Capítulo 3

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Sentada en su pupitre mientras la profesora explicaba el termino de la derivación trataba de evitar pensar en César, si ya no estaban juntos fue por qué él lo arruinó todo
Lo odiaba, lo aborrecía, quería golpearle la cara en realidad
Pero debía ser honesta, jamás se atrevería a hacerlo, era demasiado blanda para lograrlo

- ¿Ailén?

Escuchó a su profesora, y al alzar la vista, la vio frente a ella

- Lo siento señorita, no la escuché

- ¿Te sientes bien? No te ves muy bien

- No no, está todo bien, perdone

La profesora asintió y volvió a la pizarra
Un pequeño papel le golpeó la cabeza, al girarse para ver el origen de aquel papel, vio a una Cristel mirándola
Abrió el papel

" Aili, ¿Que pasó con César? ¿Lograste que te dejará en paz? "

Ella solo se giró de nuevo y negó levemente con la cabeza
Ambas sabían que César no se daría por vencido, y eso era hasta cierto nivel, algo preocupante
Era uno de los chicos más influyentes del colegio, y podía intimidarlas si quisiera, pero claro que no Ailén, ni Cristel dejarían que las amedrentaran
El timbre sonó anunciando el final de la primera clase, su segunda clase era literatura inglesa, y la de Cristel, política

- Te veo en el almuerzo, en la mesa de siempre

- Te veo ahí Cris

Caminó rumbo a el salón de literatura y entró silenciosa
Adentro ya estaba Bastián con sus amigos
Él la miró y le dió una dulce y amable sonrisa que ella correspondió
Se sentó en un pupitre al fondo, le gustaba pasar desapercibida
Pero no era algo que pudiera elegir, en ese momento entró su peor pesadilla encarnada en una persona, César Villin
Suspiró pesadamente y se hundió en la novela romántica que estaba leyendo desde hace algunos días, "Somebody to love"

- Linda, deberías dejar de esconderte detrás de los libros

- Si lo hago o no, no es asunto tuyo Villin, ahora déjame tranquila

- Mi chica no debe ser una nerd, en su lugar, ¿Por qué no intentas arreglarte un poco más?

Trató de acariciar su cara pero ella lo apartó bruscamente

- ¡Te dije que me dejaras tranquila!

Su voz se escuchó por toda el aula dejando a uno que otro sorprendido, incluso a ella misma, nunca había tenido el valor de alzar la voz ante algo que le molestaba, o en este caso, alguien

- Déjame tranquila por favor, no quiero problemas contigo César

- Tu eres mía, no te olvides de eso, recuerda que te amo Ailén

Pequeñas lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos brillantes y cristalinos, se sentía acorralada por ese tipo, ¿No la había hecho sufrir suficiente ya? ¿Que más quería de ella?

- Sueltala Villin

Una voz se escuchó por sobre sus pensamientos y su acosador, era Bastián

- ¿Y que si no quiero Sallow?

Bastián soltó una media sonrisa antes de quitarse su chaqueta y golpear en la cara a César
Ella sintió que el tiempo se detenía por un momento, Bastián sacudiendo un poco su mano, César en el suelo, sobándose la mejilla, los demás chicos en el aula observando cuál buitres carroñeros
Todo pasaba tan lento, hasta que sintió unos cálidos brazos rodearla

- ¿Estás bien pequeña?

- S-si, estoy bien... Gracias por salvarme

- No fue nada, no podía quedarme de brazos cruzados

Depositó un pequeño y gentil beso en la frente de ella y se sentó a su lado
Tal vez para él no había sido gran cosa, pero para ella, ese beso aceleró su corazón como no podía imaginarse
Y al mirarlo sonreír, un rubor notable apareció en sus mejillas también

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