ONE SHOTS: LUMAX

POSITIVE

Max miró a Lucas, con una mirada de auténtico pánico.

- Todo ira bien, pase lo que pase, Max - le dijo él, tomándola de la mano, intentando tranquilizarla.
- Lucas tengo miedo... ¿y si...? ¿Y si...? - a Max le temblaba la voz.
- Va a estar bien, si sale positivo, lo arreglaremos juntos, ¿vale? Por favor tranquilízate... Todo irá bien, estoy contigo...

Lucas abrió los brazos, y sin pensárselo dos veces, Max escondió la cabeza en su pecho, refugiándose en él, respirando profundamente. Él la abrazaba, acariciándole la espalda, apoyando su cabeza en la suya, mientras miraba los test de embarazo que la pelirroja se había hecho, que estaban sobre el mueble del lavabo, posiblemente ya con el resultado visible.

- ¿Los miramos? - preguntó Lucas suavemente.
- No quiero... Cómo esté embarazada, voy a matarte con mis propias manos Lucas Charles Sinclair - este levantó las manos en señal de tregua y se encogió de hombros, con una leve sonrisa nerviosa en el rostro.
- Vale, vale... Pues... ay madre... - suspiró - Acepto el riesgo, supongo.
- Eres un idiota. Tengo mucho miedo, ¿y-y si lo estoy...? No estoy preparada, tengo muchísimo miedo...
- Max, estoy contigo, ¿vale? Vamos a solucionar esto. Si sale positivo, vamos a arreglarlo, juntos - ella asintió, apretando fuerte su mano y tirando de él hasta el lavabo.

Caminaron juntos hasta el mueble de lavabo, y Max puso las manos sobre los test, que estaban boca abajo, dispuesta a cogerlos. Vaciló unos instantes, mirando a Lucas. Este le asintió, con una mirada tranquilizadora. Entonces, ella respiró hondo y levantó los test del lavabo, levantándolos a la altura de sus ojos, y fijando la mirada en ellos.

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Los tres test de embarazo eran positivos. Estaba embarazada. Max apretó los test contra el mueble de la mano y comenzó a llorar desconsoladamente, tapándose la cara con las manos. Lucas miró los test durante unos segundos, con los sollozos de Max de fondo. Esto no parecía real. Su pelirroja estaba embarazada, de una criatura que él había puesto ahí. No parecía real.

- Hey, hey, hey Max... Está bien, está bien... shhhh... - dijo abrazándola - Estamos juntos en esto... Estoy contigo... Todo va a ir bien, todo va a ir bien...
- No puedo estar embarazada Lucas... no puedo... Tengo miedo, no puedo hacer esto... - sollozó Max, escondiendo su cabeza en el pecho de Lucas - Pero por favor no me dejes sola... no quiero ni puedo hacer esto por favor Lucas prométeme que te quedarás conmigo pase lo que pase...
- Oye, escúchame, por favor. Voy a apoyarte hagas lo que hagas. No voy a dejarte. Eso jamás. Óyeme. Jamás. Porque te quiero muchísimo, y lo sabes de sobra. Si no quieres hacer esto, no lo harás ni mucho menos, y yo te voy a apoyar y a estaré agarrándote la mano en todo momento - Lucas agarró su mano y acarició su mejilla con la otra -. Es tu decisión, sola y únicamente tuya.

Max le miró a los ojos. Definitivamente era demasiado afortunada de tener a Lucas a su lado. Él era todo lo que ella necesitaba, y no sabia como había tenido tanta suerte de encontrar justo lo que necesitaba en el pequeño pueblo de Hawkins. Ahora, quince años después de conocerse, después de tantos momentos buenos y malos juntos, se encontraban allí, en el baño de la casa que se habían comprado hacía apenas unos meses, descubriendo un embarazo no deseado.

- No lo sé, no sé lo que quiero hacer... No sé si voy a ser una buena madre... - suspiró, sentándose el el borde de la bañera - Tengo miedo, no sé si estoy lista... Un bebé es mucha responsabilidad Lucas, y no sé si voy a ser capaz de afrontarla... No quiero ser como mis padres, ni como Neil...
- Max, no vas a ser como ellos - dijo Lucas, agachándose frente a ella y sosteniendo su cara entre las manos -. Estoy seguro de que si tenemos al bebé vas a ser una madre estupenda. Ya has demostrado en muchas ocasiones que no eres nada parecida a ellos. No tienes nada que ver con ellos, Max.
- ¿Y si no se cuidarle? Lucas yo quiero tener al bebé... Le quiero... pero me da miedo no ser suficiente... No quiero traerle a este mundo para que tenga una madre pésima como yo sería...
- Hey, ¿por qué dices eso? Estoy seguro de que vas a ser una mamá estupenda, y nuestro bebé será muy afortunado de tenerte - Max sonrió.
- ¿D-de verdad crees eso?
- Claro que lo creo. No puedo esperar a ver a nuestra pequeña familia. La pequeña familia que hemos creado juntos, tú y yo.