver, de seguro sacaré un buen dinero de allí.

-- Ten cuidado, sabes que esas personas pueden matarte y desaparecerte como si nada.

-- No te preocupes, estaré bien. Bueno me tengo que ir, me deben estar esperando. Bay..

Tomaste la bandeja con los tragos y fuiste directo a la sala, pusiste los tragos en la mesa mientras tanto observaste que en el bolsillo de su chaqueta se encontraba su billetera, ¡Bingo!, ahora solo tenías que sacarla.

Antes de levantarte por completo hiciste como si hubieras perdido el equilibro cayendo a un lado de él, en ello tomaste su cartera y la escondiste debajo de la bandeja. Te levantaste inmediatamente agachando la cabeza en son de vergüenza.

--Lo siento mucho señor, que torpe soy, de verdad lo siento. -- El joven se quedó viéndote torciendo los ojos algo molesto.

--No importa, ahora vete, si necesito algo te llamaré.

--Si señor como guste, con permiso. -- Dijiste sin más y saliste del lugar.

Te dirigiste a los canceles donde dejabas tus cosas, allí revisaste la billetera, esta tenía una foto de una chica, pero dejando de lado la foto tenía como 500 dólares en efectivo y aparte sus tarjetas de crédito. Te habías ganado la lotería.