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Bueno, eso dependía mucho de cierta persona.

Observé el número que había anotado en un trozo de papel. Bueno, era ahora o nunca.

****

Felicidad... ¿Había alguna posibilidad de que pudiera sentirla de nuevo? Mi estómago estaba lleno de mariposas y mis manos temblaban mientras me vestía para esta reunión trascendental.

Todavía no podía creer que ella hubiera accedido. Ella no quería responder a mi pregunta por teléfono... quería verme, y ella había sido quien lo sugirió.

Le había preguntado simple y llanamente… tenía que saber cómo se sentía, si tenía la oportunidad… estaba pescando… oh sí… pero al final tuve que ir al grano y preguntarle sin rodeos.

"Lisa, ¿me amas?"

Silencio... mi corazón dejó de latir mientras esperaba.

"Michael... es tarde... necesitas descansar... has pasado por una terrible experiencia con el juicio".

“¡Maldita sea, mujer, respóndeme!” Tomé una respiración profunda, todo mi cuerpo temblaba.

"Vamos a quedar."

"¿Qué?"

“Mañana, ven aquí a Hidden Hills. Estaré... los niños se habrán ido. Alrededor de las 14:00. ¿Está bien?”

“Sí”, respondí sin siquiera pensar.

“Bien, hablaremos mañana entonces. Buenas noches... Michael.

Había algo en la forma en que dijo mi nombre en ese momento que envió escalofríos por mi espalda. Era lo opuesto a casual, cargado de significado. ¿Me atrevo a tener esperanza? ¿Podría ella posiblemente…?

La felicidad... ¿estaría a mi alcance una vez más?

***

Se veía más hermosa que nunca. Apenas podía creer que ella estaba aquí, parada frente a mí, invitándome a lo que una vez había sido nuestro hogar...

Miré alrededor del pasillo. Ella había redecorado de nuevo, desde la última vez que estuve aquí. Pero aún los fantasmas de años pasados ​​parecían rondar este lugar. Podía recordar su risa dorada mientras le contaba historias graciosas de los muchachos jugando en el estudio, o los técnicos estropeando el equipo en el escenario, o leyendo el correo de los fanáticos demasiado entusiastas.

Habíamos sido felices aquí... oh, tan felices. Entonces, ¿por qué todo había ido tan terriblemente mal?

Me preguntó si quería algo de beber, tan cordial... tan formal. No me importó... pero acepté el agua mineral con la que regresó momentáneamente.

Ella se sentó frente a mí. La necesitaba más cerca... a mi lado, quería tomar su mano, mirarla a los ojos... necesitaba que me rescatara, que me salvara de mi oscura existencia melancólica.

"¿Me amas, Lisa?" No iba a andarme por las ramas, había venido a buscar una respuesta. Se levantó retorciéndose las manos.

"Michael, ¿no es más complicado que eso?"

"¡No!" Declaré enfáticamente, levantándome para unirme a ella y sin poder tomar más la distancia, envolví mis brazos alrededor de ella por detrás y besé suavemente su cuello. “Mi corazón es tuyo, lo sabes. siempre lo ha sido Me estoy muriendo, Lisa…”....

¿Que crees que dirá lisa? ❤️❤️❤️❤️

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