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Cuatro años atrás.

Me desperté para ir al baño. Bebi mucha agua antes de dormir.

Mi pie tipo el suelo. Esta muy frio camine hacia el pasillo y prendí la luz. Mire el suelo había sangre.

¿Sangre?

¿Por qué diablos hay sangre en el baño?

Abro la puerta y me quede en shok. Era mi hermana estaba en un charco de su propia sangre  en su otra mano tenia una cuchilla. Se corto las venas y la sangre no deja de salir no sabia que hacer ¿decirle a Alex? ¿decirle a mi madre? Me fui corriendo a la habitación de Alex.

-Alex- lo llame.

-Que Liah.

-Alice esta muerta.

-¿Que?

-Se mato Alex.

Alex se para de cama y lo seguí, los dos caminamos hacia el baño nos quedamos ahí parado sin nada que hacer.

-Hay que decirle mama.

-Llego ebria.

Mierda.

Escuche unos pasos y mire hacia atrás. Le di un pequeño golpe a Alex para que mirara igual.

Era mamá.

-¿Que hacen?

-Alice esta muerta- le dije

-¿Qué?

Mamá nos empujo y entro al baño y se puso de rodilla ante Alicia y puso sus dedos en el cuello. No lo hice antes por que ya perdió mucha sangre. El piso estaba completamente lleno de sangre.

-Voy a llamar a los paramédicos.

Media hora después los paramédicos llegaron se llevaron a Alice mama se fue con ellos. Alex se quedo conmigo.

Fuimos al sofá y Alex cogió el control de la televisión y la prendió nos pusimos a ver una película.

Me quede pensando en Alice éramos tan unidas una pequeña lagrima salió de mi puse mi cabeza en el hombro de Alex y me quede dormida.

Abro los ojos y el sol me pega justamente en mis ojos. Me pare del sofá y fui directamente a la cocina a hacer un café.

Me quede pensando en todo lo que paso y en mi hermana muerta.

Me eche a llorar no podía soportar mas mi vida están mierda.

-Liah- dijo en voz suave.

Camino hacia mi y me abrozo, me asuste cuando mamá estallo la puerta.

-Todo es tu culpa Liah-me dijo.

-Por tu culpa tu hermana se mato, antes de que se matara ustedes discutieron, la tratabas mal, siempre le hablas de mal forma.

-¿Yo la trataba mal?,¿ yo le habla de mal forma?, era ella mi me habla como a una cualquiera, me ofendía, criticaba cada parte de mi.

- Te lo mereces.

-Te odio.

Cori a mi habitación.

-No debiste decirle eso mamá- le dijo Alex.

Pase mi mano por mi caballo caminaba de lado a lodo estaba desesperada no dejaba de llorar. Busque en mi cajón la cuchilla la pase lentamente por mi muñeca una y otra vez.

Me lastimaba tanto, pero se sentía tan bien.

Y me calme.

Me fui a mi cama y me quede mirando al techo. Aun lloraba.

Desde ese día mi vida cambio.

Isabella D.

La Historia De LiahDonde viven las historias. Descúbrelo ahora