𝐖𝐚𝐧𝐭𝐞𝐝.

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Omegaverse.

Kitty, uno de los criminales mas buscados de toda corea del sur, por no decir que el segundo, no se sabia mucho de el, unos decían que era un omega otros decían que eran beta, su apodo se dio a conocer como Kitty porque aparecía y desaparecía silenciosamente y sin dejar huella.

-Jungwon, no puedes hacer eso.-Le dijo su mejor amigo limpiando uno que otro armamento que utilizaban para robar, ellos eran una banda de tres omegas, pero Jungwon trabajaba a veces solo para no arriesgar a sus amigos.

-¿Como que no?-Dijo con una sonrisa sobrada, a el le gustaba el peligro.

-¡¿Estas loco acaso?! robar el banco hangul es poquito ¡De seguro!-Le dijo Jake.

-Me excita de solo pensar en la cantidad que puedo sacar.-Dijo mientras reía de la cara de asco de sus amigos.

-Que asqueroso.

-Me dicen asqueroso y recuerdo que salieron con una erección del banco capital-se rio a una fuerte carcajada.

-No fue con lo único que salimos.-Dijo recordando con la cantidad de wons con la que salieron, la cual utilizaron para viajar por medio continente europeo.

-Si, si ya, ya me voy, nos vemos luego.-Dijo Jungwon colocándose su chaqueta de cuero negra con un maneki blanco con detalles dorados en su espalda.

-¡Cuídate idiota!-Fue lo ultimo que escucho antes de colocarse su casco y montarse en su moto azul rey de alto cilindraje, sonriendo cada que escuchaba el motor de su bestia rugir.

Sin mas salió a su camino, pues su pequeña base estaba saliendo de la ciudad y llegar a la ciudad le tardaba por lo menos 15 minutos en aquella moto, cuando llego al lugar del atraco, saco su colombina roja, la cual le encantaba comerse cada que robaba porque era como su manía o un habito que tomo, silbando entro al lugar sin llamar mucho la atención, su vestuario era "simple" según el, pues llevaba una falda negra con un arnés en una pierna siendo cubierta por ella donde llevaba un cuchillo, una camisa negra ancha y su chaqueta preferida, se coloco su mascara de gato maneki y todo comenzó.

Un pequeño y inofensivo omega robando uno de los mayores bancos de corea, vaya loco.

-Hola ¿podrías hacerme un favor?-Jungwon se coloco sobre uno de los mostradores de los asistentes bancarios.

-Señor no puede estar ahí.-Levanto la cara y antes de que digiera algo mas Jungwon le coloco el arma en la garganta.

-Yo puedo estar donde me de la gana.-Le dijo, alejándolo con el arma hacia atrás del mostrador la cosa después de eso se puso mas pesada, pues el que cuidaba el banco se acerco por detrás a Jungwon intentando atraparlo, pero, sus también reflejos de gato, hicieron que con el mango de la misma arma que tenia apuntada hacia el asistente le pegara en la garganta, noqueándolo al instante, Jungwon para asegurarse de que ningún asistente presionara el botón de emergencia que daba aviso a la policía de ladrones con varios tiros logro desconectarlos a todos.

Y esos tiros formaron pánico.

La gente comenzó a gritar y a correr por diferentes lugares, intentando salir del lugar, aunque alguien con una mascara de lobo entrando al lugar con una metralleta disparando hizo a todos agacharse al suelo con miedo.

-Que interesante.-Dijo Jungwon en un susurro mientras lamia la paleta que mantenía en la boca.

Jungwon se bajo del lugar y tomo una de las especialistas que el ya tenia visualizadas, una de ellas era la que abría la cabina donde se encontraba el dinero con una clave que ella solo sabia.

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