𝙏𝙃𝙀 𝘽𝙇𝘼𝘾𝙆𝙋𝙃𝙊𝙉𝙀 𝙋𝙍𝙀𝙁𝙀𝙍𝙀𝙉𝘾𝙀𝙎

ii. 𝐏𝐑𝐎𝐓𝐄𝐂𝐓 𝐘𝐎𝐔

⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘⫘

Finney Blake one-shot
tw; temas delicados
❨¡Finney x Oc fem! ❩

“Oh I am just a kid
I'm afraid of the dark
But I'm obsessed with ideas
One day I'll go far”

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Que jodido era que tu propia novia tuviera que defenderte de tres bravucones porque tu eras demasiado cobarde para hacerlo por ti mismo. Veía como la agarraban entre dos y el tercero la golpeaba con tanta crueldad pero no tuve fuerza para levantarme porque perdí la consciencia

—¡Lo mataron! — la chica grito desesperada y los tres chicos salieron huyendo mientras se hincaba a la par, tomándolo con mucho cuidado.

Cuando desperté ella estaba sacudiendome con los ojos llorosos.

—¡Finn! — me abrazó con tanta fuerza que sentí como humedecía mi camiseta, trabandose al hablar —¡Pensé que te habían matado, no reaccionabas! — envolví mis brazos sobre su cuerpo tembloroso y analice de cerca todas sus heridas, no eran tan graves.

—Yo debería protegerte a ti, Lylyan, no tu a mi— me encargué de limpiar sus lágrimas y nos ayudamos a levantarnos mutuamente —No importa Finney. Yo siempre voy a protegerte — es lo que siempre decía cuando se metía por mi y aunque no estaba de acuerdo, ella parecía nunca temerle a nada y sobretodo, a pesar de ser un total debilucho, ella me amaba y yo a ella.

Lylyan siempre portaba un relicario de corazón con una foto nuestra y yo siempre traía la pulsera que me dio hecha por ella misma, ella olía a una colonia frutal y floral con un ligero toque a vanilla que no era demasiado fuerte al ser una de bebé. Mordía su lápiz cada vez que parecía no entender algo y los mechones de sus cabellos se desordenaban cada vez que lo amarraba, por ello lo cortó y lo dejó suelto. Ella era vista como una chica bien que defendía a su novio. Siempre estaba rodeada de gente y parecía traer amor y paz a su alrededor, siendo graciosa, carismática y empática. Y aunque ella no sabía pelear, me defendía.

Lylyan era todo lo contrario a mi, que era un rechazado, nenita y cobarde. Y aún así, ella me escogió, por encima de otros chicos populares, ella estuvo dispuesta a tomar mi mano entre los pasillos y divulgar que era su novio sin importarle que dijeran los demás, me presentó y me acogió en su familia que no era nada parecida a la mía, pues yo tuve siempre vergüenza de que conociera al alcohólico de mi padre, pero terminó por hacerlo un día que me enfermé y me llevó una tarea.

Incluso para el le pareció tan gentil y tan dulce, que no pude evitar sentirme orgulloso. Mi persona a seguir era mi propia novia y eso no podía hacerme más feliz.