Chifuyu.
El día que conocí a Baji también conocí a Akina y me enamoré de ella.
Ese día después de que me defendió de aquellos tipos fuimos juntos al conjunto de departamentos donde subimos hasta el suyo y había una chica en el sofá.
- Baji!- grito corriendo a abrazarlo, y después me saludo con una hermosa sonrisa haciendo que mi corazón se acelerará. - Quien es el chico -
- Es Chifuyu -
- Ya veo, eres muy lindo- logre ver como Baji se molestó pero eso pareció no importarle así que sólo me sonrió. Antes de que comieramos Yakisoba fuimos al cuarto de Baji donde ella se dio la vuelta y el azabache comenzó a vestirse.
- Baji-san algún día podría considerarme como su vice-capitan -
- Acaso le hablaste de la Tokyo Manji- hablo la chica dándose la vuelta y viendo el torso de Baji para después sólo lanzarle un suéter y taparse la cara, estaba roja desde ese momento me di cuenta de sus sentimientos hacia el azabache pero aún así me aferre a que algún día ella llegaría a sentir algo por mi. Pero ahora ella sólo se quiere dar por vencido.
Aún no se reanudaban las clases por lo que de nuevo estaba en casa, pensando en que hacer para que Akina dejará de pensar mucho en su situación y se que era imposible pues esa molesta tos no la dejaba en paz y me preocupaba que un día llegará a toser frente a Baji. O que dejará de respirar pues me había dicho que sentía una presión que le impedía respirar correctamente. Me paré de la cama y camine a mi closet donde saque una chamarra, gorro, bufanda y un par de guantes corrí hasta la casa de Akina y después de que ella me abrió la arrastre hasta su cuarto.
- Chifuyu me puedes explicar que vas a hacer -
- Sacarte de aquí, haremos muñecos de nieve- ella sonrió y rápidamente se puso unas botas, agarrados de la mano salimos del edificio y caminamos hasta el parque, el cual se encontraba cubierto de nieve por completo.
Ella se tiro sobre el colchón de nieve y comenzó a hacer bolas de nieve yo imite su acción y comenzamos a hacer un muñeco de nieve, antes de terminar le lancé una bola de nieve comenzando así una guerra. Estaba por ganarme cuando la asusté y se tiro a la nieve.
- Vamos Chifuyu, hagamos Ángeles de nieve antes de que muera- hablo haciendo que me entristeciera ella en verdad pensaba morir así de fácil. Me tire a su lado y comenzamos a mover nuestros brazos y piernas ella sólo se reía y a mi me dolía el pecho de tan sólo pensar que está sería la última risa que escucharía por parte de Akina. No aguante más y comencé a llorar.
- Oye por que lloras la que va a morir soy yo -
- Por eso, te quieres dar por vencida sin antes darte la oportunidad de amar de nuevo me duele saber que estoy por perder a la chica que me gusta -
- Chifuyu yo... -
- Lo se, sí lo se no quiero que me lo digas desde que te conocí me di cuenta de como veías a Baji, a él lo admirabas cosa que no hacías con ningún capitán de las otras divisiones, ni siquiera con los miembros fundadores. Pero aún así creí que tal vez yo llegaría a gustarte- me quedé callado por un buen rato y después me reincorpore. - A veces me hubiese gustado que no fuera él y fuera yo. Yo no te lastimaria así como lo está haciendo él y se que tal vez quisieras hacerlo cambiar de opinión pero él jamás será como un príncipe azul y tampoco te tratará bien -
- Lo siento, en verdad lo siento jamás creí que tu sintieras algo por mi -
- Por favor sólo déjame hacer algo antes de que te marches -
- Que cosa- pregunto levantándose de la nieve.
- Déjame besarte, por favor jamás lo voy a hacer pero déjame hacerlo- ella lo pensó un poco y después asintió levemente. Cerró sus ojos y yo me fui acercando jamás creí que ella aceptaría que la besara. Antes de cerrar mis ojos solté un suspiró y roce sus labios sintiendo mi corazón acelerarse.
- Me gustaría sentir lo mismo que tu- dijo cuando nos separamos de aquel beso.
- Y a mi me gustaría ser esa persona de la que te enamoraste -
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PÉTALOS
FanfictionUn amor no correspondido. Una enfermedad mortal. Y una chica que no quiere morir, pero tampoco quiere perder sus sentimientos. - Tienes que tomar una decisión -