CAPÍTULO 5

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—Me sentí vigilada—

Esta mañana me levanté casi obligada de mi grande y caliente cama, aún tenía resaca del fin de semana, tenía un poco de dolor de cabeza. Estos últimos días estaba muy frío. La estación de otoño en Inglaterra suele ser templada y seca o húmeda y ventosa, esto debido a que el clima suele variar de un día para otro porque es cambiante. El final del otoño en Inglaterra suele ser el período más tormentoso del año, no estaba lloviendo pero el frío de invierno ya estaba cada vez más cerca.

Me alisté para ir a la universidad, cuando llegué me encontré con lucia y Andrés junto a mi casillero. Ambos estaban riéndose no sé de qué hasta qué me acerqué.

—Espero no estén hablando mal de mí —Me cruce de brazos entrecerrando mis ojos—.

—Obviamente no —rió lucia— Andrés cuéntale —Lo alentó a contarme—.

—Bueno es que... aquella chica con la que estuve el fin de semana tiene fetiches muy pero muy extraños —susurró rascándose la nuca—.

—¿Fetiches extraños? —pregunté en un murmuró— ¿Cómo cuáles?.

—Me pidió que le hiciera cosquillas mientras estábamos en el acto, ya sabes. Fue muy raro, lo demás no lo diré por qué eres muy inocente para escuchar esas cosas —arco una ceja—.

—Con eso me basta, no quiero saber más. A parte de eso, no saldré más a fiestas con ustedes.

—¿Por qué? —Preguntaron ambos al mismo tiempo—.

—Andrés —Lo miré— te fuiste con una chica y no volví a verte en el resto de la noche. lucia —la miré amenazadoramente— estuviste con Alan toda la noche bailando.. y a mí que me coma un perro.

—Lo siento, tú dijiste que ibas a sentarte y después no sé qué te hiciste. ¿Cómo es que bebiste tanto?

—Me encontré con Demián y sus amigos, me quedé con ellos ya que ustedes me abandonaron. Por cierto, gracias por cuidarme cuando llegamos a casa.

—¿Me perdí muchas cosas no es así? ¿Con Demián y Axel? ¿Entonces llegaste borracha a casa? —Preguntó Andrés con voz burlona—.

—Y le tuve que dar un baño por qué no podía con ella misma —Respondió lucia—.

—No volveré a beber, que vergüenza.

—¿Como fue compartir con el chico sexy de la universidad? —Interrogó lucia—.

—No fue gran cosa, solo jugamos "Yo nunca nunca" , luego él se fue. ¿Cómo fue estar toda la noche con mi hermano bailando? —Lucia se ruborizó notoriamente y rió con nerviosismo—.

—Fue increíble, Debo admitir que realmente me gusta Alan. ¿Eso te incómoda, o molesta?

—Absolutamente no —reí— me alegra que seas tú su futura novia, solo estaba esperando que lo admitieras.

Entramos a las clases de biología dónde pasaron las horas lentas y aburridas. Mi teléfono vibró, tenía un mensaje, cuando lo abrí para leerlo supe que era de mi psicólogo, avisándome que debía ir hoy en la tarde. Apagué la pantalla del teléfono soltando un suspiró que no pude contener. ¿Hasta cuando debo ir? —me pregunté mentalmente—. Cuando terminamos sonó la campana, fui a mi casillero para guardar mis cosas y luego me encontré con los chicos en el comedor. Nos sentamos todos en una mesa y pedimos algunas cosas para el almuerzo. Demián y Axel estaban sentados a unos metros de nosotros. Una chica se acercó a ellos, desde dónde estaba no podía escuchar nada de lo que hablaban, Pero la chica posó una mano en el hombro de Demián y luego se inclinó y colocó la mano en el cuello de este y lo acercó para dejarle un beso en la mejilla. En este momento me ardió el estómago, me removí en mi lugar algo incomoda y volteé hacia lucia para ver si ella vio lo mismo que yo, ¡Y SI! Ella vio perfectamente lo que estaba sucediendo. Alan y Andrés estaban distraídos. La chica se fue así como vino. Y que fue lo peor que Andrés hizo algo que después seguramente voy a reclamarle.

El amor no es suficiente. (EN PAUSA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora