La navidad llego antes de lo pensado y Lili junto con James disfrazaron a sus adorables hijos de renos como un guiño a la forma animaga de su padre y los dejaron cerca de los adornos los cuales babeaban mientras sus padres no veían.
Esa fue la primera navidad de los mellizos Potter, ambos recibieron regalos de sus padrinos, amigos cercanos y familiares, abrieron sus primeros regalos bajo el árbol mientras Lili les tomaba fotos y James no paraba de verlos con una sonrisa, Henry recibió varios libros y jugos interactivos por parte de su padrino, una chaqueta de cuero de su tío sirius, un peluche de león por parte de Peter Pettigrew un amigo de su padre al que usualmente no ve(y que no le agrada particularmente por lo sucio que es, muy parecido a una rata) varitas de juguete por parte de frank longbottom, un kit de pociones para bebes por parte de Alice longbottom, un arco y flecha de juguete por parte de su madrina Marlene, un collar que fue de su abuelo por parte de su padre y un lindo suéter hecho a mano por parte de su madre.
Una vez abiertos los regalos la nueva familia Potter desayuno unida mientras que james alimentaba a Henry y Lili a Harry, ambos hermanos estaban felices y satisfechos.
Por la tarde llegaron los amigos de su padre y sus padrinos Remus Lupin y Sirius black quienes inmediatamente tomaron a sus respectivos ahijados y empezaron a jugar con ambos bebes, cantaron canciones, tomaron más fotos y pasaron el día como una familia feliz.
-Harry mira... una snitch- le mostro una Snitch Dorada de peluche Sirius a su ahijado quien reía viéndola volar intentando tomarla.
-mezcle la poción a fuego lento en sentido anti horario durante 10 minutos-leyó Remus mostrándole a Henry la foto de referencia que había en el libro de pociones para principiantes que le estaba leyendo, Sirius voltea o verlo con una mueca.
-¿qué haces lunático?- pregunto con el ceño fruncido.
-leerle a Henry- respondió extrañado.
-lo vas a matar de aburrimiento-dijo espantado y tratando de tomar al pequeño Henry del regazo de su padrino.
-Claro que no, solo le estoy enseñando algo que le va a servir cuando entre en Hogwarts
-aún es muy pequeño, ¿Por qué no mejor apostamos quien va más rápido en su escoba?- propuso Sirius- seguro que mi Harry le gana- añadió con un aire socarrón y una sonrisa de burla.
-por supuesto que mi Henry podría ganar muy fácil si quisiera-aseguro Remus con aparente orgullo.
-¿Por qué no lo probamos?
Ambos se dirigieron hacia el jardín cargando con ambos mellizos que no dejaban de reír y babear a sus respectivos padrinos, cada una subió a su bebe a la escoba y Sirius trazo dos líneas en el jardín como la línea de llegada y salida.
-escúchame Henry, debemos mostrarles que el intelecto es superior a la fuerza bruta ¿de acuerdo?- le dijo Remus al niño con ojos determinados mientras que Henry lo veía confundido sin terminar de entender lo que él decía.
Los colocaron en la línea de salida y dieron la señal para empezar ambos bebes se lanzaron a bolar pero en medio del camino Harry se desvió un poco y choco su cabeza con la de Henry logrando que ambos cayeran al suelo y rompieran a llorar.
Inmediatamente una Lili enfurecida apareció detrás de ellos.
-¿Qué se supone que hacen con mis hijos?-pregunto con voz fría y colérica.
-bu..bueno Li..Lili veras nosotros so..solo estábamos-empezó sirius aterrado
-¿sí?-prosiguió Lili furiosa
-solo era una pequeña carrera querida Lili- respondió Remus tratando de sonar calmado para no alertar más a la madre leona que tenía delante, pero su voz fue opacada por los llantos de Harry y Henry, Lili se acercó para tomar a sus hijos y llevarles adentro pero antes de irse volteo un momento y dijo con voz de ultratumba
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Henry Potter y la piedra filosofal
Fantasy¿Qué pensarías si un día te dijeran que eres famoso? Bueno, ese es el caso de Henry Potter, solo que el pequeño Henry no es famoso por coincidencia o por que el así lo quisiera. Henry y su Hermano mayor Harry se volvieron leyendas de la noche a la m...