Neón Génesis: Espíritu heroico

Capitulo 3

"Oye, Shinji, amigo mío. ¿Te importaría cambiar el trabajo de limpieza conmigo?" Kensuke dijo con alegría forzada. No era realmente amigo de Shinji, pero se rumoreaba que le gustaba hacer tareas de limpieza. 'El pobre tipo no debe tener vida.' Por un momento, Kensuke sintió pena por el otro adolescente. Pero pasó rápido: tenía que ir a la sala de juegos con Touji.

Shinji estaba en proceso de guardar sus libros – las clases del día acababan de terminar. Hizo una pausa para considerar – no tenía nada para NeRV esta noche. "Seguro Por qué no."

Mientras el resto de los estudiantes salían, Shinji dejó caer su mochila y fue a buscar la escoba.

"Oh, hola, Shinji. ¿Qué estás haciendo aquí? Hoy fue el turno de Kensuke de limpiar". Hikari también estaba en el armario de las escobas, sacando algunos trapos para limpiar la pizarra blanca.

"Cambiamos".

Hikari puso los ojos en blanco mientras caminaban de regreso al salón de clases. "No, quieres decir que accediste a hacer su trabajo por él. ¡He oído hablar de ti!" Ella agitó su dedo hacia él. "¡No puedes dejar que los otros chicos te presionen así!"

"No me importa". En realidad, a Shinji le gustaba limpiar. Era tranquilizador, casi meditativo, y al mismo tiempo ayudaba a la gente. Fue un ganar-ganar.

"Sí, ¡pero no deberías ofrecerte como voluntario para hacerlo sin recompensa!" Hikari odiaba a los matones, no importaba si usaban la fuerza física, como en la escuela primaria, o la presión de sus compañeros, como en la secundaria.

Antes de que Shinji pudiera responder (o Hikari pudiera acumular una buena cabeza de vapor para ventilar), otra voz interrumpió, "Me gustaría ayudar también".

Ambos adolescentes se volvieron sorprendidos al ver a Rei de pie en la entrada.

Hikari dio un suspiro. Ella podría ayudar a Shinji a aprender a valerse por sí mismo más tarde. Se giró hacia Rei, "¿Por qué no empiezas arreglando los escritorios en filas ordenadas?"

Hasta donde ella sabía, Rei nunca antes había estado en la limpieza del salón de clases; la maestra le había indicado específicamente que no pusiera a la niña extrañamente tranquila en la rotación.

Con tres personas trabajando, la tarea fue rápida. "Entonces, ¿qué te gusta hacer? ¿Para divertirte, quiero decir?" Hikari era extrovertida y pronto comenzó a charlar con Shinji. Incluso se las arregló para incluir a Rei en la conversación, a pesar de que la chica de cabello azul estaba trabajando al otro lado del salón de clases la mayor parte del tiempo, probablemente era demasiado tímida para acercarse.

"No sé." Shinji se encogió de hombros mientras arrojaba su recogedor a la basura, "Realmente no tengo pasatiempos. Bueno..." Hizo una pausa, pensando. "Supongo que me gusta cocinar".

Hikari miró al chico. Parecía tan... doméstico. Para nada como Touji, que era atlético y... viril. Comenzó a sonrojarse ante ese pensamiento, así que rápidamente agregó: "¿Y tú, Rei? ¿También cocinas?".

"Sí. Yo cocino". Rei respondió. Vivir sola significaba que tenía que preparar todas sus comidas: arroz hervido y vegetales en el microondas. Miró a los otros dos. Esto fue... agradable. ¿Era esto lo que era tener amigos? Encontró esta experiencia lo suficientemente novedosa como para poder reprimir fácilmente sus impulsos "más básicos".

"Oh, eso es genial. Me encanta cocinar, pero no hay muchas otras personas en esta escuela que lo hagan. Llegó al punto en que el club de cocina tuvo que disolverse". Hizo una pausa, "¿Te gustaría venir a mi casa después? Podemos hacer la tarea y luego cocinar".