Manicomio

Parte 9 tortura

PARTE 9

            -Señorita  Karel, señorita Karel- dijo esto un par de veces separándolo por el sonido acústico de un micrófono- despierte por favor- esta era la voz inconfundible del mano derecha del promotor: Clarke.

Karel despertaba después de un par de pedidos mas, con el pelo sobre su cara y sin sus  peculiares lentes de color lila- donde estoy-  pensó, un tanto desorientada. Se encontraba a un par de metros sobre el suelo, suspendida por una especie de aparato con muchas cuerdas, que se amarraban de sus brazos, axilas, torso y piernas, dejándola en una posición parecida a la crucifixión, con los brazos extendidos y las piernas juntas. Esto le impedía hacer movimiento alguno.

El lugar parecía una especie de laboratorio, pero sin tantos aparatos, sin ventanas y con una puerta completamente presurizada, solo resaltaban en la pared de el frente una pequeña bombilla roja que iluminaba  el lugar, una cámara de seguridad, un televisor y un parlante de donde salía la voz, al lado derecho de ella se encontraban varios brazos mecánicos con jeringas, algunas especies de cuchillos, y otros objetos amenazantes.

Volteo al otro lado, y  allí estaba él, en la misma situación, pero inconsciente, con su cabello gris que sobresalía en cualquier lugar, tenía un par de moretones en la cara, pero parecía estar bien: era Andrew

           - Que quieres de nosotros rata asquerosa- grito Karel, con mucha determinación, directamente a la cámara.

           - Tranquila, en unos minutos se lo explicare- repuso Clarke.

A pesar de estar amarrada y disgustada la belleza de Karel resaltaba en la penumbra, la tenue luz roja iluminaba su rostro de tal manera que dejaba al descubierto sus hermosos ojos, difíciles  de observar tras sus lentes, ella era verdaderamente hermosa, las razones  por las cuales Andrew se la pasa con ella casi todo el día saltan a la vista.

            - Andrew, Andrew, despierta- musito Karel, pero el chico no respondió, la única forma por la que ella deducía que estaba vivo era por su lenta pero frecuente respiración, la cual le tranquilizaba.

Pasaron quizás diez  o quince en los que no escucho ni una palabra de Clarke, cuando de pronto este rompe el silencio

           -Están aquí para jugar conmigo por un rato- izo una pausa y siguió- a ver me explico, esto es un centro de tortura. Pero no se alarme, en los últimos años he aprendido que las mejores torturas son las que no hacen mucho daño pero si generan mucho dolor. El juego es simple solo tienes que mantenerte despierta, pero aun así todo depende de sus amigos, quienes lucharan arduamente para rescatarlos- Derrepente el monitor se encendió y se pudo ver a James y compañía peleando contra un trió de "cuidadores"- hay tres formas de tortura, te are unas preguntas, si las erras obtendrás las tres al mismo tiempo, aun así si respondes correctamente perderás algo, pero solo te torturaremos de una forma y te daremos la oportunidad de que escojas.

            -Deja de decir estupideces y libéranos de una vez- Dijo Karel

           -Lamento decepcionarte pero eso no será posible, y te ruego que no me vuelvas a interrumpir. Prosigo, tu amigo tiene una vía en su vena que le suministra un leve veneno, pero que en grandes cantidades puede ser mortal, se necesitan veinticuatro gotas para que muera, cada vez que respondas mal una pregunta o decidas darle una dosis se le administraran dos de ellas. Además de eso podremos torturarte a ti: inyectándote drogas, aplicándote electricidad, entre otras cosas. Y por ultimo esta mi tortura favorita, abajo al ras del suelo están un par de tuberías, que irán llenando el lugar de agua, estas tuberías tienen doce seguros, tras un fallo tullo se quitaran uno de cada una, mientras menos seguros mayor presión y el agua saldrá mas rápido. Todo esto puede generarles más tiempo a sus amigos para que los rescaten o quitárselo.