Felicidad

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Durante una semana viví en un estado de dicha. Quería volver a intentarlo... a pesar de que un tornado se estaba acumulando sobre mi cabeza. El documental de Bashir estaba creando un nuevo conjunto de problemas y había rumores de que esto sería mi perdición.

Lo bloqueé todo... no importaba. Con Lisa a mi lado, ¿qué había que temer? Ya habíamos vivido un infierno antes, lo haríamos de nuevo.

Pasó la semana y ella me dejó plantada para el almuerzo. Traté de no darle mucha importancia, pero cuando ella no respondió a mis llamadas, el miedo se arraigó en mi corazón y comencé a entrar en pánico.

Fui a su casa. Fue entonces cuando lo conocí: Lockwood.

No estaba muy seguro de qué hacer con él, o quién era exactamente. Me invitó a pasar y me pidió que esperara. Qué extraño que un extraño me invite a una casa que alguna vez fue mi hogar. ¿Quién era él para Lisa?

Me dio una sonrisa triste y supe que todo había terminado antes de que abriera la boca. Había desperdiciado todas mis oportunidades y ella había decidido que no quería volver a intentarlo. ¿Pero por qué?

“Ya no puedo hacer esto, Michael. Estoy avanzando”.

La misma vieja historia, solo un tipo diferente en el bloque.

"No te creo".

“Lo siento… pero no tengo la fuerza… no puedo… no es mi problema…”

Sus palabras me hirieron profundamente. ¿Así que eso era yo? ¿Un desastre? ¿Y yo no era su desastre para aclarar? Entonces, ¿de qué había tratado la semana pasada? Esas noches ella yacía en mis brazos profesando su amor eterno. ¿Por qué había cambiado de opinión?

¿Fue obra suya? ¿Ese hombre de aspecto divertido que abrió la puerta?

“No necesitas explicarlo,” le dije tratando de aferrarme a algo de dignidad y orgullo. Me sentí como el tonto más grande del mundo. Había sido tan crédulo pensando que ella realmente se quedaría... ¿no me había enterado ahora?

“No te molestaré de nuevo,” le prometí. Me levanté de la silla y me fui, caminando con la cabeza en alto hacia la puerta. Corrió detrás de mí y me agarró del brazo. “En otra vida tal vez…”

“Sí, Lise, en otra vida…”

****

No había palabra que pudiera describir adecuadamente cómo fueron los siguientes 18 meses de mi vida.

Si recuerdo esos días oscuros, creo que es un milagro que haya sobrevivido. ¿O lo hice? Siento que perdí una parte de mí. Todas mis reservas fueron agotadas. Me quitaron hasta el último pedacito de pelea. Hubo días en los que simplemente quería terminar con todo y me preguntaba si la locura se detendría alguna vez.

Sneddon y sus compinches me querían encadenado, encerrado a salvo del mundo y su determinación de hacerlo me petrificó. Fue una vendetta personal, una cacería de brujas...

❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️