2

19 1 0
                                    


Un nuevo día para Helem Lennox, podría decirse que mis mañanas eran aburridas pero la verdad es que no, disfrutaba mucho de estar sola y siempre oía a todo volumen a mi banda favorita "Morat", son lo máximo y daría lo que fuera por ir algún día a unos de sus conciertos, tenía una rutina, me levantaba, tomaba una buena ducha para despertarme completamente y luego me preparaba un pan con jamón por lo más ligero ya que casi nunca me daba hambre en el desayuno, en la Universidad "Brooks" las clases comenzaban a las 10 o bueno para mí, todo dependía de la carreras que estudiaras y por estudiar psicología, entraba a esa hora.

No tenía un horario tan rudo pero los trabajos eran algo pesados, y eso hacía que me trasnochara siempre, tanto para tener unas ojeras increíbles que tapaba con maquillaje.

Se preguntarán que pasó con papi Wells, luego de que mi cerebro rebobinara por completo recordé que no pasó absolutamente nada ya que no estaba en mi cama o bueno, ni siquiera en el sofá, después de su heroica presentación que debo admitir muy original cada quien siguió con su camino y a decir verdad eso me entristeció un poco, ya que me sentía familiarizada con él, sí, deben pensar que estoy loca pero a ver, ¿en estos tiempos quien no lo está?, de igual forma había algo extraño que aún no podía descifrar y su mirada, me veía como si supiera quien era, y es algo que técnicamente si era posible si venía a la Universidad Brooks, mi mente estaba enfocada en otras cosas.

Salí del cuarto y me dirigí al baño, luego de 15 minutos ya estaba completamente vestida y a decir verdad la mayor parte del tiempo parecía que usaba pijama, pues mi residencia quedaba super cerca de la Universidad y era como mi casa, llevaba unos monos holgados de cuadros, un suéter manga larga color gris y unos zapatos blancos que me regaló mi abuela, además mi cabello recogido en una cola alta.

Estaba justo por darle un mordisco a mi pan cuando el timbre sonó. Al llegar a la puerta, abrí cuidadosamente y encontré a mi mejor amiga hecha una furia.

¡Buenos días Solecito! Hablé con una sonrisa en la caraParece que lo que planeaste no salió como esperaba.

— ¡El idiota de Trend no dejó que hiciéramos nada! ¡Y de paso te fuiste dejándome a mi suerte Helem! — Habla con furia mientras se adentra en la habitación fulminándome con la mirada.

— Pues te recuerdo que tú lo hiciste primero así que no reclames nada, además siempre me haces lo mismo, y yo nunca me quejo­— Le respondo — ¿Trend? ¿El chico de La Gran?

— ¡AH SÍ! Ese mismo, dijo que no podía y se fue dejándome sola, sin siquiera darme un pico— su tono de voz se relaja y parece algo triste.

Maya era una persona muy sensible y si algo no salía como esperaba ella explotaba, podía ser en tristeza o rabia, siempre yo era la amiga reflexiva que la aconsejaba y pues era algo bueno ya que estudiaba psicología y la idea de ayudar me encantaba, en cambio ella estudiaba la carrera de medicina, nos conocimos de una manera muy rara pero desde ese momento supe que seríamos inseparables.

— Que por primera vez un chico no quiera nada contigo, no es el fin del mundo Maya— Hablé.

Ella me observa desde la cabeza hasta los pies y hace una mueca de disgusto.

—Lo sé, solo que me dio rabia—Admite— ¿Irás con eso puesto a la Uni? — Señala mi ropa con su dedo— No creo que te de muy buena presentación delante de todos.

Y sabía a lo que se refería el tema de la popularidad, ¿lo mencioné antes?, nos volvimos el centro de atención cuando en el primer año ganamos contra nuestro mayo rival, La Universidad "Lebrount films" en un campeonato de Esgrima y Hockey sobre hielo, donde desde entonces nos declararon la guerra, casualmente yo había tomado clases de Esgrima y mi grupo ganó, mientras que Maya había participado ese año en el Hockey sobre hielo en el cual, también ganaron, ya habían pasado dos años pero igual nos respetaban y muchas chicas nos veían con admiración, y seguido de eso, Maya consiguió muchísimos pretendientes.

Las relaciones no eran mi fuerte, sí me llegaban mensajes de chicos para salir, pero el sesenta por ciento de estos chicos solo buscaban un polvo y el otro cuarenta eran unos imbéciles que no sabían ni sumar, así que preferí estar soltera hasta que llegara el indicado.

—Sabes que no es la gran cosa, además ya casi nadie recuerda eso— Respondo.

— Como quieras— Declara— Ya vámonos, son las nueve y cincuenta.

Tomo mi pan de jamón para comérmelo en el camino y cierro con llave, salimos del edificio mientras le cuento a Maya lo del chico llamado Wells y lo que hizo, también tuve que aguantar sus preguntas sobre si estaba bueno y demás. Al llegar a nuestro destino, tomamos diferentes caminos hacia nuestras aulas.

***
El día se tornó algo lluvioso y las clases se hicieron interminables, salí al campus con algunos compañeros de clase, Alex y James, nos volvimos como mejores amigos desde el primer año aquí, siempre nos tratamos de ayudar en lo que podíamos y es muy lindo, somos algo así como los tres mosqueteros, todos para uno y uno para todos ¿es así no?

—Debemos ir a la fiesta de Lily Gil esta noche, ¡estará genial! y podemos conseguir muy buenas chicas Alex— Rumora James quien era el amigo fiestero, era muy lindo, ojos castaños y pelo negro con una piel morena, un excelente cuerpo además de un humor único, eso lo hacía especial para mí, ya que siempre que reía, era feliz.

— ¡Joder sí! — Exclama Alex emocionado— Y quién sabe si le conseguimos a un buen polvo a Helem, parece muerta.

Le dedico una mirada de disgusto.

—Yo no estoy muerta.

—Pues parece, el alma del aburrimiento habita en ti mi cielo— Agudiza un poco la voz mientras parpadea varias veces intentando convencerme.

Seguimos caminando hacia el campus, mientras a mis espaldas escuché a James decir algo.

— Déjala Alex, luego de lo que pasó con ya sabes quién, evidentemente algo en ella murió— Susurró para ellos dos pero fue inevitable que llegara a mis oídos.

Inmediatamente me tensé, Alex y James saben lo que pasó, lo que pasó con Ella en mi segundo año, desde entonces hicimos un pacto, no se hablaba nada respecto al tema, pasé años culpándome por lo que pasó y ellos también eran tan culpables que decidieron ayudarme a encubrir lo sucedido, a veces mis pesadillas vuelven y escucho sus gritos, el miedo en sus ojos, ese miedo que yo causé, aún siento sus manos sujetándome y creo que es algo que nos tormenta a los tres aunque ellos no lo digan

Ella no merecía lo que le hiciste.

Cállate.

Tú lo hiciste, tú eres la responsable no él.

—Por favor, para— susurré, mientras caí de rodillas y tapaba mis oídos— ¡POR FAVOR, CÁLLATE!

Deberías pagar, no deberías estar aquí.

Solo pude sentir los brazos de Alex y James, sujetándome.

—Haz que desaparezca el recuerdo Helem, no es tu culpa, no es nuestra culpa— Alex me dice, consolándome— ¿Vez lo que causas imbécil? — Pude ver cómo le hablaba con rabia a él moreno.

—Yo-yo... lo siento Helem, no lo hice con esa intención— exclama James.

—Iremos a esa jodida fiesta y la disfrutaremos como si fuese la última— Fue lo que dije mientras observaba a los chicos delante de mí.

— ¿Segura? — Alex preguntó

— La única forma de vencer a tus fantasmas es darles la cara y no dejar ver el miedo que causan en ti— Dictaminé.

James sonrió con malicia.

—¡¡A darles, cabrones, seremos los putos amos de la fiesta!!

El miedo es natural en el prudente, y el saberlo vencer es ser valiente.

No podrás ignorarme por siempre, pagarás Helem.

***

Holaaaa queridos lectores, espero estén disfrutando la historia, aquí les dejo un flyer con mis redes sociales activas, yo misma lo hice, espero les guste, gracias por apoyarme, los amo mucho y les mando un besote, muak </3

***Holaaaa queridos lectores, espero estén disfrutando la historia, aquí les dejo un flyer con mis redes sociales activas, yo misma lo hice, espero les guste, gracias por apoyarme, los amo mucho y les mando un besote, muak </3

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Más allá de lo que vemosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora