Hijo de...Conejo (Jack Frost x Male Reader).

Death

Mis ojos se deleitaban con la blanquecina nieve, pero mi vista ignoraba aquella situación, ya que trataba de asimilar lo que mi opuesto me había dicho.

-¿Aquí moriste...?-Sentencié.

-¡No lo digas así!, aquí renací-Me miró con una sonrisa-En este lugar, en invierno, mientras jugaba...por eso este es mi centro, y te traje aquí por que querría...preguntarte algo-El chico elevó la mirada, encontrándose con la mía.

-¿Y de que se trata?-Me senté sobre el frío manto de nieve que cubría el suelo-¿alguna pregunta ñoña?-Me burlé.

-Nada de eso...es algo más...personal, ¿Puedo?-Asentí, a lo cual el se sentó a mi lado, mientras mirábamos el lago.

Un cómodo silencio hizo estancia en el lugar, por lo cual entendí que el estaba buscando las palabras indicadas para preguntar, o eso quiero esperar.

-¿Como supiste que tu centro era el amor?-Jack me miró, podía ver su curiosidad reflejada en sus ojos-Digo...siempre dices que estuviste solo, y que...de no ser por Mito...serías compañero de Peach-Se excusó.

La verdad...no es algo que se pudiera decir, ya que ni yo lo entendía, solamente...me di cuenta que las cosas siempre tenían un respaldo, el cual era el amor.

-Así como todos tienen su centro, un centro que conecta unos con otros, ya sea sueños, esperanzas, asombro, diversión o luz...todos estaban conectados, entonces en su momento entré en la duda...-Intenté excusar-¿Que los conecta?-Miré a Jack de reojo, quien escuchaba atento.

-Pues...el amor-Respondió, más que como duda que como respuesta.

-Exacto, y cada vez que yo faltaba...el amor faltaba, así que me fui dando cuenta que era yo quien los conectaba entre sí, era yo quien hacía que el ambiente fuera familiar...-Me abracé las piernas-Hasta que Conejo me obligó a matar el niño...ahí fue cuando el amor que había en mi desapareció, y ellos quebraron sus lazos...luego llegaste tu y los uniste un poco...-Suspiré.

-¿Osea que ya no hay amor ahora?-Ladeo su cabeza.

-Si lo hay...volvió cuando te...-Me di cuenta de lo que iba a decir, comenzando a sonrojarme y alejarme inmediatamente de él-Cuando...c-cuando vi a mi papá claro, amor familiar, wuju...-Expresé falsa felicidad.

-¡Ibas a decir otra cosa antes de eso!-Me acorraló contra el suelo, haciendo mi sonrojo más grande.

-¿En serio?, na, no lo creo-Intenté salirme.

-No mientas-Frunció el seño y sus labios, como adoro cuando hace ese gesto-Vamos Yue...no puedes mentir ahora-Se acercó a mi, envolviendome en sus firmes brazos, formando un abrazo.

Sentí que mi rostro explotaria en cuanto Jack hundió su cabeza en mi pecho, no tenía mucho peor alcanzaba para que pudiera ubicarse ahí....¿En que estoy pensando ahora?

-Vamos Yue, por favor...quiero escuchar lo que me ibas a decir...se que la aparición de tu padre te ha ayudado mucho, pero también se que no es lo único que te mantiene feliz...quiero escucharlo salir de tus labios-Lo envolvi entre mis alas, haciendo que este dirigiera su mirada hacia mí.

-Lo siento Jack, no puedo decirte-Dirigí mi mirada hacia el, viendo como fruncía su seño.

-Esta bien...pero prometeme que me lo contarás tarde o temprano-Sostuvo su mirada en la mía, sus labios formaron una sonrisa, obligandome a ceder.

-Esta bien Jack, lo prometo, pero no será ahora-Le acaricié sus albinos cabellos, eran más suaves que el pelaje de un gato.

-Esta bien...-Acomodó su cuerpo sobre el mío, el frío tacto que mi espalda recibía por parte del suelo, se hacía omiso gracias a la situación.

Cada vez que estoy con Jack me siento de esta forma...siento que todo lo demás se desvanece, no importa lo importante que sea, lo helado que esté el viento, todo se vuelve una minoría.

El solo hecho de ver aquella sonrisa llena de vida, me hacía querer visualizarla por siempre, y que solo fuéramos el y yo, el y yo en un mundo donde no existe nada más...donde solo existieramos nosotros, nosotros y unos hermosos prados que apreciar con el.

Su cuerpo es pesado, pero se me hace liviano, su tacto es frío, pero se vuelve cálido...¿Como podría alejarme de el?, ni siquiera quiero soltarlo, ¿como podría entrenar si el esta ahí?, viéndome.

-Yue...tu corazón late con fuerza-¿A que se refería con eso?-¿es por el frío?-.

-No lo creo...solo...quedémonos así otro rato, o me dará frío de verdad-Reí por lo bajo, haciendo que Jack cediera a mi propuesta, al parecer el también estaba cómodo.

-Tu cuerpo es cálido...me recuerdas a Norte y la fogata que hace cada Navidad-Se hechó a reír, esa carcajada era música para mis oídos, y era muy pegajosa.

-Tal vez porque soy su nieto, oye Jack, ¿crees que me parezco a conejo?-Lo observé.

-Cuando estas enojado, tu arrogancia y orgullo, todo eso se parece a conejo, también que cuando te enojas mueves la nariz, pero...esos pequeños detalles estando en conejo...me parecen asquerosos y repugnantes-Ouch-Pero en ti...es tan único y lindo, no sabría como expresarlo...¡Es como el día nevado más grande!-.

Los dos hechamos una carcajada, luego quedamos en un cómodo silencio.

El manto de la noche se posaba sobre nosotros, y en el cielo se encontraba una cubierta de estrellas, cientos de ellas, tantas que no puedes contar.

-La noche está muy linda...-Dije mientras miraba el cielo, dirigiendo mi mirada hacia la grna luna que se posaba en el cielo-A veces pienso que cuando muera reencarnare en una de esas estrellas...y que todo aquel que me vea, sentirá una paz enorme emanar del cielo-Dirigí mi mirada a Jack.

-Si eso pasa yo seré la estrella que esté a tu lado, y formaremos una nueva constelación, la más bella de todas...porque estarás tu-¿Me esta coqueteando?

-¿Jack?-Ladee mi cabeza.

-...Tal vez tu aun no estés listo para decirlo, pero yo si lo estoy...Yue...-Frunció los labios, preparándose para escupir alguna frase estúpida, o eso creo-Yo te amo Yue-...pues vaya que lo era-¿¡yue!?-.

Sentí mi cabeza dar vueltas, y luego solo pude ver un oscuro manto caer sobre mis ojos, escuchando los gritos preocupados de...

Mi apreciado Jack Frost.