La Pequeña De Daddy

CAPITULO 8

-¿Qué demonios? ¿Maggie? ¿Cómo llego aquí? - quedé en un estado de shock al ver a la pequeña ahí, la verdad se veía muy maltratada al igual qué delgada.

-!QUIÉN APUESTA MÁS! ¿3000? ¿QUIEN DIJO 3500? !VAMOS SEÑORES ESTA BELLEZA ES ÚNICA!

Solo podía oír al presentador decir varias cifras y ánimo a los demás clientes, seguía inconsciente por la aparición de Maggie.

-!5000 A LA UNA!

-¿QUÉ? ¿ya va a cerrar la apuesta? No eso no puede pasar.

-!5000 A LAS DOS!

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-!!10000!!

-¿QUÉ?¿10000? !! VENDIDA!!, GRACIAS DAMAS Y CABALLEROS POR ESTA ESPECTACULAR NOCHE SUS COMPRAS SERÁN ENVIADAS A SUS HOGARES DESPUÉS DEL PAPELEO.

-¿QUE DEMONIOS?¿WILLIAM? - dijo exaltado Max al ver el comportamiento repentino del nombrado.

No lo podía creer... Acabo de comprar a Maggie, no esto no era lo que quería. !!CIERTO MAGGIE!!

-Oye...WILLIAM ¿A DONDE VAS? - mostró preocupación al ver a su amigo saliendo de la sala como loco.

Pov William

Salí de la sala en busca de Maggie ¿Dónde estará? No puedo descuidarla una vez más no después de ver su estado. Busque las oficinas para ver si me podían dar un poco de su información y el por qué estaba ahí. Estaba perdido en ese enorme edificio, hasta que me encontré con un trabajador.

- Oye, ¿Dónde están las oficinas? O tu jefe- dije serio ante el chico enfrente de mi.

-¿Las oficinas? ¿Es un cliente?- menciona nervioso.

- Así es, acabo de hacer una compra aquí y quiero información sobre mi producto - odiaba tratar a Maggie como un objeto pero en este lugar no puedo bajar la cabeza o ser blando.

- Claro señor, dígame - este subió hasta el 8 puzo dónde se encontraba su jefe - aquí es señor.

- Vete.

- Claro señor, con su permiso me retiro.

Al retirarse el chico lo primero que hize fue tocar la gran puerta de roble obscuro. Hasta que una mujer abrió la puerta.

- ¿se le ofrece algo señor?

-Quiero hablar con tu jefe.

-¿Ah? No creo que sea posible, mi jefe no se encuentra en este momento.

-Quiero información sobre mi resiente producto comprado.

-¿Su producto? Claro, dígame el nombre del producto solo le diremos los datos básicos ya que lo demás el restricción por parte de la empresa.

- Está bien, se llama Maggie.

-¿Maggie? ahora veo por qué tanto interés - dijo un hombre atrás de la chica - déjalo pasar Miriam.

-¿Ah? Si claro.

-toma asiento amigo, veo que cómprate mi producto estrella, valla que tienes buen ojo - menciona mientras toma un poco de licor - pero déjame presentarme primero, mi nombre es Félix y soy el jefe de esta zona.

- Un gustó Félix, mi nombre es William. Bueno iré al grano quiero que me digas que sabes si re esa chica y el por qué está aquí.

- Míriam trae su expediente y retirate.

-claro señor... Aquí está, ya lo tenía listo y con su permiso me retiro - hizo reverencia y cerro la puerta.

- Bien, antes de darte estos documentos te lo que decirte que... Es una chica demasiado deliciosa y linda lastima que callo en manos de esos malditos. Y ¿Que relación tienes con ella? - dijo con un semblante serio.

*¿Deliciosa? ¿Qué le pasa a este imbécil? ¿Por qué le dice así mi pequeña?*

-¿JA? ¿Qué relación te daría con esa mocosa? No puedo conocer primero a mis juguetes. No soy un nombre que se acuesta con cualquiera - me duele hablar así cuando me dirijo a mi pequeña sin embargo cualquier sospecha en este lugar y estoy acabado.

- Veo que eres un gran hombre, ¿Quien eres? Eres una persona interesantes.

-No te lo había dicho soy William de la área del Norte.

- Bien, me agradas chico, pero esto no te saldrá nada barato esto, es una información muy valiosa.

-¿Dime una cifra? El valor no me importa.

-JODER HOMBRE, sabes toma te lo doy, tienes mis respetos quiero que quedemos en buenos tratos - dijo mientras le da el sobre con sus documentos.

- Me parece algo justo, quiero tregua entre nosotros - dijo satisfecho al ver que fue pan comido.

- Claro me encargaré de que te envíen su producto cuanto antes y de una manera muy especia.

- Bien, sin embargo no daré mi dirección personal, quiero que la envíen a esta casa. Ya sabes no quiero que mi esposa se entere de esto.

- Valla, bueno disfruta de tu noche y respeto al papeleo puedes hacerlo después.

- Eso haré, hasta luego Félix - estrecha la mano del nombrado.

- Hasta luego - responde al gesto.

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Salgo de la oficina muy asustado por todo lo que sucedió, ese tipo era muy raro.

Decido llamar a Max, supongo que debe estar buscándome.

-¿William?

-Hola Max, ¿Dónde estás?

-¿En dónde? pues en camino a mi casa,voy a disfrutar de mi compra.

-Mierda, bastardo creí que me estarías buscando - dije saliendo del edificio.

- ¿Por qué lo haría? Pensé que también te habías ido a tu casa por el mismo objetivo...Por cierto ¿Dónde te habías metido?

-Ahg en ningún lado, solo... Estáva muy emocionado, si solo eso. Sabes me tengo que ir tengo que llegar a casa.

- idiota no puedes esperar al menos que llegue a tu casa, me sorprendió que dieras la dirección de tu casa.

- Oye te dije que me tengo que ir, todo eso lo hablamos después y para que lo sepas ella ya está en mi casa - colgué la llamada y rápidamente le mandé un mensaje a mi mayordomo para que venga por mi.

Pasaron varios minutos y Fred mi mayordomo ya había llegado, le ordene que rápidamente se digiera a la casa de la zona B, pues siendo un empresario no puedo dar mi ubicación personal.

Media hora después llegué y lo primero que vi al entrar fue una enorme caja de regalo con un gran moño rojo y a lado una etiqueta que decía " Gracias por tu compra, su producto se encuentra adentro solo jale con fuerza el listón de la misma etiqueta. Disfruta de tu producto chico". Mierda ese bastardo si que es extraño, jale la etiqueta y me sorprendió el interior de esta.