Hijo de...Conejo (Jack Frost x Male Reader).

Asimilar Las Cosas Cuesta.

Ahora que se que tengo dos padres, que fueron capaces de procrear siendo dos hombres...estoy medio impactado.

Quisiera haberlo visto, haber visto a mi segundo padre...no sería malo.

-Yue, ¿todo bien?-

-Si...estoy, estoy bien-

-No tienes cara de estarlo-

-Ya lo sé...estoy confundido-

-Comprendo-

Mire a Jack-¿Como crees que era mi otro padre?-

-Probablemente era muy lindo, porque conejo es bien feo para que tu salgas así...-

-¿Así como?-

-Así de lindo-

-...Gracias por el cumplido, ¿crees que haya tenido mi personalidad?-

-No lo sé...quiza era más suave en cuanto a...bueno, Personalidad-

-Ojalá vuelva algún día-

-Espero que vuelva, así tu estarás más alegre, ¿no?-

-Eso creo-

-Algo pasa...dime-

-No puedo, no tengo las palabras para decirlo-

-Se que hay algo, solo...expresa lo que sientes-

-Bien...creo que mi otro padre nunca volverá, y tengo miedo de que si vuelve...se decepcione de mi...-

-Sabes que creo?, creo que tu padre va a venir, te verá y dirá...que hijo más guapo me ha salido por el culo-

-Jack!-Dije entre risas.

-Ese es nuestro Yue-

-Supongo...¿Crees que todo salga bien si el vuelve?-

-Todo va a ir perfecto, te lo prometo...-

-No puedes prometer algo que no puedes asegurar-Me levanté y suspiré con cansansio.

-Sabias palabras, ¿te lo dijo el conejo?-

-No, lo aprendí yo solo-

-Eres muy intelectual, me gusta, yo también tengo un par de frases épicas-

-Dime una-

-Am...es que no es el momento-

-Mentiroso, no sabes ninguna-

-Te digo que si se, solo que no es el mejor momento para decirlas, son muy épicas, de verdad-

-Wow, que gran imaginación niño hielo-

-¿Niño hielo?-

-Se-Salté hacia un árbol cerca-Tu puedes congelar cosas, mientras que yo...puedo almacenar-

El árbol se volvió pequeño y lo tomé con las manos-Algunas cosas siempre se mantienen pequeñas...y crecen por alguien, ahí tienes otra frase, de Yue el rey del mundo flotante-

-Algún día inventare una frase, y la diré tan bien que te dejará con la boca abierta-

Reí por lo bajo-Acabas de admitir que no sabes ninguna-

-¡Mentira!-

-Verdad-

-...Mentira-Me tiró una bola de nieve.

-¡Oye!-Dije entre risas-¡Ven acá!-Me lancé sobre el, comenzamos a "pelear", yo recibía patadas, el recibía patadas.

-Gané-Dijo Jack al dejarme contra el suelo.

-Esta bien...-Admiré su rostro, tenía un rostro tan simétrico y perfecto...algo muy apreciado en geometría.

-¿que pasa?-Dijo mi opuesto, mostrando sus dientes blancos, y perfecto, ahora que lo estoy mirando mejor, sus labios se ven más rosados que el resto de su rostro...-Yue-

-Ah...¡Ah!, sale de encima-

-Ya voy, ya voy-El de ojos claros se salió de encima mía.

-Gracias-Me levanté-Debería hablar con conejo...-

-Si eso deseas, adelante-

-Gracias por intentar subirme el ánimo-

-No es nada, ah y...cuando hables con conejo, intenta no hacerlo enojar-

-Eso haré-

En silencio, me retiré, me dirigí a donde siempre se encontraba el conejo de pascua, lo encontré en un estado no muy oportuno.

Se veía decaído y desolado, pero poco me importaba realmente, me acerqué e intente iniciar una conversación, pero un silencio yacía en mis labios cuando vi a quien le lloraba el ya nombrado.

-Volviste después de tanto....-

-¿Conejo...?-

Un sobresalto fue emitido en el cuerpo del conejo, se dio la vuelta para mirarme y en su rostro se perdían un centenar de emociones.

Sus ojos lilas me transmitían un revoltijo de sentimientos, nuevas sensaciones, y quien yacía detrás de él, se escondía bajo un frío manto negro.

-Yue...-Del extraño salieron palabras, palabras que no habría podido percibir tan bien como otras veces, dirigí mi mirada hacia el ageno y le tomé más importancia.

El ageno se quitó la capa y dejó ver su rostro, era albino, puramente blanco como la nieve, su cabello era largo, pero lo más importante...tenía esa mirada, aquella mirada que apenas podía recordar.

Esa mirada que sólo me transmitía tranquilidad, aunque las saladas lágrimas estuvieran apunto de emanar de mis ojos, la comisura de mis labios comenzó a temblar y mi vista se aguaba con rapidez.

No sabía quién, o que era, pero en mi crecía nostalgia, un sentimiento que yacía encerrado en un cofre, que ahora salía a la luz, y me recordaba a aquellos años, años donde tenía a mis dos padres.

(Flashback).

-¡Yohan!, no logro que se calme...no para de llorar-

-¿Como te va a costar tanto?, ven acá...-El albino, de hermosos ojos rojos carmesí tomó al bebé en brazos-Hola chiquito...aquí está papi...-Su mirada era tan calmada, que el sentimiento se transmitía al bebé, haciéndolo dejar de llorar.

-Hay algo en ti que en mi no-

-Eso es obvio, Conejo-Rodó los ojos el albino-Yo si le intento transmitir mi calma, tu solo te exasperas con el-

-Lo siento...no se como le haces, y por mas que lo intento no puedo-

-Nunca digas no puedo, porque puedes, pero te cuesta-

(Fin del Flashback)

-Yue...soy yo-El ageno se acerca a mi cada vez más, invadía mi espacio, algo que normalmente no hubiera tolerado, pero en esta ocasión se sentía distinto-Soy papá, Yohan-.

Mis ojos ya no pudieron soportar más, las saladas lágrimas invadían mis cuencas y se sobresalían, viajando a lo largo de mi rostro, los gentiles brazos de mi padre me rodearon, los dos estábamos llorando en sintonia, sin contar el leve llanto que se escuchaba de conejo-¿En serio eres tu?...-Lo miré con incredulidad, tantos años, tantos recuerdos borrados, ¿y aparecía como si nada?, ¿para volver a mi vida tan de repente?.

-Si Yue, soy yo, soy papá-Su rostro se veía alegre, incluso cuando las lágrimas recorrían sus mejillas, incluso cuando su entrecejo se torcia hacia arriba, aún así, había una sonrisa en su rostro, y jadeos salían de su boca, jadeos de alegría, una alegría demasiado contagiosa.

Correspondí el abrazo, rogándole a mis adentros que todo esto, de verdad estuviese pasando.