04. Naho

53 4 0
                                    

—¡¿Qué demonios le están haciendo a ese bebé?!

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—¡¿Qué demonios le están haciendo a ese bebé?!

Naho y Paimon voltearon a ver a la persona a la que le pertenecía esa voz. Era una chica con ropa bastante cómoda, aunque algo empolvada como si hubiera estado trabajando fuera por un buen rato, por su tono de voz y su rostro se notaba claramente enojada. La viajera y su guía no entendían qué era lo que sucedía. La extraña corrió mirando hacia arriba y extendió sus brazos para atrapar lo que revoloteaba en el cielo. Era un slime dendro al cual la castaña lo había mandado a volar con su tormado de anemo.

—No creo que debas agarrar ese slime —habló Paimon con preocupación.

La chica atrapó al slime una vez que el efecto del tornado se disipó. El pequeño slime dendro tenía lágrimas en los ojos y se encontraba mareado. Por otro lado, Naho y Paimon se sorprendieron al ver que la criatura no reaccionó de manera hostil a ella.

—¡¿Qué tienen en la cabeza para atacar a un pobre ser inocente?!

—¡¿Huh?! Ese slime fue el que nos atacó, son hostiles —dijo Paimon—. Nosotras solo nos defendimos.

—Eso es ridículo. Los slimes no son hostiles. Seguramente pasaron muy cerca de donde estaba enterrado. Ellos solo atacan cuando se sienten amenazados.

—Disculpa pero... ¿quién eres? —preguntó Naho.

—Yo soy Reader, y trabajo en un rancho de slimes.

—¿Una qué? Nunca había escuchado acerca de eso.

—No tengo tiempo para charlar contigo, necesito cuidar de este amiguito. Si estás interesada, sígueme.

Mientras los tres caminaban hacia el rancho, Reader les contó sobre su trabajo. Dijo que es parte de una asociación que se fundó para proteger los slimes debido a los abusos que a menudo sufrían. La gente suele pensar que los slimes son malos y que atacan a cualquiera que ven, lo cual no es cierto. En el mejor de los casos la gente los perdona o simplemente huye, en el peor de los casos los lastima gravemente o incluso los mata. El trabajo de Reader es encontrar y ayudar a los slimes que ve que están en malas condiciones, también recoje a los slimes que están demasiado cerca de los lugares donde viven los humanos y, por último, hay un equipo especial que está en encargado de rescatar slimes pyro que utilizan los hilichurls para fabricar bombas. Una vez que los slimes estaban sanos, los dejaban libres en la naturaleza.

Una vez que llegaron al rancho de slimes vieron que estaba separado por secciones, cada tipo de slime tenía su propia zona ambientada. Había un lugar que funcionaba como un pequeño hospital, otro lugar era especial para slimes que tenían problemas para integrarse con los de su especie. Otra cosa que llamó su atención fue un cartel en la entrada que decía "ya basta del maltrato a slimes", y justo debajo de eso había un slime hydro el cual vestía un sombrerito de enfermero, pareció ponerse muy feliz al ver a Reader.

MY LITTLE GIRL, TenistasWhere stories live. Discover now