🐝↶ ✦ ↷❝ 𝙲𝚑𝚒𝚌𝚘 𝙖𝙗𝙚𝙟𝙖 ❞↶ ㍿

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Habían Estado un rato hablando, pero en todo ese rato en mono no dejaba de mirar con sospecha a la abeja, este mismo lo noto pero no dijo nada al respecto. Actualmente estaban llendo devuelta a donde estaba la caravana o donde recordaban donde estaba, por suerte MK había convencido a Hachi de acompañarlos aunque sea a verlos marcharse, el aceptó y en el camino la chica dragón y el chico abeja iban hablando ya que tenían algunas cosas en común.

── y.. Hachi.. ¿Tienes parientes o padres? ── Esta pregunta fue echa por el rey mono, que miro como inmediatamente se le borraba la sonrisa al joven adolecente, teniendo una mirada un poco vacía y poco expresiva en ese momento.

── Lo tube alguna vez ── respondió seco, mientras miraba el suelo.

Un sentimiento de culpa invadió al mono, talves no debió de preguntar eso.

Ya habían llegado a la caravana, la abeja se quedó un poco alejado de allí por miedo a los demás amigos del peli-castaño así que se quedó mirando desde lejos mientras que algunas abejas (normales) se le posaban encima percibiendo el dulce aroma que siempre tenía el demonio, el chico sonrió biendo como residían a Mk y los otros dos, estaba apuntó de retirarse pero un chillido lo alertó al escucharlo muy serca derrepente.

── ¡Es un demonio abeja! ── El chico retrocedió unos pasos tratando de guardar su espacio personal contra aquel extraño quien tenía brillos en los ojos y inspeccionada al de antenas con entuciamos.

Sip, era Tang mirando cada rasgo del chico mientras que este estaba paralizado y las abejas que antes tenía en el parecían desconfiadas de aquel señor.

── ¡Sus manos son suaves! Awww ── El Rubio miro a los otros pidiendo ayuda y en eso llegó Pigsy, apartando al hombre y mirando con desconfianza al chico que estaba estático

── ¿Quien eres chico? ── El de antenas no pudo responder, estaba en un tipo de shock que no le dejaba hablar ni moverse a excepción de sus antenas que demostraban lo nervioso que estaba al estar temblando ── ¿Eres mudó o algo? ¡Responde! ──

El Rubio sintió como sus ojos empezaban a dejar caer pequeñas lágrimas, estaba.. ¿Llorando? Que patetico pensó para si mismo, dirigió su mirada al suelo mientras que su cuerpo porfin reaccionó y lo primero que hizo fue limpiar sus lágrimas y disculparse, en eso llegó MK

── Hachi.. ¿Te encuentras bien? ── El castaño puso su mano sobre el hombro del chico quien asintió.

── Estoy bien, es solo que no eh tenido contacto con casi nadie durante mucho tiempo y no estoy acostumbrado a que me griten ── Trago en seco mientras miraba a los demás

── ¿Cuanto exactamente Bee boy? ── Mei le pregunto, ¿le acababa de decir chico abeja?

── más o menos hace unos 12 años desde la muerte de Nana.. ── Trago en seco mientras contenía las lágrimas, hace mucho no la mencionaba y hacerlo le traía malos recuerdos.

Muy malos recuerdos.

El abejorro estaba entrenado (o intentando entrenar) con la lanza que alguna vez fue de su madre, era un día lluvioso y no le importaba mojarse, después de todo, ya no había nadie quien se preocupara por el si se enfermava

── Nana.. ¿Estarías orgullosa de mi en este momento? ── Lanzo la pregunta a la nada, como si esperará que algo o alguien le diera una respuesta. El niño soltó unas lágrimas mientras agarraba su guitarra echa a mano y la ponía en su espalda gracias a la Correa que tenía manteniéndose en su lugar.

Agarro la lanza y con cuidado se fue a la cueva donde aún vivía pasando por el árbol de cerezos donde estaba una tumba improvisada con la bufanda de su difunta "madre" amarrada a esta misma tumba.

── Espero volverte a ver pronto Nana, y te prometo que en el tiempo en el que aún este aquí me convertire en el mejor guardián abeja que nunca allas conocido ──

Palabras; 645