Neón Génesis: Espíritu heroico

Capitulo 19

Shinji se sobresaltó despierto. Era la mitad de la noche, y Hikari se movió suavemente a su lado.

Excepto que no era Hikari. Era otro producto de su imaginación al que se le había dado sustancia y una apariencia de independencia.

Cuando trató de recordar más de unas pocas semanas, su mente se negó a concentrarse en nada. Fue doloroso incluso concentrarse en ese momento. Pero Shinji estaba acostumbrado al dolor. Había seguido empujando, poco a poco, día tras día hasta que se dio cuenta de que no había nada allí. Tenía un espacio en blanco en sus recuerdos, extendiéndose hasta justo después del Tercer Impacto. Se sentía como la primera vez que piloteaba, cuando sus recuerdos y la realidad no encajaban del todo, excepto que esto se hizo con menos delicadeza y más fuerza bruta.

Todo fue una farsa, un fraude.

Respiró hondo y lo dejó salir lentamente mientras aceptaba todo esto.

En la quietud de la noche, podía sentir los bordes del mundo. Yacía en la cama respirando tratando de relajarse. Mientras su corazón latía, podía sentir una resonancia correspondiente a su alrededor. Era similar a cuando se había disuelto en la Unidad 01. Tocó los bordes de la realidad, los aceptó, se volvió uno con ellos. Y sintió algo dentro de él (algo que alguna vez había estado lleno de espadas) alcanzarlo, empujando y tirando y exigiendo que el mundo accediera a sus términos.

A falta de una palabra mejor, empujó.

Y la realidad se resquebrajó como un espejo roto, derramándolo fuera de la cama.

"¿Por qué te resistes?" la figura de Hikari se separó del 'suelo' gris. "Tratamos de brindarle todo lo que deseaba, para crear un mundo perfecto para usted". Se transformó en otra cosa, una amalgama que parecía una mezcla de Hikari y Rei, pero con partes adicionales del cuerpo saliendo de su piel. "Te dimos a Hikari, como deseabas".

"No quiero que decidas mi vida por mí. No quiero una falsificación 'perfecta'. Quiero el mundo real, con todos sus defectos". Shinji se puso de pie, sacudiéndose el polvo con insolencia antes de enfrentarse a la entidad.

"¿Quieres ser un héroe?" Su voz también se convirtió en una mezcla, volviéndose más estridentemente metálica, a medida que las dos voces se superponían. "Los héroes mueren de muertes sin sentido". La criatura saltó hacia Shinji.

Shinji se tambaleó hacia atrás sorprendido, apartándose del monstruo.

Pero incluso cuando se apartó de él, giró con un gruñido animal y se abalanzó sobre él de nuevo, alcanzando su garganta.

Shinji instintivamente levantó las manos: "Trace". Algo se formó en sus manos: parecía una espada púrpura roma, con runas trazadas en ella. Bloqueó el ataque del monstruo y aplastó la cosa-espada en su costado, enviándola deslizándose a través de la nada.

Shinji no tenía idea de dónde estaba - ¿Es? - había venido, pero podía sentir su poder. Cuando el monstruo se reunió para atacarlo de nuevo, levantó a Ea por encima de su cabeza, haciendo girar las runas grabadas en su longitud. Instintivamente, conocía el mantra adecuado.

Cuando las runas se enroscaron alrededor de la espada, se engancharon en el tejido de la realidad, como las rebabas se enganchan en un suéter. Tiraron, y el gris se estiró, siguiéndolos, antes de rasgarse a lo largo de las líneas de colores del arcoíris.

Mientras lo hacía, por un momento, Shinji pudo ver a Rei en la distancia. Cuando sus ojos se encontraron, ella se giró y corrió hacia él, "¡Shinji!"

Y entonces todo se desintegró. Shinji aterrizó torpemente en una polvorienta oficina abandonada.

"¿Rei?" La cosa-espada dejó de existir tan pronto como se distrajo. Shinji miró a su alrededor: el suelo estaba ligeramente inclinado y los muebles se habían deslizado hacia un lado. No había nadie a la vista: ni Rei, ni nadie más. Por la capa de polvo que estaba sobre todo, nadie había estado allí en mucho tiempo.