👑 Capítulo 8👑

1K 218 16
                                    


"No voy a irme"


Tres años antes

Vivir en un lugar desconocido y con muchas reglas no es la vida que quería llevar a los diesiciete, pero es la vida que me hizo elegir mi padre y sus intentos de asesinarme. Isaac Wesh estaba fuera de control y no sé en qué punto decidió descargar su ira en contra de su familia. Mi hermano no tuvo más opción que pedirle ayuda al que había sido su mejor amigo desde la infancia, el príncipe Jared.

Llevo dos semanas viviendo en su palacio, durmiendo en la habitación continua a la suya y lo he visto solo tres veces. No es un chico que hable mucho —no me ha dirigido la palabra—. Es algo así como un zombie que se pasea por los pasillos de este enorme palacio acompañado de guardias de seguridad. Una de las sirvientas me contó que en las mañanas va a la escuela para príncipes dónde también estudia mi hermano y que son pocas las noches que viene a dormir aquí.

Mientras ojeo uno de los libros que tomé prestado de la biblioteca, las lágrimas caen por mis ojos. En este libro la protagonista tiene una relación tan hermosa con su padre que siento envidia, porque diera lo que no tengo por tener un padre así. Pedí tantas veces que Isaac entrace en razón y buscara ayuda para controlar sus problemas, pero mis esperanzas fueron destruidas de la peor forma cuando me engañó y terminé con una pistola en la cien.

Ciento algunas voces en el pasillo y salto de la cama. Mi hermano lleva varios días sin venir a verme y estoy al punto de volverme loca entre tanto silencio. Pero cuando abro la puerta, no es Kylliam, es el príncipe Jared el que está frente a mi.

—Majestad —hago una reverencia, él se mantiene quieto como una estatua sin expresión alguna—. Perdone, creí que mi hermano vendría a visitarme.

Solo asiente y acto seguido se encierra en su habitación.

—Buenas noches Kayla, tu hermano vendrá a visitarte pronto, que duermas bien —me respondo a mi misma con molestia y regreso a mi cautiverio en las paredes de la oscura habitación.

Me acomodo entre las calientes sábanas y mientras me imagino otra vida en dónde tengo una familia feliz caigo sumida en un profundo sueño.

—¡Noooooo! —un grito desgarrador hace que me despierte de golpe con la respiración agitada.

La luz de la luna que entra por la ventana ilumina toda la habitación, no hay nadie dentro. Me recuerdo a mi misma que estoy en el palacio de Nardinkath y entonces otro grito se escucha. Es el príncipe. Ni siquiera lo pienso cuando me lanzo de la cama descalza y salgo de la habitación hasta su puerta, dentro se escuchan sus gritos desoladores que logran que mi corazón se aflija. Abro la puerta y siento alivio al ver que no tiene llave. La habitación es iluminada por una pequeña lámpara de noche y busco con mi mirada al príncipe. La cama está perfectamente hecha y cuando miro hacia la ventana lo encuentro tirado en el suelo abrazando su cuerpo.

—Majestad —me acerco con cuidado-. Perdón por entrar así. ¿Necesita ayuda?

No me responde, se mantiene así soltando pequeños quejidos de dolor y con la mirada fija en la gran alfombra. Sigo dando pasos acercándome a él.

—Príncipe...

No termino de pronunciar su nombre porque al instante se levanta y sus manos aprietan mis hombros con fuerza. Me remuevo para intentar que me suelte pero no lo logro. Sus ojos grises llenos de lágrimas y oscuridad me miran con miedo.

—¡¿Qué haces aquí?! —me grita—. ¡Esta habitación es prohibida, márchate!

—¿Se encuentra bien? —el dolor que veo en su mirada me desgarra el alma.

¿Qué le causa tanta tristeza? ¿Qué te atormenta, príncipe Jared?

—¡Lárgate, Kayla! —escucharlo decir mi nombre se siente extraño. Me suelta y se aleja de mi, pero no me marcho, camino detrás suyo.

¿Cómo puedo ser capaz de dejarlo en este estado?

—¿Necesita ayuda?

—¡Joder que te largues! —vuelve a gritar llevándose las manos a la cabeza y sentándose en la cama mientras las lágrimas descienden por sus ojos.

—Jared —digo su nombre con nervios y él me mira—. No voy a irme, no pienso dejarte así, no después de todo lo que has hecho por mi.

—Ha sido por tu hermano —me corrige con molestia.

—De igual forma, estoy agradecida. No tienes que contarme que provoca que estés así, ni siquiera tienes que hablar, yo hablo por los dos. ¿Te parece?

No me responde y me lo tomo como un sí. Me acerco a la cama donde me siento y el se deja caer en ella con su traje y zapatos puestos, mirando al techo mientras las lágrimas ruedan por sus mejillas.

—Me gusta bailar —le confieso—. Nadie lo sabe aún, ni siquiera Kylliam, es tan protector que temo que no me deje bailar por miedo a que me lastime un tobillo.

Me río sola y él se mantiene quieto, pero no me pide que me marche.

—He estado practicando en la habitación con algunos vídeos desde el celular y es increíble, la sensación de libertad, cuando bailo...—tomo una profunda respiración—, me siento tan poderosa que creo que Isaac nunca podrá dañarme.

Me tomo el atrevimiento de recostarme en la cama a su lado y observar el tejado. La respiración de Jared está más calmada y sonrió triunfante.

—Mi madre de pequeña me contaba la historia de una estrella, no recuerdo su nombre. Pero pasó por tantas cosas, la maltraton, engañaron y rompieron. Cuando creyó que no podía más y cerró sus ojos, encontró todo un cementerio con sus piezas rotas y usó la poca fuerza que le quedaba para recolectarlas una a una y volver a reconstruirse. Sus piezas habían cambiado, luego de tantos golpes, ya no eran las mismas, pero aún así la estrella volvió a brillar aún más.

Cuando llevo mi mirada a Jared sus ojos están cerrados y permanece totalmente tranquilo. Me levanto despacio y regreso a mi habitación y sueño con unos ojos grises agradeciéndome por haber espantado la oscuridad.

Espero que seas como esa estrella príncipe de Nardinkath, sé que aunque hoy estoy estés roto, algún día brillarás con más intensidad.













Hola amores
¿Cuál es su color favorito?
El mío es el púrpura💜

Espero que se encuentren bien y felices.

Paso por aquí a dejarles este capítulo.

Hay algo que quiero aclarar, creo que ya lo dije pero en esta historia daremos varias vueltas hacia el pasado. Este capítulo se desarrolla durante los primeros días de Eva en la escuela.

En la actualidad han pasado 3 años desde que Eva llegó a Nardinkath. Ella y Kylliam tuvieron que esperar dos años para casarse y luego un año más en el que Kayla estuvo internada en la desintoxicación. Les explico por si tenían alguna duda. De todos modos siempre pueden preguntarme en los comentarios.

Eso es todo por hoy, espero les haya gustado.

Les recuerdo que tengo mi primer libro DAX Juegos Perversos disponible y totalmente completo en mi perfil. Vayan a darle amor al monstruo de Wildwood, no queremos que esté de mal humor.

Un abrazo virtual. Os amo!!!!

Antes Muerta Que Tuya [Antes Muerta #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora