Capítulo 80: Primera noche, parte 2

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Axel quería ver su expresión cuando lo tocara por primera vez en este lugar que tanto codiciaba.

Pudo ver que Kevin estaba a punto de quejarse, así que rápidamente aplicó una gran cantidad de este ungüento en su ano y empujó dentro de su dedo índice.

Por extraño que parezca, no sintió demasiada resistencia y, aparte de una pequeña mueca de Kevin, parecía estar tomándoselo bastante bien.

Comenzó a empujar su dedo de un lado a otro dentro de su ano y luego Kevin lo agarró de los hombros con las manos y se mordió el labio inferior, que era lo más sexy que lo había visto hacer.

Axel sintió que su paciencia no duraría mucho, así que metió su segundo dedo dentro, lo que hizo que Kevin maldijera y sintió que sus dedos se tensaban sobre sus hombros, luego le preguntó preocupado: "Bebé, ¿está bien?"

Kevin no estaba seguro de cómo responder a su pregunta.

Esta sensación de ser penetrado por sus dedos era demasiado extraña, y aunque era un poco doloroso al principio, después de unos cuantos empujones de ida y vuelta, el dolor desaparecía para ser reemplazado por un inmenso placer, especialmente cuando lo tocaba en un lugar específico.

Axel, que estaba a punto de retirar los dedos porque no quería lastimar a Kevin, finalmente lo escuchó decir: "Axel, maldición... Justo ahí... Sí, justo ahí... haaa... ¡Esto es tan bueno!"

Axel, que no esperaba esto, se sintió aliviado y encantado. Le gustaba mucho satisfacer a su hombre, especialmente porque ahora sabía a dónde ir para darle el máximo placer.

Le dijo después de besarlo ferozmente: "Kev, me estás volviendo loco bebé, te deseo tanto".

Entonces Kevin le dijo: "¿Qué estás esperando... Hazme tuyo entonces... Axel..."

Axel negó con la cabeza y le contestó mientras jugaba con su lengua con el lóbulo de su oreja: "Todavía no bebé, estás demasiado apretado, tienes que abrirte más para mí".

Axel luego mordió el lóbulo de su oreja y empujó un tercer dedo dentro de él, un gemido de dolor escapó de Kevin pero rápidamente fue reemplazado por gemidos de placer porque Axel seguía jugando con ese lugar que le daba tanto placer.

Axel no pudo contenerse más, Kevin seguía repitiendo su nombre entre dos gemidos y su miembro estaba a punto de estallar, realmente se estaba poniendo doloroso.

Entonces Axel le dijo porque quería mirarlo a los ojos cuando lo penetrara por primera vez, quería guardar el recuerdo de esa noche en su mente para siempre: "Nena... Ya estás lista, será más". doloroso que con mis dedos, pero ten paciencia, está bien, te prometo que no durará mucho y que después te sentirás incluso mejor que ahora".

Vio a Kevin volver a morderse el labio inferior y retiró los dedos, finalmente tomó su miembro en la mano y lo colocó frente a la entrada de su ano, lo frotó contra sus paredes y como no sentía resistencia se comenzó a penetrarlo.

No podía creer que finalmente lo estaba penetrando, pero era tan grande que solo la mitad de su miembro estaba dentro.

Le dio tiempo a Kevin para que se adaptara y, sin dejar de mirarlo, comenzó a moverse y usó embestidas cada vez más poderosas para introducir toda su longitud dentro de él.

Una vez que estuvo completamente dentro de Kevin, se le escapó un gemido de pura felicidad y vio que una lágrima le había rodado por la mejilla.

La lamió con su lengua mientras continuaba penetrando a Kevin una y otra vez, no pudo contenerse más, y cuando terminó de lamer su lágrima le besó los ojos y le susurró al oído: "Eres mío ahora, nadie más te tocará alguna vez, yo seré el único".

Kevin quería gritarle que saliera, era tan grande que el dolor era casi insoportable pero optó por creer en las palabras de Axel y trató de relajarse.

Axel le había dicho que pronto se sentiría incluso mejor que con los dedos, así que más vale que tuviera razón, porque de lo contrario no lo dejaría hacerlo nunca más, o invertiría los roles y sería el de arriba.

Cuando Axel sintió que las paredes de Kevin se detenían para tratar de empujarlo, finalmente pudo llegar de nuevo a ese lugar que más placer le producía.

Kevin también sintió la diferencia, y aunque todavía le dolía un poco, volvió a sentir ese intenso placer extendiéndose por su cuerpo, pero esta vez fue aún más intenso y fue mucho mejor que todo lo que Axel le había hecho.

Kevin ya ni sabía lo que estaba diciendo, estaba consciente de rogarle a Axel que siguiera penetrándolo y él también había cambiado de posición y sus piernas ahora estaban envueltas alrededor de la cintura de Axel.

Con sus manos había guiado la cabeza de Axel hacia uno de sus pezones sin vergüenza alguna y ya estaba a punto de correrse.

Pero no quería correrse tan pronto, así que se concentró en otra cosa y ayudó a Axel a profundizar aún más en él, cuanto más pudiera obtener esa intensa sensación de placer, mejor sería.

Axel que solo tenía un deseo, era que Kevin tuviera un momento inolvidable para su primera noche, se apresuró a llevar a cabo todos sus caprichos.

Ambos perdieron la noción del tiempo mientras se complacían mutuamente como si no hubiera un mañana.

Cuando Kevin le dijo que estaba a punto de correrse, aceleró aún más el ritmo de sus embestidas para darle el máximo placer.

Y cuando finalmente eyaculó, Axel inmediatamente se unió a él después de unos pocos empujones más y se quedó dentro de Kevin por un rato para disfrutar este momento con él.

Kevin finalmente lo empujó a un lado y ni siquiera se atrevió a mirar cómo se veía su cuerpo, había sentido que Axel le hacía chupones en todo el pecho, pero estaba demasiado inmerso en su propio placer para preocuparse por eso, y ahora él Sintió que el semen de Axel se escapaba entre sus piernas.

Miró a Axel y dijo en tono lastimero: "Axel, eso estuvo demasiado bien, pero ahora duele como el infierno, y... casi no puedo moverme".

Kevin tomó su mano y la puso en su muslo donde sentía que su semen fluía, dijo un poco avergonzado: "Ayúdenme por favor, esa no es una sensación muy agradable".

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