Narra Bill:
Me había despertado mas primero que los cuatro, era ovbio.
Estuve mirando el techo por varios minutos. Después de 30 min me vi interrumpido por una paloma pasar por mi ventana. Fue cuando me levante y camine hacia la ventana, al asomarme note la gran vista que tenia.
Abrí mi ventana dejando entrar aire puro a mi habitación, le di un pedazo de pan que me había traído de la cena de ayer.
*largue una leve sonrisa*
Camine hacia el baño, hice mis necesidades y luego me entre a bañar.
Al terminar note mi ojo derecho un poco rojo ya que me había entrado un poco de shampoo, me lo labe nuevamente tratando de que disminuyera el color.
Salí del baño directo a mi valija a buscar algo apropiado para el lugar, y el día, en fin, algo con que me sintiera cómoda.
Al tratar de buscar mi ropa interior note que la que había traído estaba sucia ya que Pumba me la había meado en el avión y que Tom se me se empezó a reír en medio del avión, en plena noche.
Me puse una remera negra, me coloque mi gorro azul sobre mi cabello mojado, envolvi mi parte intima en una toalla y salí de mi habitación para ir a la de Tom a buscar un bóxer de los tanto que el tiene.
Al llegar toque la puerta pero fue en vano por que el hombresito estaba durmiendo.
No lo pensé, entre a su habitación y allí estaba Tom durmiendo boca a bajo sobre la almohada con una sabana que lo envolvía de la cintura para abajo, con todo el pecho descubierto.
Después de ver como dormía, busque su maleta que se encontraba en el baño arriba del inodoro.
La abrí y empecé a buscar uno que me quedara bien y que me guste.
Tom tenia boxers de todo tipo, de cualquier color, hasta encontré uno de sirenas O.o
Claro solo Tom Kaulitz puede usar esos bóxers.
De todos los que vi había uno que me gustaba, uno rojo con bordes azules que envolverían mi cintura.
Sali de aquella habitación pero antes cerré la habitación con un fuerte portazo (cerrar fuerte la puerta) para que ese bello dormilón, despertara.
Entre a mi habitación, me diriji a la ventana y la volví a cerrar.
Luego me coloque el bóxer rojo y encima me puse un jean agujereado.
Después de ponermelo, escuche tocar la puerta.
-quien es?- dije caminando hacia ella.
-soy Georg.
Le abrí la puerta y lo invite a pasar, me ayudó a ordenar la habitación y bajamos a desayunar.
Gustav y Tom seguían durmiendo...
Narra Mirta (mama de Camila):
Escuche sonar la alarma como nunca antes, me levante, entre al baño y hice mis necesidades..
Levante a mi marido, Miguel. Baje a preparar el desayuno.
Luego de preparar el café subí de nuevo para despertar a mis hijas Camila y Julieta.
Después de tocar 5 min la puerta de sus respectivas habitaciones, bajaron.
Al terminar de desayunar, Julieta partió al colegio y Camila volvió a subir a buscar sus libros y su bolso.
Pero antes de que subiera la mande a despertar a Ignacio, su hermano.
