Sueño Contigo.

2:

Un chico se acomodaba la corbata mientras veía las noticias.

- Grandes y espléndidas noticias, el segundo príncipe de la casa Cecile: Damian Desmond asistirá al baile en el Castillo para celebrar sus 25 años ya cumplidos. Todos están.... - apagó la TV, estaba cansado de siempre aparecer en las noticias.

- Señorito Damian - lo llama el sirviente - Ya todo está listo - El sirviente se fue y él se dio una última mirada en el espejo suspirando.

- Todo estará bien, es tu fiesta de cumpleaños - bajó las escaleras saludando a todas las personas presentes mientras éstas aplaudían.

En una esquina estaba Camila quien tenía un vestido azul que combinaba con su cabello castaño oscuro. Relucía entre las personas por ser de la casa Cecile y de la familia real Breguet, sin duda, todos los caballeros presentes no dudarían en invitarla a bailar, pero ella, siempre se negó a sus peticiones.

Fue hasta que entró el llamado príncipe de la casa Wescott: Donovan, quien se quedó impresionado cuando vio a Camila.

Camila sintió sus mejillas arder cuando vio que el príncipe se le acercaba "Qué acaso no me recuerda?" Eso era lo que Camila se preguntaba, pero no debía dudar ni bajar la guardia, dejaría que él se le acercara.

- Hola, segunda princesa: Camila Breguet, me encantaría pedirle la próxima pieza, bailaría conmigo? - quería rechazarlo, pero aceptó bailar y la llevó al centro para comenzar a bailar. No demoró mucho ya que la música era corta, pero cuando terminó salieron de la pista y caminaron por el Castillo mientras conversaban.

- No odias a tu ex-esposa? - después de una gran conferencia, llega la pregunta del siglo.

- No, pero ella debe odiarme a mí. Me siento muy mal por haberla cambiado por otra, pero era que, ella no me daba suficiente amor.

- Y así te buscaste otra? - asintió - Pues, el divorcio es culpa tuya, por qué mejor no te disculpas con ella?

- Voy a tratar, pero como agradecimiento, tomemos una copa uno de estos días, si estás libre, princesa - le guiña el ojo y se va, pero gracias a caminar tanto se perdío en uno de los pasillos.

- Hola - llamó para ver si había alguien, pero una persona la agarró de la mano y la entró a la habitación emportándola contra la pared.

- Ay, perdón, fue que me asusté - dijo y quitó las manos - Perdóname, fue que tuve pánico al saludar tanta gente que me escondí de los sirvientes.

- Vaya, yo estaba perdida - ambos se sonríen - Por cierto, soy Camila Breguet, segunda hija de la casa Cecile y tú?

- Yo también soy segundo hijo de la casa Cecile, pero de la familia Desmond, un gusto, soy Damian.

- Esto debe ser inoportuno, se suponía que debía esperarte abajo - Damian la miró con cara de perdido - Es que nuestros padres nos comprometieron.

- Entonces puedo bajar contigo?

- Te sabes el camino? - asintió - Entonces vamos - Camila agarró la mano de Damian y fueron caminando lentamente mientras se contaban cosas hasta que bajaron y todos los invitados se sorprendieron.

- Buenas noches a todos y muchas gracias por venir. Primero quiero presentar como mi prometida a la 2da princesa de la casa Cecile: Camila Breguet. Haré todo lo que esté en mis manos para protegerla - luego se puso a dar una conferencia de cómo iría el Reino por un mejor camino y después pasaron a saludar a los invitados.

Terminó la fiesta y tan cansada que estaba Camila, decidió regresar a casa. Muy bien, estaba comprometida otra vez, había que superarlo. Pero al llegar a la mansión, la chica que estaba parada allí la impresionó.

- Qué alegría de verte, Anya - la chica le sonrió - Veo que has crecido mucho, hermanita - era su hermana mayor, Becky.