Esto recién empieza.

Capítulo 14

Ya era de mañana cuando abrí los ojos. Para mí sorpresa dormí toda la noche, sin sueños, pesadillas.
Mire a mi alrededor y, cómo siempre, Jake ya se había levantado.  Fui a buscarlo, él estaba en la sala, había empacado sus monitores y ordenador.

--Buenos días dijo cuando noto mi presencia. Cómo no dije nada el prosiguió.

--Pienso que lo mejor es estar preparados. Por cualquier cosa. Meteré esto en el automóvil, y podríamos hacer maletas con algo de ropa y cosas importantes. Se lo notaba preocupado.

--Armare nuestras maletas no te preocupado. ¿Pero desayunaste? Necesitaras comer algo, no sabemos cuándo podremos tener tiempo para ver a hacerlo.

Me dirigí a preparar el desayuno.

--Ven Jake.

Rápido se sentó enfrente mío.

--Hannah y Alan vendrán en un rato, están preparados como nosotros.

--Entiendo. Tendrás que decirme más sobre el plan.

--Eso mismo pensaba hacer. Mira, Alan y yo saldremos en el vehículo de él, nos reuniremos con este agente en la cafetería donde nos conocimos.

Tan lindos recuerdos tenía de ese día, que mi cara se sonrojo un poco.

--Y con Hannah que haremos?

--Ustedes estarán aquí en la casa, preparadas para salir. Pero Amor, no te pongas en riesgo. Si no sabes de nosotros en un tiempo. Hannah y tú váyanse del pueblo.

--Oh no, no me iré sin ti.

--Siempre encontraré la forma de volver a ti.

Jake me tomo la mano con fuerza. Sus palabras reflejaban más el deseo que la certidumbre.
Terminamos de desayunar, limpie la cocina, pensando que quizás era la última vez que estaría ahí. Fue lindo mientras duró.

Minutos después llegaron Hannah y Alan. Alan rápidamente se entretuvo hablando con Jake sobre lo que harían. Pero yo tenía que hablar con Hannah.

--Hannah me ayudas a empacar unas cosas. Le hice una seña y ambas subimos las escaleras.

--Que sucede MC?

--Te dijo Alan? ¿Que quieren que nos quedemos acá sentadas?

--Si, es una locura. Pero Alan no me dijo dónde es la dichosa cafetería.

--Excelente, yo si se.

--Y yo, conozco la cara del agente, sin querer espié una videollamada que tuvo con Alan.

--Entonces. Podríamos ir detrás de ellos, por si necesitan algo.

--Exacto. Bajemos antes que sospechen.

Bajamos con las maletas y Alan las coloco en el automóvil.
Un rato después, tuvieron que salir. Fue el momento más triste de mi vida, sentí que el corazón se me rompió en pedazos cuando lo vi a Jake marcharse. El miedo me corría por las venas.

Esperamos unos 10 minutos y salimos nosotras también. Íbamos en silencio, cada una con su preocupación, con su angustia.

Estacione en la esquina, a una distancia cómoda, dónde podíamos ver la entrada a la cafetería. Los minutos pasaban, largos y lentos. Cuando vemos salir a Jake y Alan, con dos hombres robustos y altos. Eran enormes y estaban vestidos con camisas claras abiertas, la imagen de ellos dos era grotesca. E iban muy pegados a Jake y Alan.

--No se tu, pero para mí esos dos no tienen pinta de agentes del gobierno.

--Para nada MC. El hombre que hablaba con Alan era pulcro. Esto no está bien. Algo salió mal.

--Oh por dios. Hannah, hay que hacer algo. Están subiendo a un auto.

--Espera, no podemos ir ahora. Vamos a seguirlos.

Empezamos a manejar detrás del automóvil que los transportaba. No fuimos muy lejos, pararon en un edificio que parece que fuese un antro o bar de mala muerte. Mi corazón no entraba en mi pecho. Debíamos hacer algo rápido.

--Hannah, hay que volver a la cafetería y encontrar al agente.

--Pero no podemos dejarlos aquí.

--Nada podemos hacer dos mujeres solas. Volveremos por ellos con ayuda.

Hannah asentó con la cabeza, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas. Pero yo no tenía tiempo de llorar y lamentarme. Debía ayudar al hombre que amo.

Conduje hasta la cafetería como un autómata, tratando de no olvidar detalle de los hombres, del automóvil y del lugar. Todo era importante.

Al llegar, Hannah bajo corriendo del coche, y entro en la cafetería. Ella sabía a quién buscar. Tuve que correr para seguirle el paso. Veo que se acerca a una mesa.

--Soy Hannah, la pareja del comisario Alan Bloomgate. Mi hermano y él iban a reunirse con usted.

--Se demoran o huyen y mandan a dos hermosas damas a distraerme. Genial. Perderé mi trabajo.

El hombre mascullaba para si mismo.

--Ellos han sido secuestrados, hace pocos minutos cuando iban a encontrarse con usted. No tenemos tiempo. Ayúdenos por favor. Mi voz era un susurró y las lágrimas luchaban por seguir su camino.

--Y debo creerles?

--Por favor. Si le mentimos, pongamos en prisión, pero ayúdenos.

Debo reconocer que Hannah tenía una cara que cualquier persona la ayudaría. Era linda, y si preocupación hacia que la gente empatice con ella. Bueno, así fue como la conocí, ella en problemas, y no pude decir que no a encontrarla.

--Bueno señoritas. Salgamos.

Nos dirigimos al exterior. El hombre hizo señas a otros, serían subordinados.

--Nos seguirán. Prepárense. Tendremos quizás un enfrentamiento. Yo iré en el coche con ellas. 

Conduje a toda velocidad esperando que al llegar estén todavía ahí. Desde afuera se veía el lugar igual y el vehículo que esos hombres horrendos manejaban.

--Es ahí. Ahí los llevaron. Por favor señor, disculpe no se su nombre.

--Puede decirme Mike, señorita MC.

--De acuerdo. Mike, ayúdelos por favor. Estaba por preguntar cómo sabía él mi nombre. Pero mis palabras fueron detenidas cuando dió órdenes a los presentes.

---Quédense aquí. Y por nada en el mundo entren. Dejaré uno de mis hombres para que las cuide. No se preocupen. Esto se resolverá.

Mike, el agente, y un grupo de 4 personas que lo acompañan, buscaron la forma de entrar. Los minutos pasaban, Hannah y yo no dijimos nada en todo ese tiempo. El hombre que nos cuidaba, estaba poniéndose ansioso. Los minutos parecían eternos. Cuando escuchamos gritos, y disparos.

Vemos salir corriendo a uno de los hombres de Mike, que dice a quien quedó con nosotras.

--Rapido, Carl. Llama una ambulancia de las nuestras. No a la policía local o emergencias locales. Sigue el protocolo nuestro.

Hannah y yo salimos del coche al mismo tiempo. Dispuestas a correr hacia el edificio.
Cuando vemos salir varios hombres. Un subordinado de Mike, ayudaba a salir a Alan, parecía herido en un hombro. Luego el resto salieron todos juntos. No sabía si Jake estaba entre ellos o si estaba herido. Mi mundo se detuvo cuando pude verlo.