Henry Potter y la piedra filosofal

CAPITULO 4

25 de septiembre, Las semanas habían pasado ya un nuevo semestre iniciaba en Hogwarts el antiguo colegio de la pareja Potter el mismo al que ambos gemelos Potter asistirían cuando tuvieran la edad necesaria.

Con el pasar del tiempo la inquietud de los jóvenes padres aumentaba considerablemente, ambos sabían que estaban en medio del juego del gato y el ratón temían que el gato lograra entrar en su hogar y lastimara a sus amados hijos. Quienes, felices en su ignorancia, se hallaban durmiendo plácidamente en brazos de sus padres.

-todo estará bien cariño- aseguro James a Lili- ellos estarán bien- parecía que trataba de convencerse a sí mismo de que así sería.

-eso espero, de verdad que si

Ese día en especial ambos se encontraban de luto pues su amiga y madrina de su hijo Marlene Mckinnon había sido asesinada junto a toda su familia por mortífagos quienes los buscaban a ellos, su amiga quien no tenía hijos ni ningún otro pariente salvo su ahijado Henry le había dejado a este una considerable fortuna con la que incluso los tataranietos de este podrían vivir sin problemas.

Sin embargo tanto uno como el otro encontraban esta herencia una compensación muy pequeña e injusta a cambio de la vida de su querida amiga.

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01 de octubre los mellizos Potter se encontraban en el patio jugando a las carreras con sus escobas de juguete mientras su madre hacia la cena y su padre los vigilaba.

-¡¡vamos chicos pueden hacerlo mejor!!- alentaba James a sus hijos

Henry iba junto a su hermano tratando de rebasarlo, ambos eran rápidos para ser tan pequeños su padre estaba extasiado por el talento de ambos en el deporte que tanto admiraba. Al terminar la segunda vuelto e ir a la mitad de la tercera y ultima Harry logro tomar la delantera luego de que su hermano se distrajera al ver su scarbato de juguete y termino ganando la carrera.

-¡¡Así se hace Harry!! ¡¡Excelente Henry!!- felicito James a sus hijos mientras los tomaba en brazos y les daba vueltas ocasionando la risa de los pequeños- pero Harry te inclinas demasiado hacia el frente y Henry demasiado al costado izquierdo, ¡¡no se preocupen hijos míos yo les enseñare todo lo que se!!- dijo haciéndose el héroe, los hermanos que aún no entendían del todo a su padre festejaron y aplaudieron siguiendo la emoción de su padre.

-papa- empezó Henry mirándolo, james volteo para prestarle toda la atención posible- cabato- continuo su balbuceo.

-una vez que terminemos de entrenar podrás jugar con tu scarbato mi lindo cervatillo- aseguró- ahora monten sus escobas.

Ambos mellizos obedecieron

-muy bien Harry sube un poco más el pecho no es necesario que te acerques tanto a la escoba, eso es. ahora junta un poco más las piernas así será más fácil controlar la escoba, mucho mejor- instruyo James- ahora Henry inclina el cuerpo un poco más hacia la derecha, exacto, debes sostener firme la escoba para no caer hijo, perfecto chicos- felicito su padre- ahora inténtenlo de nuevo.

Y así los pequeños empezaron otra carrera ambos sintiendo mayor confianza sobre la escoba, como la vez anterior Harry tomo rápidamente la delantera mientras Henry lo seguía de cerca pero no hacia intentos de rebasarlo, en la segunda vuelta Harry lidero la carrera al inicio hasta que al estar cerca de la línea para continuar con la tercera y ganar, su hermano Henry, repentinamente tomo la delantera a toda velocidad hasta llegar primero a la meta.

-eso fue muy astuto de tu parte Henry ¡¡bien Hecho!!-lo felicito su padre- Harry no debes confiarte por empezar bien una carrera, debes esforzarte siempre para poder llegar primero- explico a su pequeño hijo.