Nadie nunca hubiera imaginado que te encontrarías en una cama al lado del que considerabas hace muchos años atrás como tu enemigo, pues sí, habías pasado una noche de pasión con Hanma, ¿pero cómo diablos terminaste así?
Todo comenzó cuando tú y Hanma se conocieron, habían crecido por el mismo barrio, pero siempre se comportaba de forma superior ante los demás. En la secundaria no cambió nada, todas las chicas lo adoraban, sin embargo, era bueno para meterse en muchos problemas, hasta que fue expulsado. Sabías que se había unido a una pandilla o algo así porque lo veías con esos típicos uniformes de pandilleros.
Él simplemente nunca te prestó atención y no es que te importara, pero todo cambió cuando aquel chico se metió con tu hermano. Por desgracia tu hermano también pertenecía a una de las pandillas, pero en una pelea con la pandilla de Hanma habían perdido y lo habían destrozado. Te sentiste tan furiosa y frustrada por no poder hacer nada que decidiste entrenar.
Entrenaste día y noche para hacerte más fuerte y entrar tú también en una pandilla fuerte, al cabo de un año lo lograste, después de vencer a unos cuantos chicos de ToMan, Mikey el líder te recibió en su pandilla. Estabas muy contenta sabías que todo tu esfuerzo no sería en vano y que podrías enfrentarte por fin contra Hanma.
Pero todo ello cambió cuando la pandilla de Hanma "Valhala" y ToMan se unificaron, tenías que ver a Hanma todo el tiempo por pertenecer a la misma pandilla, eso solo te hacía enojar más, pero no podías hacer nada. Hanma siempre te molestaba por ser la única chica en la pandilla, ganas no te faltaba de darle una paliza, pero por cuestiones de paz no podías hacerlo, excepto por aquel día.
--¡Hey preciosa! Ahora si me vas acompañar – Torciste los ojos mientras lo ignorabas por completo y seguías tu camino hacia tu moto.
--¡Hey! A ti te estoy hablando – Había tocado tu hombro, lo miraste de reojo mientras tu mano estuvo a punto de darle una cachetada que él esquivo al instante.
--Puedes dejar de molestarme si no quieres que patee tu engreído y tonto trasero.
--Vaya, la chica tiene agallas, y que vas hacer, ¿vas a golpearme?... jajaj...con esa estatura lo dudo. – Estuviste a punto de darle un golpe y una patada, pero él lo detuvo al instante botándote al piso, sujeto tus brazos con fuerza para que no lo golpearas.
-- ¡Suéltame Hanma! – Lo miraste con furia, no sabías como podías patearle el trasero a todo el mundo, pero con él te sentías tan vulnerable.
-- Te soltaré solo si me das un beso – Tus mejillas se sonrojaron al instante, tu cuerpo se aliviano y mostraste una sonrisa en tu rostro.
--Bien Hanma, si es lo que quieres, acércate. – Él sin dudar se acercó mientras tú con la rodilla le diste un golpe en la parte baja, te soltaste de su agarre y le diste una cachetada; subiste a tu moto y te fuiste de allí.
Había pasado mucho tiempo de aquel suceso, y también muchas cosas, prácticamente el mejor amigo de Hanma murió, la ToMan se deshizo por completo y tú te quedaste sin pandilla.
Años más tarde te habías graduado, encontraste un trabajo de medio tiempo en una tienda para poder pagar tus estudios, no sabías nada de los chicos que algún día fueron tus amigos en la pandilla, solo esperabas que se encontraran bien.
Te encontrabas trabajando en el turno nocturno en aquella tienda, era aburrido porque prácticamente nadie venía en la noche, pero esta vez fue diferente, un cliente encapuchado entró a la tienda, pensaste que se trataría de alguien que robaría algo, por lo que te mantuviste alerta. Aquel joven encapuchado se acercó a pagar, tenía una cajetilla de cigarros, lo viste y tus ojos se abrieron como platos.
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ONE SHOT -- Tokyo Revengers 🔞🖤🔥
Fanfic⚠Advertencia ⚠ -- One Shot con contenido +18, si no te gusta este tipo de contenido, por favor no lo leas. --Todos los personajes son mayores de edad. -- Los personajes le pertenecen a Ken Wakui -- Sexo con o sin protección. --Lenguaje subido un poc...